Soy hija de un pirata.
Mi Madre contrajo una enfermedad, y un año antes de su muerte ella me dijo el nombre de mi Padre, pero tambien me comento cual poderoso y fuerte es.
Quien diría que el encuentro con el, cambiaría mi mundo por completo y mi vi...
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Había pasado un mes desde que me despedí de Luffy y Ace, nuestra vuelta al mar, dio inicio a batallas con piratas de bajo nivel, que habían aprovechado la Guerra para adentrarse a los territorios de Padre.
Un mes luchando, lo cual sirvió para mi entrenamiento, me di cuenta que tenía varios puntos que arreglar cuando luchara cuerpo a cuerpo con la espada, Vista-nisan se ofreció a ayudarme, así empecé varias semanas de entrenamiento de espada, mis hijos mantenían su propio entrenamiento y poco a poco se iban acercando a la tripulación, aunque se les veía más cómodos con Padre que con los demás.
--¿Cuantas islas más faltan?-- Pregunte mientras me acercaba al círculo que tenían mis hermanos.
--No muchas, solo quedan tres, los equipos ya están divididos, un grupo de la primera división irá al Este, de la segunda división Irá al Sur y de la cuarta irá al Oeste-- Habló Marco quien estaba supervisando todo.
--Eso quiere decir que podemos descansar-- Pregunte hacia Marco, ante las miradas de todos.
--Si, así parece-yoi-- Le respondió Marco, curioso por aquella pregunta.
--Bien si me disculpan iré a descansar, estaré devuelta para la cena-- Tras decir eso Amaris se marcho a su habitación.
--¿Le ocurrirá algo?-- Pregunto Haruta.
--Mm...lo dudo, creo que solo debe estar cansada como todos-yoi-- Respondió Marco.
Tras escuchar las palabras de Marco todos asintieron, y se dirigieron a realizar sus cosas, después de semanas alejados del mar y de las rutinas en el Barco, cada hijo volvió hacer lo suyo pero esta vez con una meta en común poder ser fuertes para el futuro.
Las palabras de Marco hicieron que cada uno se movilizara a hacer sus cosas, menos cinco jóvenes que se miraban entre ellos, encontrando de alguna forma cómo ir a ver a su Madre.
--Quizás ellos crean que Mamá está cansada pero...-- Empezó Ame.
--Si, tienes razón algo le ha pasado...quizás le incomode nuestro aspecto?-- Sugirió Tengoku.
--Mm...si es así tomemos una forma más joven, después de todo Mamá ama a los pequeños-- Hablo Ryu a sus hermanos quienes asintieron.
Y así como se fue dicho, cada uno tomo una apariencia más joven de alrededor de niños de 10 años.
--Bien, vamos con Mamá-- Declaró Ryu.
(...)
--Carajo...-- Aquella palabra salió como un susurro mientras investigaba. --Como pueden siquiera desaparecer como si nada--
Se preguntarán en qué me encontraba, pues hace varios días después de volver al mar, me dispuse a investigar, ¿Que cosa?, se preguntarán, pues las armas ancestrales.
