𝐌𝐈𝐄𝐍𝐓𝐑𝐀𝐒 𝐘𝐎 𝐄𝐒𝐓É 𝐀𝐂𝐀 ✦ 𝘌𝘯𝘻𝘰 𝘍𝘦𝘳𝘯𝘢𝘯𝘥𝘦𝘻 ✔

14

Narra Giuliana.

Volvimos al hotel tipo dos y media, yo me estaba muriendo de sueño, literalmente me estaba durmiendo en la silla. Apenas llegue a mi habitación me puse mi pijama de Victoria's Secrets que era más corto que no sé qué, después me desmaquille y como caí a la cama me dormí, toda destapada y con medio orto y tetas afuera.

(...)

—Pero que culito —siento la voz de Julián y como alguien se sienta al lado mío.

Me levante exaltada. Sentí unas risitas.

—Trágame tierra —la voz del Dibu se escucha.

Cuando vi bien estaban Julián, el Dibu y Enzo sentados en mi cama mirándome.

— ¡¿Qué mierda hacen acá?! —grite parándome en la cama.

—Tu papa te está llamando hace media hora, son las doce del mediodía, minimi —me dice el Dibu.

—Váyanse así me cambio y bajo al restaurante —les ordene y ellos hicieron caso.

¿Cómo mierda habrán entrado? —me dije a mi misma.

Me puse una manga corta con la frase "Yo caí en el hechizo Cash" en rojo y un pantalón original de River —mi hinchada—, me puse mis ojotas y con el pelo desenredado para el culo baje; no me había lavado la cara, no había ido al baño, no me maquille. Así nomas baje.

—Pero que carita, eh —dice mi papá cuando me ve con tremenda cara de culo—. Menos mal que no tomaste, si no estarías mucho peor que ahora.

Le di un golpe suave en el brazo mientras me sentaba a su lado, había quedado en el medio de él y de Giovani. Estaban hablando de no sé qué, no prestaba nada de atención, parecía un zombi de re ultratumba. Llego la comida y me puse a comer mi milanga de carne con papas al bastón, mi comida favorita.

— ¿Tas bien? —me pregunta Gio.

— ¿Ah? Si —respondo asintiendo con la cabeza.

—No parece...

— ¿De qué están hablando ustedes dos? —interrumpe mi papá.

—Tu hija esta para atrás —le responde él.

—Mentira —exclamo.

—Aja, y el Duki es virgen —dice mi papá provocando risas por parte de todos.

Después de comer, unos empleados del lugar nos dijeron que esta noche había fiesta de disfraces en el boliche del hotel, así que todos nos fuimos a preparar para salir a comprar nuestro disfraz.

El Dibu con el Papu el Kun se iban a disfrazar de Alvin y las ardillas. Mi papá del malo de Avatar ya que muchos le decían que se parecían, Messi con Paredes de Batman y el Guasón; Julián de Spiderman. Enzo dijo que se iba a comprar el de La Máscara; Mac Allister del sombrerero loco. Tagliafico no sabía de qué disfrazarse, así que yo le dije que se disfrazara de Edward Cullen, porque no sé por qué, pero ese pibe me da vibras a Robert Pattinson. Los demás no dijeron de que se iban a disfrazar, querían que fuera una sorpresa.

Yo estaba entre un hada, una estudiante de Slytherin —mi bella casa de Hogwarts—, de Alicia en el país de las maravillas, de Maddy Pérez o de Carrie. Así que mientras pensaba me fui a cambiar.

Para salir a hacer las compras que tanto me gustan me puse una mini falda blanca que Luana me había regalado, un top del mismo color, que me cubría los pechos a la perfección. En los pies me puse unas botas a lo Ariana Grande y me planche el pelo dejándolo suelto. De maquillaje lo mismo de siempre: rímel con un brillo en los labios y corrector de ojeras. Me lleve una mini bag con mi celular, mi billetera y un tarrito chiquito con perfume de mi mamá. Cuando ya estaba lista, baje a la recepción.