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Narra Giuliana.



Hace cinco meses que estoy viviendo con Enzo, y la verdad, nos está yendo bastante bien.

Mi trabajo va muy bien, Enzo siempre que puede va a verme y se queda hasta que termine. Ahora está yendo con Olivia, ella se va a quedar más o menos dos meses con nosotros, hasta que Valen vuelva de un viaje con Rama. A varios representantes es llamé la atención y querían llevarme a Estados Unidos para empezar una carrera de cantante. Eso no es lo que yo quiero por el momento.

También me aceptaron en otro trabajo: hago uñas en un spa. No todos los días me necesitan ahí, así que cuando no trabajo me dedico a limpiar la casa y a pasar tiempo con Olivia; obviamente que esos días Enzo le dice a Mónica —la chica que trabaja en la casa— que no vaya, porque iba a ser al pedo si iba a estar yo.

Obviamente Enzo no quería que yo limpiara la casa si tenía a una chica para eso, me costó mucho hacerle entender que yo no voy a estar al pedo, porque me aburro y hago cagadas. Así que acepto y Mónica se toma varios días libres, algunas semanas o unos días. A veces yo trabajo toda la semana... esos días me arruinan.

Mis papás me llamaron hace un tiempo, me preguntaron qué onda con la convivencia con Enzo y todo eso. A ellos —por lo visto— les estaba yendo muy bien en Canadá. Les dije que para navidad iba a viajar para Canadá y conocer su casa, ellos me dijeron que querían ir para Argentina a ver a la tía. Así que vamos para allá, pero todavía no está decidido, porque faltan seis meses para Navidad.

Hace cinco meses que a él no lo veía. Al único que nunca había dejado de ver era a Enzo, extraño muchísimo a todos... De verlos todos los días a no verlos más, se me hace muy difícil.

Con Luana no me hablé más, desde ese día que fue a la casa de Julián dejó de hablarme. Lo mismo pasó con Sofía, yo le mandaba mensajes preguntándole como estaba y me respondía de la forma más seca posible. Así que decidí dejar se hablarle.

Básicamente la convivencia con Enzo me distanció completamente de las personas que más amaba. Pero sin embargo no me hacen falta, estoy bien sin esas personas. Tengo a otras con las que realmente estoy cómoda.

Las chicas del hotel me siguen hablando, hacemos video llamada cuando estoy desocupada y hablamos hasta tarde, si es que no tengo trabajo.

Con la Scaloneta tenemos un grupo y siempre están jodiendo, yo lleno del trabajo y hay más de mil mensajes de los cinco mismos de siempre: Otamendi, Dibu Martínez, Beckham, Dybala y Aimar. Obviamente después empiezan a escribir los otros y hay más de diez mil mensajes para responder, algunas veces le pregunto a Enzo de que están hablando y de ahí respondo, porque alta paja responder diez mil mensajes, que cinco mil de esos son puteadas de Ota.

Enzo estuvo pensando y charlando conmigo sobre casarnos y tener una familia. Eso es lo que yo siempre quise: formar una familia con una persona que sepa valorarme y amarme como merezco. Pero yo creo que es muy rápido, todavía no tuvimos nuestro momento de intimidad por el hecho de las veces pasadas con Mateo. Enzo respeta mi decisión, y eso es muy importante para mí.

Más de una vez él me decía "Mira ese vestido, imagínate vos en él" mientras pasábamos por una tienda de vestidos de boda. "Mira cuando tengamos a una mini Giuli y use ese vestidito" "Mira esa cuna, yo quiero una así para cuando tengamos a una mini Giuli". Me mataba de amor.

Enzo es muy compañero, siempre que metía un gol importante para él me lo dedicaba. Él siempre se preocupaba por mí, siempre me preguntaba qué necesitaba o lo que quería. Es un hombre muy sensible y vulnerable con las personas que ama de verdad, me di cuenta cuando lo vi con su mamá y su hija. Con sus compañeros y otras personas se hace el canchero, el que no se preocupa por nadie.

𝐌𝐈𝐄𝐍𝐓𝐑𝐀𝐒 𝐘𝐎 𝐄𝐒𝐓É 𝐀𝐂𝐀 ✦ 𝘌𝘯𝘻𝘰 𝘍𝘦𝘳𝘯𝘢𝘯𝘥𝘦𝘻 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora