El día de ayer terminaron con lo que tenían que decir y después de eso cada quien se fue a su habitación, ninguno salió para nada sólo cuando Jaehyun y Changbin se fueron a su cuarto. Nuestros padres se fueron por la noche y ya no supimos más de ellos. Serían los tres peores días de mi vida, a pesar de que ya estuvimos juntos tengo que decir que no es lo mismo estar por obligación a estar por no tan obligación. El punto es que no voy a soportar.
Era el primer día en el que íbamos a estar sólo los 7. Bajamos a desayunar. Ninguno probaba nada y estábamos en un silencio incómodo. Como nadie se veía con la iniciativa de probar algo, yo lo hice pues después de todo yo sí moría de hambre.
-¿Qué no piensan comer?-
Después de eso al unísono todos comenzaron a comer, ¿qué acaso era necesario decirles?. El desayuno terminó y cada quien se fue a su habitación.
-Ya me aburrí. Necesito ir a dar una inspección a la casa, talvez y nos quieran hacer daño y nosotros ni en cuenta.-
Seungsik: Ves muchas películas, mensita. Pero como gustes, sólo ya sabes que puedes y que no hacer. ¿Entendido? Porque siempre terminas haciendo lo contrario.
-Que mentiroso eres, grandulón.-
Mientras Seungsik y yo teníamos una pequeña guerra de palabras, Seungwoo trataba de dormir. Los días sin teléfono o algún juego iban a ser aburridos.
Seungwoo: ¿Se pueden callar? Estoy tratando de dormir y ustedes no me dejan.
-Que aburrido eres, Seungwoo. Tenían que ser gemelos. Ya me voy, los veo en unas horas.-
Salí de la habitación y me dirigí a investigar el piso en el que estábamos, tal vez seré una chismosa o algo por el estilo pero de verdad es que la curiosidad me gana y no puedo combatir con eso. Llegué a una puerta corrediza lo que parecía ser una sala de juegos, entré a ella y efectivamente lo era, salí de la habitación y seguí recorriendo aquella gran residencia. No quise ver mucho pues mi casa no era. Cuando llegué a la planta de abajo me dirigí a un pasillo que era largo y oscuro, podía sentir que el ambiente había cambiado. A pesar de ser una casa moderna parecía que había estado sola por mucho tiempo. Me percaté que había una puerta un poco abierta, pensé en no entrar pero terminé haciéndolo. Me impresionó mucho al ver una gran biblioteca, era bonita, elegante y tranquila. Alho bueno, me gusta leer pero a veces me aburre. Por afuera se veía que sería pequeña pero al ingresar era sorprendentenente grande. Era un poco oscura y era más fresco que cualquier lugar de la residencia.
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Estaba viendo con mucho detalle los libros que aparecían, hubo uno que llamó mucho mi atención así que lo agarré y lo abrí para leerlo. El libro era muy bueno, hablaba acerca de las estrategias que puedes tomar para poder liderar bien, para poder ganar una batalla, saber cuando tu contrincante va atacar y cosas por el estilo. No habían pasado ni siquiera 5 minutos cuando siento que alguien tomó de mi hombro y me susurro algo, haciendo que diera un pequeño gritito.
