ÓRBITA DEL PLANETA CRISTOPHSIS, DOS HORAS DESPUÉS DEL FIASCO DE LA MISIÓN DE RESCATE DE ROTTA EL HUTT
Las tres naves que conformaban el grupo de batalla regresaron a la órbita de Cristophsis para reagruparse y planear el siguiente movimiento. Al llegar, Lasky convocó a todos los capitanes a una junta.
—Buenas tardes, señores —comentó Lasky—. Los he reunido para planear nuestro próximo movimiento. Necesitamos llegar a un consenso sobre nuestro actuar en esta guerra.
—Y también debemos trazar un plan de acción contra una posible contaminación Flood —agregó Rtas—. Sin mencionar que hemos de reconsiderar nuestra disposición de ayudar a la República.
—Primero que nada —dijo Lasky—. Roland, ¿qué facciones controlan esta galaxia?
—Existen dos facciones principales —respondió Roland—. Tenemos a la República Galáctica, liderada por el supremo canciller Sheev Palpatine, cuyo ejército es comandado principalmente por los Jedi.
—Un montón de ignorantes pusilánimes que no saben comandar un ejército —agregó un maestro de nave—. Pero ese canciller... es sospechoso, algo no cuadra con él.
—Concuerdo —replicó Roland—. Su ascenso al poder no tiene sentido... Las IAs y yo indagaremos más al respecto.
—Bien, en lo que conseguimos esa información, sigamos con la reunión —comentó otro capitán—. Supongo que el otro bando son los que nos atacaron apenas nos vieron; los Jedi los llamaban separatistas.
—Otro montón de salvajes impulsivos que atacaron la flota sin provocación alguna —dijo un capitán—. Pero veo que superan grandemente en número a las fuerzas de la República.
—Cantidad no significa calidad, capitán —replicó un maestro de nave.
—Eso me recuerda que tenemos a Ventress en custodia. ¿Sus serpientes de la ONI ya empezaron a romperla? —preguntó un maestro de nave—. Porque si no han podido, nosotros tenemos nuestros métodos.
—Capitanes, maestros de nave, nos estamos desviando del tema —comentó Rtas—. IA, por favor, continúa con tu exposición.
—Como les decía, por el otro lado tenemos a la Confederación de Sistemas Independientes —explicó Roland—. Son un grupo de sistemas y corporaciones que no quieren someterse a la República y están comandados por el Conde Dooku y su ejército de droides.
—¿Es el mismo anciano que vio la Spartan Naomi en Tatooine? —preguntó el Capitán Kenway—. Porque, de ser así, ese anciano ya tiene los días contados.
—Sí, las grabaciones de su casco nos dan una identificación positiva —respondió Roland, proyectando una imagen holográfica del Sith—. El Conde Dooku de Serenno es el principal líder político de los separatistas y... esta... cosa... es el principal líder militar del ejército droide.
—¿A qué te refieres con cosa, Roland? —preguntó Lasky mientras abría la imagen adjunta—. ¡Santo Dios!
—Nunca había visto algo así —respondió Roland mientras mostraba la imagen del cyborg—. Se le conoce como General Grievous, es un cyborg asesino de Jedi.
—¡Ay, por Dios! —exclamó un capitán.
—Es lo más horroroso que he visto en toda mi carrera militar —comentó Rtas.
—¿Eso es un ser vivo? —preguntó Dola 'Vrarom.
—Caballeros, nos volvemos a desviar —interrumpió Lasky, reponiéndose del sobresalto—. Y, por traumático que sea, hay asuntos más importantes.
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El manto de la responsabilidad
FanfictionQue pasaría si un tercer super poder militar apareciera de la nada en una galaxia muy muy lejana.