Capítulo 19: HEROES DE RYLOTH

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ANTES DE EMPEZAR ESTE MONSTRUOSO CAPITULO NUEVO, QUIERO AGRADECER A Abyss-Reaper POR SU GRAN AYUDA

LESSU, CIUDAD CAPITAL DE RYLOTH

La holomesa de su sala de mando se activa revelando al Conde Dooku.

—Conde Dooku. Dijo Tambor haciendo una reverencia.

—Ahorrémonos las cordialidades, Tambor. Dijo Dooku. —Ya debes saber que nuestros enemigos planean un ataque a Ryloth.

—Lo sé, pero ya tengo a mi mejor capitán comandando la flota. Comentó Tambor. —El es capaz de lidiar con cualquier artimaña que la República o sus molestos aliados puedan hacer.

—No los subestime, estos meses han presentado una severa molestia para nuestro esfuerzo de guerra. Comentó Dooku. —Lograron dañar a nuestros super acorazados gravemente con un disparo de sus mejores armas y apenas pudimos retirarlas a tiempo como bien sabe.

—Estoy al tanto, pero los días de ventaja de todos ellos están por agotarse. Replicó Tambor. —Porque en estos mismos meses hemos hecho grandes avances en nuestro proyecto, nombre clave: reflejo.

—¿Qué tan avanzado esta ya el proyecto? Inquirió Dooku.

—Está adelantado, todo gracias a qué pudimos obtener acceso a la computadora de la armadura. Replicó Tambor.

—¿Que lograron aprender? Preguntó Dooku.

—Bastante, nuestros técnicos hicieron un mejor trabajo del esperado. Aseguró Tambor. —Lo más importante es que descubrimos como les da esa fuerza sobrehumana y reflejos superiores o iguales que los de los Jedi.

—Excelente, capataz. Replicó Dooku.

—Hemos aprendido mucho de la armadura y del prisionero. Comentó Tambor. —Aunque tuvimos que... Ponernos creativos para romperlo.

—¿Ponerse creativos? Preguntó Dooku.

—Tuvimos que desarrollar varios virus informaticos para acceder al sistema de la armadura. Comentó Tambor. —Asi como nuevos métodos de tortura para hacer que hablara... Parece un humano normal, pero es en extremo mucho más resistente que el promedio.

—¿El prisionero sigue con vida? Preguntó Dooku.

—Lo suficiente para seguir siendo útil. Replicó Tambor. —Aunque si es cierto que el virus era una apuesta, incluso si no lograba abrir la armadura por completo, al menos podríamos extrapolar el resto de la información.

—En estos tiempos no podemos depender de la suerte Tambor. Replicó Dooku. —Pero aun así es bueno oir que su estratagema funciono.

—Ya sabe que los de la Tecno Unión nos esforzamos mucho para no decepcionar. Comentó Tambor. —Incluso hemos creado contramedidas para sus Inteligencias artificiales si intentan hackear nuestras naves.

—Bien, pero nos estamos desviando del tema. Intervino Dooku. —Usted dijo que nuestro proyecto estaba adelantado.

—Así es, y gracias al intento de rescate fallido de los de la UNSC a su compañero nos proporcionó datos adicionales sobre sus "unidades especiales". Replicó Tambor.

—Si....los spartans, uno solo puede acabar con regimientos enteros de nuestros droides con sus propias manos. Comentó Dooku. —No podemos permitir que sigan entorpeciendo nuestros esfuerzos.

—Y por eso el PROYECTO REFLEJO nos dará la capacidad para lidiar con ellos. Replicó Tambor.

—¿Cuantas unidades se tienen listas? Preguntó Dooku.

El manto de la responsabilidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora