Nothing else matters ☆━ Kirk Hammett

Doce.

Kirk.

Lars se estaba empeñando en hacerme molestar, y no solo a mí, también a _____. Aunque ella no lo dijera, se notaba a kilómetros que estaba a punto de perder la cordura con él. Ayer fue la misma situación, un par de veces ella y yo hablábamos y Lars llegaba a ponerse en medio de los dos. Y creía que nadie se daba cuenta, pero todo el tiempo se la pasaba tirando indirectas sobre un espía, pero claro, nadie lo tomaba en cuenta.

No sé porque lo hacía, jamás había pasado algo así, y me afectaba mucho que uno de mis grandes amigos no me apoyara en esta etapa de mi vida.

Mañana será el cumpleaños de _____ y tenemos pensada una fiesta sorpresa. Sus amigos y Linda le dijeron que no podrán llegar a tiempo, si no que llegarían dentro de una semana, ella lo creyó y ha estado muy decaída, no me gusta verla así, pero significa que mañana se llevará una gran sorpresa a verlos todos reunidos. La traje conmigo en contra de su voluntad al estudio para que los chicos pudieran planear todo, no lo adornarían hasta mañana, mientras me encargo de darle a Lenne un tour por San Francisco.

Lo único que me preocupaba era que Lars se embriagara e hiciera una escena.

Decidí irme a refrescar un poco con agua al baño y dejar de escuchar las constantes quejas de Lars. Al salir me dirigí a donde antes estábamos y no había nadie, solo los instrumentos que tocábamos hace diez minutos.

Escuché algunas voces a lo lejos, como si estuvieran discutiendo afuera del estudio. Caminé dudoso hacia las voces y me encontré con James y Cliff pegados a la puerta mirándose el uno al otro.

Creo que Lars no necesitaba estar ebrio para armar la escena.

—¿Qué está pa...?—

—¡Shhht! —me calló James, poniendo un dedo sobre mi boca, después me acercó a él y me abrazó, tapando por completo mi boca.

Era dos voces, obviamente de ____ y Lars, estaban discutiendo.

_____ insistió en no venir, y debí haberle hecho caso, no necesariamente tendría que estar en el apartamento... pero pensé que si Lars la veía y la trataba más seguido, comenzaría a caerle mejor y él dejaría su actitud infantil, pero claramente no sucedió.

—No eres más que una groupie disfrazada de guitarrista de quin... —

Se escuchó un golpe a una mejilla, y de inmediato los tres nos miramos entre nosotros. Me safé del agarre de James para salir a calmarlos, pero Cliff volvió a tomarme y James lo ayudó. Me tenían agarrado de los dos brazos, yo intentaba forcejear pero no podía contra ellos. El idiota de Lars se había pasado de la raya, y eso no podía permitirlo.

—¿Qué demonios te pasa? —gritó Lars.

—No voy a permitir que me llames de esa manera, Lars. Ni tampoco que vengas a suponer cosas que son completamente estúpidas. ¿Quieres saber lo que realmente quiero?

—Cálmate, Kirk —susurró Cliff—. Deja que termine de hablar.

—Quiero a Kirk. No al guitarrista de Metallica, no al integrante de la banda destacada de la época, quiero a Kirk Lee Hammett, y no voy a dejar que vengas tú a decidir lo que siento por él, Lars. Tampoco voy a permitir que menosprecies mi trabajo y mucho menos a mi persona. Así que lo mínimo que te pido es un poco de respeto, hacia mi y hacia tu amigo, ¡apóyalo, maldita sea!, ¿no quieres convivir conmigo? ¡está bien, está jodidamente perfecto! pero deja de tratarme como basura y deja que Kirk sea feliz.

Mi estómago se revolvió al escuchar esas palabras. Dejé de forcejear y los chicos dejaron de tomarme con fuerza, sin embargo, sus manos seguían tomándome.