Veintisiete.

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—¿Qué haces aquí?

—Me llegó una especial invitación de tu amigo el celoso—bromeó apuntando a Pete con la boquilla de su cerveza—. No podía perderme esta fiesta—extendió sus brazos y Jolenne lo abrazó fuerte.

—Jamás pensé verte hoy, ha sido una grandiosa sorpresa.

—El glam metal te ha caído muy bien, mírate—ahora su boquilla la apuntó a ella—. Ya no eres más esa Jolenne que le temía a sus padres y vestía faldas con holanes.

—Pero mírate a ti, ahora te llamas Nikki y luces como... como siempre quisiste.

Asintió—. Estoy satisfecho.

La chica lo tomó de la mano—. Vamos a la barra, debes probar el tequila—lo guió entre toda la gente a un par de bancos y pidió dos diablos.

—Jolly debes apreciar esto que hago, estoy en una fiesta junto con los tipos de metallica, enserio te adoro.

—¿Qué?

—Vamos, ahí está ese rubio. ¿Acaso no lo has visto?

Jolenne giró de inmediato a la dirección que Nikki había dado. Por supuesto ahí estaba James con Lars, pero no había rastro del rizado.

—No me jodas—murmuró.

—¿También tienes problemas con ellos?

—No con todos—se limitó a responder. El bartender le puso en la barra los dos tragos y tomó un gran sorbo del suyo.

—Yo sí. Los detesto. Pero no hablaré de ellos. Necesito presumirte una espectacular experiencia que tuve con tu amor eterno Ozzy Osbourne—imitó la acción de Jolenne y tomó de su bebida.

—Por favor, no seas tan cruel. Harás qué mi experiencia con Bon Jovi sea un cero a la izquierda—bromeó.

—Lo vi meterse hormigas.

—¿Por la nariz? ¡estás bromeando!

—¡Te lo juro! Fue muy alocado. También bebió de su orina, ese tipo no es de este mundo, estoy cien por ciento seguro de ello.

—No te creo—por supuesto que le creía. ¿Quién no pensaría algo así de Osbourne?

—Pues créelo. No estaba solo, así que personas podrían testificar a mi favor.

—No sabes como desearía haber estado contigo.

—Puedes tenerme envidia, mi estilo de vida es algo excéntrico.

—A comparación de ti, parece muy aburrido—suspiró—. Apenas pude salir de la cama hoy.

—Algo no anda bien, ¿cierto?—se acercó un poco más y habló con un tono más serio.

—Acertaste—frunció los labios.

—¿Qué pasa, Jolly?, ¿es sobre tus padres?

—Mis padres son el menor de mis problemas—le hizo una seña al bartender para que le hiciera otro trago igual—. Estoy en una situación muy complicada con alguien pero... no quiero hablar de eso. Realmente quiero tomarme esta noche para pensar en literalmente cualquier cosa menos en él.

—Él—repitió, y ella asintió—. No lo pensé de ti.

—¿De qué hablas?

—Por dios, Jolly, eres la mujer más fría que he conocido.

—Que no me haya obsesionado contigo no quiere decir que soy fría, Fr... Nikki.

—Eso me dio justo en el ego en su momento, pero no lo digo por eso. Por favor, te conozco, jamas habrías permitido que "él" te tuviera con ese ánimo.

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⏰ Última actualización: Jul 29 ⏰

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