Capítulo 4

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MARATÓN 1/2

STILES

Seguí a la psicóloga hasta llegar a su despacho. Me pidió que le enseñara mi espalda por lo que me di la vuelta y me subí la camiseta para enseñarle.

Estuvo callada unos minutos hasta que por fin hablo.

-Se llama figura de Lichtenberg. Aparecen en las víctimas alcanzadas por un rayo.- me bajo la camiseta y me doy la vuelta para mirarle- El hecho de que salga en ti después de una inyección de liquen de los lobos... es a la vez significativo y extraño.

-¿Por significativo y extraño quieres decir esperanzador y optimista?-digo con sarcasmo.

-Cuando las marcas desaparezcan, el Nogitsune volverá a controlarte.- veo cómo va hacia un estante y coge dos botes.

-¿Pastillas para dormir?- veo como me ofrece uno de los botes y yo lo cogo.

-Anfetaminas- aclara- Dormir es exactamente lo que no tienes que hacer. Eres vulnerable cuando duermes.

-¿Solo tengo que mantenerme despierto?-hasta la pregunta me parece absurda.

-Solo por ahora.- suspira- Si tus amigos no han descubierto nada para cuando desaparezcan las marcas... Iré a buscarte.

-¿Para decirme que hacer?-pregunto entre extrañado y algo esperanzador.

-Para ponerte una inyección. Bromuro de pancuronio.- me enseña el otro bote que tiene en la mano.

Me quedo mirándola con una mueca pero una tercera voz se escucha detrás mía.

-Causa parálisis respiratoria.

Me giro y veo a Lana apoyada en el marco de la puerta. ¿Que hace aquí? Me quedo pensando en si ha estado escuchando toda nuestra conversación.

-Eso suena muy parecido a la muerte.- le espeto con sarcasmo.

-Se utiliza para la inyección letal.-me aclara Lana como si eso sirviera para aliviarme mientras se acerca a nosotros.

-Lana, es una conversación privada.-le aclara la psicóloga.-

Lana solo se encoge de hombros como si eso le diera completamente igual y la mira.

-Vine por mis pastillas, pensé que no había nadie pero....-pone una sonrisa inocente.

-Entonces cuando el Nogitsune me posea, ¿vas a matarme?.- ignoro totalmente que Lana está aquí y miro a la psicóloga frunciendo el ceño.

-Voy a hacer lo que siempre he hecho. Mantener el equilibrio.- me mira seria.

-Muy bien.-suelto una risa irónica- Gracias por las drogas ilegales.

Me doy la vuelta guardando el bote de pastillas en mi bolsillo del pantalón y salgo por la puerta. Al cabo de unos segundos siento unos pasos seguirme.

-¿Nogitkone?- escucho a Lana preguntarme en mis espalda- Nunca oí esa palabra, ¿que significa? ¿por eso estás aquí?

-Si, por eso estoy aquí Lana.- paro de caminar- Y es Nogitsune.- la corrigo y me giro a encararla en cuanto veo que no hay nadie en el pasillo en el que estamos- ¿Acaso te gusta escuchar conversaciones ajenas? ¿No te enseñaron que es de mala educación?

-Lo cierto es que tengo muy buena educación.- me sonríe orgullosa- Pero eso da igual, solamente fui a por unas pastillas y de casualidad escuché.

-¿Ibas a por unas pastillas? ¿No se supone que tienes que tomarlas con receta de un especialista?- alzo una ceja curioso y pillandola de lleno.

BEHIND YOU || stiles stilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora