"Cuando te vuelva a ver"

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CAPÍTULO 6Me deshice del uniforme de porrista, el cual era incómodo y atrevido, además de que me traía malos recuerdos, el recuerdo de cuando mi "chico tímido de la biblioteca" comenzó a salir con Nataly

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CAPÍTULO 6

Me deshice del uniforme de porrista, el cual era incómodo y atrevido, además de que me traía malos recuerdos, el recuerdo de cuando mi "chico tímido de la biblioteca" comenzó a salir con Nataly. Aunque había sido muy extraña la manera en la que Jack había hablado de ella. ¿Se había dado cuenta de mis sentimientos por él? Tal vez no quería lastimarme.

Compré unos shorts de licra del mismo color, pero más largos y una blusa que no me apretaba las costillas, si iba a ser porrista iba a ser bajo mis términos. Cuando llegué al entrenamiento con el uniforme nuevo, la mayoría de las chicas me miraron como bicho raro, pero pude soportarlo. En cambio, Sam parecía más amigable conmigo.

SAM- ¿Estrenando uniforme?

LISSA- Sí, el uniforme anterior me tenía un poco harta.

SAM- Sabía que eras inteligente.

Durante el entrenamiento, ella y yo trabajamos en pareja y para la mala suerte de las demás, todo nos salió bien. Sam era grande y fuerte y yo era ligera y elástica. Eso hizo que el entrenador pusiera los ojos en nosotras y de ser la "decepción del equipo" pasamos a "no lo están haciendo tan mal".

Sam seguía siendo un misterio para mí, no hablaba mucho sobre su vida o su familia, se limitaba a charlar sobre la escuela y un poco de su trabajo. Ella trabajaba en un cine, el de moda, se encargaba de vender los dulces, proyectar las películas y limpiar las salas, dependiendo del día. Y después de tres horas arduas de entrenamiento, parecía que habíamos roto el hielo.

SAM- Tengo entradas gratis para este fin de semana, ¿quieres venir?

LISSA- ¿Para qué película?

La cara se le iluminó y parecía que le costaba hablar de la emoción.

SAM- ¡El diario de una pasión!

LISSA- ¡Dios mío! ¡Claro que sí! Llevo esperando mucho tiempo por ver esa película.

SAM- Yo también. Amo a Ryan Gosling.

Las dos gritamos emocionadas y por primera vez teníamos algo en común, además de odiar a las porristas.
De pronto, recordé que Jack iría al cine con Nataly.

LISSA- ¿Cuándo dijiste que es la función?

SAM- El viernes a las 8.

LISSA- No puedo, no puedo.

La cara me cambió y me puse nerviosa.

SAM- ¿Por qué?

Me quedé callada y dudé en decirle la verdad. Pero ella lo entendió sola.

SAM- Ya sé por qué lo dices, porque Nataly va a ir al cine con tu chico.

LISSA- ¿Cómo sabes? ¡No es mi chico!

SAM- Una de las ventajas de pasar inadvertida, es que puedes estar en todo y observar todo sin que nadie se dé cuenta. Es obvio, tú lo miras de una manera especial...

LISSA- ¡Claro que no! ¿De dónde sacas eso?

SAM- No trates de fingir conmigo, te he visto mirarlo varias veces. Además, escuché lo que dijo Nataly sobre él. Pero no creo que vayan a la misma función, ella no se ve tan lista como para querer ver "El diario de una pasión"

Sus palabras me dejaron desarmada.

LISSA- Está bien, vamos. Yo tampoco creo que vayan a la misma hora. Nos vemos el viernes a las 8 pm en el cine.

Sam tomó sus cosas y caminó a la salida.

SAM- Muy bien, lleva unos Kleenex, seguro vamos a llorar. Por ciento, tú también le gustas a él.

Sam salió del vestidor y la duda se me metió a la cabeza.

LISSA- ¿Le gusto? No lo creo.

Los cortos de "El diario de una pasión" dejaban ver que sería la película del año, mi favorita de todos los tiempos. Era una historia de amor pura, había estado esperando por verla durante muchos meses y no iba a perder esa oportunidad.

Llegó el viernes y estaba lista para ver la película, llegué al cine con ropa cómoda y Kleenex como habíamos quedado.
Estaba esperando a Sam mientras veía a todas las parejitas adolescentes, unos compraban boletos, otros palomitas, en fin. Me preguntaba cómo sería ir al cine con un chico, porque en mi vida solamente había ido con Zac, un chico de mi anterior escuela, y había sido un completo desastre, así que no podía contar como una cita. Tal vez porque siempre tuve esa idea de que una cita debía de ser como en las películas, pero ¿quién debía de pagar los boletos? ¿Estaban los hombres obligados a pagar las palomitas y el refresco? ¿Tenían que pasar su brazo por detrás de tu cuello para luego besarte?
Estaba sumergida en mis preguntas cuando apareció Sam con el uniforme típico del cine, pantalón y playera azul con amarillo y un gorrito que más bien parecía de marinero. Estaba lista, con palomitas y refrescos para las dos.

SAM- ¿Estás lista?

LISSA- ¡Sí! He estado pensando mucho en lo enamorada que voy a salir de la película.

Las dos reímos y corrimos a la sala.
Fuimos de las primeras en entrar, nos tocó en un buen lugar, no tan cerca de la pantalla. Las luces se pagaron y comenzaron los cortos de las demás películas. Las personas estaban calladas y todo era paz y armonía, hasta que escuché una voz chillona y odiosa.

NATALY- Vamos, Jack. Es por aquí.

Mi pesadilla se estaba haciendo realidad, Jack venía entrando a la misma sala con Nataly. Me encogí lo más que pude en el asiento y miré a Sam, aterrorizada. Ella también estaba sorprendida.

SAM- No puede ser.

LISSA- Te lo dije. ¿Te puedes quitar ese gorro, por favor?

SAM- No, ¿por qué?

LISSA- Porque creo que llama un poco la atención y no quiero que me vea.

Sam se quitó el gorro y también se encogió un poco en el asiento.

SAM- No dejes que te arruinen el momento, nosotras venimos a ver a Ryan y ellos no lo van a impedir.

Tenía los nervios de punta, se sentaron cuatro filas enfrente de nosotras, pero Sam tenía razón, no podía salir corriendo solo por ellos.

"Tengo que relajarme y disfrutar la película" pensé. Y acto seguido, no podía concentrarme por completo en lo que estaba viendo, unos segundos veía la película y después los miraba a ellos. Jack estaba de lado derecho y Nataly del izquierdo.
Él estaba recargado en su brazo derecho, lo cual era bueno porque no estaban haciendo ningún contacto físico, pero a mitad de la película, ella le tomó el brazo y lo hizo que lo pasara por detrás de su cuello. No podía ver sus caras, pero me dolía saber que estaban haciendo lo que los novios hacen en el cine, y si se besaban, no lo iba a soportar.

Salí de la sala para tomar un poco de aire, pensé en irme a mi casa, pero no sería justo para Sam. Respiré profundo y puse las manos en mis rodillas, tratando de descasar. Entonces, sentí una mano en la espalda.

"¿Lissa? ¿Estás bien?"

Pegué un salto del susto, cuando me enderecé ahí estaba Jack, mirándome sorprendido, extrañado.

LISSA- Hola, sí.

JACK- Te vi a lo lejos y pensé que te sentías mal.

LISSA- ¿Cómo? ¿Me viste adentro en la sala?

Él estaba cada vez más confundido.

JACK- No, no. ¿Estamos en la misma sala? ¿Tú me viste?

Me puse nerviosa y no sabía qué decir.

LISSA- No, no sé. Pero no importa, es viernes y todos venimos al cine. ¿Vas al baño?

JACK- No, en realidad salí a comprar palomitas. ¿Y tú? ¿Con quién vienes?

LISSA- Yo, con...

JACK- No me digas, seguro vienes con el chico con el que estás saliendo.

Ni siquiera recordaba que le había dicho que salía con alguien.

LISSA- No. Bueno, sí.

Jack se veía un poco apagado, ¿le molestaba que saliera con alguien? No, debía ser mi imaginación.

LISSA- ¿Y tú? ¿Vienes con Nataly?

Estaba un poco incómodo.

JACK- Sí, vine con ella. Estamos viendo al "hermoso Ryan Gosling"

Los dos reímos y nos quedamos callados.

JACK- Bueno, será mejor que te apures. Tu novio se ha de estar preguntando por qué tardas tanto.

LISSA- Claro, claro.

JACK- ¿Cómo dices que se llama tu novio?

¡Demonios! ¡Maldición! Eso no lo había pensado, me ganaron los nervios y...

LISSA- Ryan.

JACK- Pero... ¿Ryan? ¿Cómo el actor?

Estaba confundidísimo.

LISSA- Sí, ¿qué coincidencia, verdad? Me tengo que ir. Nos vemos en la escuela.

Salí corriendo y Jack se quedó parado tratando de entender todo.

Regresé a mi lugar y sabía que nos teníamos que ir de ahí.

LISSA- Nos tenemos que ir. Jack sabe que estoy aquí.

SAM- No, vamos a quedarnos y en cuanto termine corremos a la puerta de atrás, yo sé como salir sin que nos vean.

El resto de la película estuve pensando en lo que había pasado, ¿Ryan? ¿Cómo se me había ocurrido ese nombre?

Terminó la función y salimos corriendo de la sala, esta vez me había salvado. Aunque tenía esa piedrita en el pecho que se siente cuando tu amor tiene otro amor. Me fui caminando a casa, viendo las decoraciones de Navidad. Las casas estaban llenas de luces y en las ventanas podía ver los árboles de Navidad alumbrados. Me preguntaba cómo sería caminar esas calles tomada de la mano de Jack, sería un sueño.

Faltaban dos días para Navidad, estaba haciendo mucho frío y el ambiente era de fiesta. La gente estaba relajada, los profesores no estaban dejando tanta tarea y todo era paz y tranquilidad. Llegué al entrenamiento y aunque Nataly y Jack estaban cerca, me propuse ignorarlos, actuar como si fueran un alumno más.
Al terminar, un chico de la escuela se acercó a mí y me entregó una flor con un sobre rojo. No sabía de qué se trataba.

LISSA- Oye, no. Yo creo que te equivocaste. Esto no es para mí.

CHICO- Sí, ¿tú eres Lissa, no? Me lo dieron para ti.

LISSA- ¿Para mí? ¿Quién?

CHICO- No te lo puedo decir.

De inmediato abrí el sobre y adentro había una hoja que decía.

"Lisa, me gustas" "Espero que te guste esta flor"

La nota no decía quién la mandaba, y mi primera reacción fue: "¿Lisa? Aghhhh, soy Lissa con doble S"

Y después me pregunté: ¿Será una broma? ¿Quién podría haber mandado esto? ¿Jack? Ya quisiera.

Miré a mi alrededor y todos me veían con curiosidad, y entre odas esas caras me encontré con la de Jack, quien me miraba serio.

PalomaDF

"CUANDO TE VUELVA A VER"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora