"CUANDO TE VUELVA A VER"

Capítulo 32

Nueva Orleans

LISSA- ¡Shane! ¿Qué pasó?

Shane estaba muy nervioso y pensé lo peor, mi corazón se comenzó a partir, cuando él dijo...

SHANE- Lissa, lo tenemos.

LISSA- ¿Qué? ¿Cómo?

SHANE- ¡Lissa, lo tenemos! Tenemos a Jack con vida.

No lo podía creer. ¿Alguna vez escuchaste hablar de los milagros? Bueno, ese día estaba ocurriendo uno. Jack estaba vivo, estaba a salvo.

Me olvidé del teléfono y Sam y Claudio me miraban aterrados, cuando comencé a gritar con alegría.

LISSA- ¡Lo tienen, lo tienen! ¡Jack está a salvo! ¡Jack va a volver a casa!

Claudio y Sam se abrazaron y lloraban de alegría. Los tres brincamos como niños pequeños, nunca en la vida había estado más feliz.

Volví a tomar el teléfono.

SHANE- Espera a que te llame para darte las indicaciones, los van a traer a USA y tienen que pasar por un proceso. Te mantendré al tanto.

Era una realidad, me iba a encontrar con Jack.

La vida, automáticamente, se volvió brillante y feliz, el dolor que había tenido en el pecho por todo ese tiempo, mágicamente se había ido. Ahora podía ver un futuro, había regresado a la vida y tenía ganas de vivirla plenamente.

Pasaron 4 días, en los que Jack y los demás soldados fueron atendidos por desnutrición y algunas infecciones, y el gran día, el día del reencuentro, sería al día siguiente. La noticia se había filtrado y todos los medios de comunicación esperaban su llegada, era la noticia del momento. Estaba muy emocionada. ¿Qué había hecho para merecer tanta felicidad?

Parecía que Charly también lo sentía, porque ahora, más que nunca quería salir y jugar. Lo llevé al muelle y me senté un momento a ver el río, a pesar de estar muy feliz también me sentía nerviosa, no podía dejar de pensar en: ¿Qué iba a pasar cuando nos viéramos? ¿Me iba a reconocer? Tal vez en ese tiempo yo había cambiado o había envejecido un poco y tal vez no le iba a gustar. Me preguntaba cómo debía de tratarlo, una terapeuta había hablado conmigo sobre el asunto para darme indicaciones de lo que debía hacer con una persona como Jack, porque su situación había sido muy dura y probablemente estaría traumatizado. Sin embargo, estaba dispuesta a ayudarlo y a sanarlo con todo mi amor.

De pronto, mientras estaba sentada, Charly corrió lejos de mí y cuando me di cuenta, ahí estaban Blake y Lila. Lo vi y se me partió el corazón, porque lo había lastimado. Se acercaron y me levanté a saludar.

BLAKE- (REFIRIÉNDOSE A LOS PERROS) Parece que se huelen a kilómetros.

LISSA- Ya conoces a Charly, únicamente sigue las órdenes de Lila.

Apenas pudimos sonreír, el momento se puso incómodo y supuse que era momento de pedir disculpas.

LISSA- Blake, yo...quería disculparme por...

Entonces, él me interrumpió.

BLAKE- No, Lissa. No hay nada que disculpar. Sé lo que está pasando.

Sentí vergüenza y bajé la mirada al piso.

BLAKE- Tú no hiciste nada malo ¿okay? La noticia está por todos lados y yo no puedo hacer otra cosa más que alegrarme por ti. Todas las historias de amor deberían de terminar como la suya.