Capitulo 39

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La mente de Miyuki era aun mas borrosa, su vista estaba cansada. Comenzó a ignorar lo que sucedía en su alrededor como un cuerpo sin vida, desconectada de todo, hasta que nuevamente una técnica de hielo cubrió su cuerpo, sentía qué realmente moriría en algún punto, aunque así era su situación actual.

la aparición de una nueva persona integrándose a la pelea, era algo cómica. Tsukumo Yuki. Una de los cuatros grado especial en Japón.

El hielo comenzó a deshacerse de un momento a otro.

- Este.. Es el mundo del futuro. - sonrió de manera macabra Kenjaku. Un montón de maldiciones salieron de su alrededor.

La profunda mirada de Miyuki logró ubicarse y entender lo que sucedía y lo que pretendía hacer y sin importar lo mucho que su cuerpo doliera, comenzó a correr con ira. Siendo vista por Yuji.

- ¡Maldito! - soltó apenas, sin aliento. Kenjaku sonrió con la prisión confinadora en mano. - ¡Gojo-sensei!!

Yuki detuvo a Miyuki al ver el estado en que se encontraba, viendo como apenas podía correr correctamente.

- Adiós.. Itadori Yuji. - Miro a Miyuki sin quitar aquella sonrisa que ponía inquieta a la albina. - Adiós, Pequeña Miyuki.

Yuji fijo su mirada en aquella caja qué sostenía una de sus manos. -¡Gojo-sensei!!

- Espero mucho de ambos.

Miyuki se detuvo a ver aquella mirada dedicada a ella, sintió como si sus palabras demostrarán un cariño, ¿por que sintió como si fuera familiar? Esa mirada.. ¿Por qué se expresó como si realmente la conociera..? ¿Como es que sabia su nombre?.. Trago en seco. Algo sucedía.

Sus rodillas no aguantaron mas y cayeron a tierra. Su cuerpo se vino abajo como costal de papa, sin siquiera mover un musculo, sentía como unos brazos delgados envolvían su cuerpo, hasta que ya no dio mas. Simplemente colapso. sus ojos se cerraron de golpe entrando en un profundo sueño.

Pero siendo sincera aquella imagen, proyectada en su mente no la pudo dejar de ver.



...


Nadie podía saber lo que puede pasar en una noche y los cambios que vendrán.



- Megumi.. Ya lo encontré. - Murmuró Miyuki con una gafas oscuras, desde la otra línea. Desde un punto lejos, observó absolutamente todo, incluso su piel seguía erizada al presenciar tal personaje familiar. - Ya te envío la ubicación.

Pudo sentir como este murmuró, "bien" para luego cortar. No sabía decir si las cosas entre ellos estaba estable o si realmente no, pero dudaba del amor profundo qué sentía hacia el azabache.

Y las cosas en megumi era tan similares. Miyuki era su "todo".

Quizás el estar bien en su relación es una opción. Sabía qué el no la dejaría sola. No desde la conversación que tuvieron hace unos días, cuando aun estaba en recuperación.

...

En recuperación, Miyuki era demasiado terca y eso se hacía notar. No podía estar en cama, no cuando aun habían cosas que resolver.

Miyuki observo la foto mas preciada de su vida. Su dedo índice recorrió toda la fotografía lentamente, hasta llegar a la cara sonriente de su hermano pequeño. Estaba rota, se odiaba a si misma. No recortada la voz de su hermano menor..

El era tan alegre, animado, energético. Su mente solamente pensaba en el cruel destino que muchos niños de su edad le toco experimentar.

No quería hacerse sufrir más. Solo desearía tener a su lado por un dulce abrazo. Yuji lo hacia recordarlo vagamente. Eran igual de sensibles y amigables, siempre traían ese brillo en sus ojos tan resplandeciente. Siempre que compartían, no evitaba pensar en Yuji como su hermano menor. Alguien a quien proteger del duro mundo.

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⏰ Última actualización: Dec 12, 2023 ⏰

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Bella Nieve | Megumi Fushiguro x Reader Donde viven las historias. Descúbrelo ahora