🪄✩｡:•. ━━ 𝐋𝐄𝐆𝐀𝐂𝐘 ┃ ❝Despierta del sueño. Despierta ahora, que hoy, nadie ha muerto. Pero mañana... mañana, tal vez, alguien lo haga.❞
Un oscuro pasado sobre el mundo mágico.
Un tipo de magia poderosa, encubierta y arcaica.
Verdades a medias...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
╚═══════ 🥀 ═══════╝
1ro de Septiembre, 1976.
— ¡Este es el año, muchachos! Este es el año en el que finalmente sucede. -exclamó James, la insignia de plata de Prefecto brillando en su pecho- Seis años de espera y todo vale la pena.
Remus había renunciado a su puesto tan pronto en cuanto salió de la enfermería luego de casi haber matado a Severus Snape. No se sentía merecedor de su puesto, y creyó que James sería más útil que él. Todos se sintieron realmente tristes antes la noticia.
— No puedes estar hablando de lo que creo que estás hablando. -Remus arqueó una ceja hacia la parte superior de su libro-
— ¡Pues créelo! -James sonrió como borracho- Lily Evans definitivamente se dará cuenta de que está loca por mí, puedo sentirlo.
Jean rió levemente tratando de disimular.
— ¿Seguro, Potter? -Sirius también sonrió- Has tenido estos sentimientos antes.
— Lo he hecho, sí. -asintió James con respeto- Tienes razón, Canuto. Pero algo es diferente esta vez, puedo saborear el amor en el aire.
— Okey, esto es nuevo... -susurró Jean desviando su mirada hacia Remus-
— O lujuria. -dijo Remus, pasando la página de su libro- Probablemente estas captando las hormonas furiosas que salen de estos idiotas. -asintió con la cabeza a Sirius, quien buscaba a su novia por la ventanilla del tren, y a Peter, quien a pesar de haber terminado con Dorcas antes del verano, seguía buscándola-
— ¿A quién llamas idiota, Moony? -replicó Sirius, haciéndose el ofendido- Realmente no puedo evitar enloquecer a las mujeres con el deseo. -rió-
Jean soltó un bufido de burla. El verano había transcurrido muy diferente a otros años, cada vez más amargo y espantoso; mucho había cambiado. A la pelinegra le costaba entender como Remus había logrado perdonar a Sirius después de todo. No había pasado hacía mucho, el mes de agosto se encargó de restaurar la amistad entre ambos. Pero Jean-Rose simplemente no podía hacerlo. Le costaba confiar en Sirius, hablar con Sirius, mirar a Sirius; incluso respirar cerca de Sirius. ¿Cómo podría llamarlo amigo y pretender que nada había ocurrido luego de su maldita broma?
— ¡MALDITO SIRIUS BLACK, PODRÍA MATARTE! -el chillido furioso de Mary podría haber hecho añicos un cristal. Sirius prácticamente saltó medio metro de su asiento-
Peter y Remus rieron satisfechos ante el susto de Sirius, burlándose de él. James rió a carcajadas, pues nadie estaba más satisfecho con la reconciliación de Remus y Sirius, que James. Había vuelta a su traviesa personalidad luego de ello, sonriendo ampliamente.
