🪄✩｡:•. ━━ 𝐋𝐄𝐆𝐀𝐂𝐘 ┃ ❝Despierta del sueño. Despierta ahora, que hoy, nadie ha muerto. Pero mañana... mañana, tal vez, alguien lo haga.❞
Un oscuro pasado sobre el mundo mágico.
Un tipo de magia poderosa, encubierta y arcaica.
Verdades a medias...
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20 de Febrero, 1977.
La cena de otra tarde helada, pero no tan glaciar como las de diciembre y enero, estaba por comenzar. Jean-Rose estaba ahí sostenida de Remus y sentía que se ahogaba en incertidumbre otra vez. Las últimas noches no podía dormir. Había estado recurriendo a la lectura la mayor parte de sus noches, hasta que ya no podía mantenerse con los ojos abiertos y caía dormida. Pero anoche, ni siquiera podía concentrarse en un libro. Así que James ayudó un poco; hacía meses no dormía junto a James y cuando lo hizo se sintió una niña pequeña otra vez. De todas maneras, no pudo dormir, Potter tampoco pudo luego de que Jean mojara de lágrimas su almohada. Jamie era buen amigo, y la contenía como nadie jamás lo hubiera hecho. Una hora de sueño le bastó a James Potter cuando su amiga por fin calmó su llanto, pero, de todas formas, Jean no había logrado pegar un ojo.
La mañana siguiente, y agradecida de que fuera sábado, tampoco fue un poco más reconfortante. No luego de El Profeta anunciando un nuevo ataque a dos familias, una de muggles y la otra de un mago mestizo con una muggle. A Remus le puso los pelos de puntas cuando leyó que al mago mestizo lo habían mordido. Jean, en cambio, sintió que sus entrañas dieron un vuelco y luego se estrujaron dentro de ella al ver, que el primer ataque fue a sólo un barrio de donde sus padres y hermano vivían. Y, para mal de ella (y tal vez para los demás también), el no haber dormido, no la ayudaba a mantenerla cuerda en lo absoluto.
El día había sido largo y Jean-Rose todavía tenía que seguir buscando en registros de Hogwarts y en libros a medio terminar, algún tipo de información útil. Y luego, regresaría a dormir con James y, quizás, llorar de nuevo, pero estaba segura de que luego de eso quedaría dormida casi de inmediato.
-¡Lily! -anunció Remus en cuanto la pelirroja tomó lugar junto a ellos para tener la cena-. La profesora McGonagall me pidió que te avisara que ella los acompañará esta noche, a James y a ti, en su patrulla de Prefectos y... ¿te encuentras bien? -dijo en cuanto la vio distraía.
-¡Sí, estoy bien! -respondió levantando su cabeza. Sus ojos verdes ligeramente rojos.
-¿Lily? -cuestionó Marlene.
-¿Estuviste llorando? -preguntó Mary.
-¡No! -exaltó severa-. Estoy perfectamente bien... ¿alguno a visto a Potter?
-Ahí vienen -expuso Peter señalando la entrada, quien siempre parecía tener habilidad para encontrar a James. Potter y Black recorrían el pasillo de camino a sus amigos sintiéndose enormes. Riéndose entre miradas cómplices y pavoneándose.
James y Sirius se sentaron junto a sus amigos, parecían ser los único dentro de Hogwarts que se divertían luego de un trágico día.
-¡Evans! -comenzó James coqueto y arrogante, Lily no se atrevió a mirarlo-. La profesora McGonagall me informó que...
