🪄✩｡:•. ━━ 𝐋𝐄𝐆𝐀𝐂𝐘 ┃ ❝Despierta del sueño. Despierta ahora, que hoy, nadie ha muerto. Pero mañana... mañana, tal vez, alguien lo haga.❞
Un oscuro pasado sobre el mundo mágico.
Un tipo de magia poderosa, encubierta y arcaica.
Verdades a medias...
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6 de Enero, 1975.
Las vacaciones por las fiestas habían terminado, y los estudiantes de Hogwarts volvían a sus clases de internado.
James tenía altas expectativas sobre encontrar a Sirius en el tren, de regreso a Hogwarts. Pero no fue así, ni siquiera Regulus estaba.
— Tal vez, usen la conexión Flu. -sugirió Peter-
— Tal vez... -contestó muy desanimado James-
James había estado cargando el regalo de navidad para Sirius toda la mañana, estaba ansioso por ver su cara al descubrir de lo que se trataba el obsequio. James fue el más aburrido durante vacaciones, simplemente su humor y ganas no eran las mismas que estando con Sirius. Remus, Peter y Jean trataron de hacer un gran esfuerzo por levantar su ánimo. Incluso Marlene, Mary y Lily se unieron a su vagón. James no intento nada con Lily durante todo el viaje, solo la veía sentada junto a Remus y riendo con él y los demás.
— Ey... -susurró Jean- estará bien, ¿de acuerdo?
— Sí... solo que, no hemos tenido noticias de él durante todas las vacaciones. Sólo piensa, luego del incidente con Regulus, el compromiso y la escapada a casa, no creo que sus padres lo traten mejor.
— Sé que es difícil, pero pensemos en positivo. Sirius es fuerte y valiente, puede con todo. -terminó de animar Jean, James asintió más seguro-
Luego de unas horas, los merodeadores y sus amigas estaban de regreso en Hogwarts, donde al ingresar al castillo, se dirigieron al gran comedor para el banquete de bienvenida y tomar lugares, ya que varios alumnos se encontraban desde antes por la conexión Flu.
De inmediato cruzaron las grandes puertas del comedor, en sus lugares de siempre, estaba allí.
Era Sirius.
El mayor de los Black se puso de pie para recibir a sus amigos, con su cabeza en alto, su sonrisa estaba brillante como siempre, y sus ojos grises fijos con disposición. Mientras los merodeadores comenzaron a acercarse a Sirius, Jean comenzó a correr hacia a él. Y la mirada de Sirius de enfocaba en la de ella.
Jean se abalanzó sobre los brazos de Sirius, él la atrapó y la sostuvo con fuerza.
— Por Merlín, ¡estas bien! -chilló de alegría Jean-
De inmediato cuando Jean dejó los brazos de Sirius, James fue el siguiente en abalanzarse sobre él.
Remus miraba sonriente la escena, y luego de James, Lupin y Peter también le regalaron un abrazo a su amigo, y tan pronto al separarse, tomaron sus lugares en la mesa de los Gryffindor.
