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—Tal vez no quiere que te vayas y ya.
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Los de la tripulación de Foxy empezaron a abuchear a Luffy porque aún no salía.
¡Y ahí está!
Entrando desde la esquina derecha, viene del mar del Este, el líder de un insignificante barco pirata, pero con una recompensa de 100 millones, apodado el pirata Sombrero de Paja, Monkey D. Luffy.
Abrí los ojos sorprendida cuando Luffy se quitó la capa de boxeo que lo cubría.
¡Miren todo eso, Luffy con un afro y listo para pelear con todo!
—Se ve bien... divertido —reí un poco.
—Es verdad —apoyo Robin y las nubes se dispersaron dando paso al sol.
Oye asistente vete por favor, solo estás estorbando aquí.
Mire al lado de Luffy, Usopp era el asistente.
No me había fijado en él.
Y tampoco es necesario que yo esté aquí por más tiempo, así que también me iré.
Me aferré al asiento cuando este empezó a elevarse y dar una mejor vista a la pelea.
Sonreí y levante una mano mientras gritaba apoyando a Luffy.
—________-san, nosotras somos del otro equipo —dijo Robin riendo divertida.
—Es verdad —bajé un poco la mano, me encogí de hombros y volví a levantarla —¡Tú puedes, Luffy!
Reímos cuando las personas de nuestro alrededor nos miraron mal, les guiñe un ojo y se sonrojaron dándose la vuelta ignorando el tema anterior, reímos un rato más y pusimos atención a la pelea.
Muy bien, muy bien, los espectadores están muy emocionados. Es perder o ganar a un tripulante, el combate final de Davy Back Fight tiene a 500 personas en una cuerda floja. ¡Es un enfrentamiento de una ronda sin límite de tiempo!
Foxy, el Zorro Plateado contra el Sombrero de Paja Luffy. Un enfrentamiento entre los 2 líderes de los 2 barcos, han apostado su suerte en este gran combate, y ahora...
—¡Vamos Luffy! —grité.
¡Suena la campana!
Deje de sonreír cuando Foxy ralentizo la mano de Luffy, lleve una mano a mi frente y Robin rio por mi acción.
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𝐂𝐎𝐋𝐎𝐑𝐄𝐒 𝐘 𝐏𝐑𝐎𝐌𝐄𝐒𝐀𝐒 || Monkey D. Luffy
FanfictionLuffy x lectora | ❝¿Acaso existe algo más valioso que tus sueños?❞ Nuestra palabra y nuestros actos nos acaban definiendo como personas. La voz es lo único que nadie puede quitarnos, pero la perdemos poco a poco cuando hacemos promesas que sabemos q...