V. A. T. (Sanwoo)

16

Wooyoung salió recibiendo miles de preguntas más, Yunho y Mingi preguntaban hasta las cosas más impensables.

—Por favor dígame, vamos, yo le contaré lo que quiea pero dígame si ya lo hicieron.

—Song Mingi —dijo irritado, no, ya no iba a soportar más de ese tipo de preguntas—, si, ya lo hicimos Song, son dos años, es obvio que pasó.

—Pero... ¡oh por dios!—Dijo divertido.

—Ya basta de preguntas, vayan a sus habitaciones chicos, descansen, bañense y mañana a las cinco de la mañana debemos encontrarnos, las pruebas empezarán por la tarde, empezaremos por fuerza —miró a Jongho—, confío en ti Jongho, te necesito descansado, este es tu fuerte, nos toca contra MX, los demás den lo mejor de ustedes para los siguiente días. Uniformes limpios y bien aseados.

Todos asintieron reconociendo perfectamente la voz de Wooyoung cuando algo era demasiado importante. Cada uno se regresó a su habitación, Wooyoung se fue pero escuchó los cuchicheos de los miembros hablando de la noticia que les acababa de dar.

Se dirigió a su cuarto, en el camino divisó a San, por primera vez él fue quien se se dirigio a este.

—General Choi, quisiera hablar con usted unos minutos.

Este con la seriedad sepulcral característica suya le hizo caso de inmediato.

—Acabo de hacerlo y obtuve una respuesta muy positiva, no espero haga lo mismo pero al menos me siento bien cumpliendo con mi parte. —Dijo Wooyoung con mucha seriedad una vez alejados de todos, no dejaban de estar en la mira de muchas personas.

—Bien, general Jung, gracias por el aviso, me comunicaré lo antes posible con usted, adiós. —Dijo con sequedad ante de irse.

Wooyoung salió del lugar solo ignorando la conversación, esperaba que a San le fuera bien con la noticia.

San esperó a que su entrenamiento terminara para poder hablar con ellos, no sentía miedo pero sí curiosidad del como podrían reaccionar.

—Necesito darles una noticia, sé que no es normal hablar de estos temas. No se los daría de no ser por algo que es de suma importancia para mí —Tomó unos segundos para pensar en sus palabras—. Hace mucho que generé sentimientos por un general que quizás les resulte difícil de creer.

—Es el general Jung. —Dijo Hwasa con una sonrisa picarona.

—¿Cómo lo...? —San se quedó estupefacto.

—Lo sabía —gritó Hwasa— era muy obvio, dios, se los dije.

—Ya, todos lo sabíamos Hwasa. —Se quejó Jennie.

San rió con ganas.

—¿Tan evidente fui?

—Demasiado mi estimado general. —Dijo Yeosang con voz calma.

—Bueno, en ese caso supongo que quitando las sospechas les notifico que llevo una relación con él.

—Usted ha estado besándole los pies por años mi querido general, si no tenía algo con él entonces nos hubiera dicho que estaba detrás suyo y por su orgullo esperaba que fuese lo primero. —Dijo Jennie.

San suspiró.

—Estoy en una relación con él, no deben preocuparse por mí. —Dijo con sarcasmo elevándoles una ceja.

—Nos alegra general, ya nos tenía con la duda, no es por ofender pero usted lo mira como si no existiera otro hombre en este mundo y ha sido demasiado explicito, por lo menos cuando no hay más gente cerca, parecía perder cuidado cuando solo estabamos nosotros. Sobretodo cuando nos llevó a felicitarlos, eso fue demasiado obvio, dios, solo por favor sean lo más discretos posibles. —Comentó Jennie.