Capítulo 30 "La tentación de un oscuro"

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Me escabullo por las multitudes de estudiantes. Intentando no chocar con nadie. No soy buena corriendo, solo caminando rápido. Y no es lo mismo, es extraño, pero no logra ser lo mismo. Así que sigo mi camino. Observó el mensaje una ultima vez para comprobar el lugar a donde tengo que llegar y sigo el trayecto.

Cuando encuentro a Max, me lanzó a abrazarlo fuertemente, rodeandolo con mis brazos alrededor de su cuello y al ser más alto por algunos centímetros, tengo que verme obligada a ponerme de puntillas para hacerlo. Suspiro mientras me relajó, la tensión que había estado teniendo disminuye.

—Alguien me ha extrañado.

Me río contra su hombro.

—Sí, estar sola mucho tiempo me hace mal. Necesito al demente que tengo de mejor amigo, enfrentarme a la vida sola nunca ha sido divertido.

Siento la desesperación en mis palabras y me percató que si lo he extrañado exageradamente, las cosas anteriores me han dejado sin muchas fuerzas y él es mi mejor amigo, mi apoyo. Lo necesito incondicionalmente. Todos necesitamos sentir el apoyo de un ser querido de vez en cuando para seguir adelante.

—¿Que paso? —me pregunta, sin apartarne de él.

—Max, hay tantas cosas.

—Dimelas ahora, me preocupas.

Me separó de él, pero no lo miró a los ojos, desvío la mirada hacía un punto en el suelo.

—Alguien dejo flores en la tumba de mamá y papá.

—Pudo haber sido cualquiera. Hasta aquel hombre que conociste la otra vez.

—No —niego—, la vez que lo vi no dejo nada. Han dejado rosas rojas, Max.

—Una broma de mal gusto, pudo haber sido algún estudiante, sabes que... ya sabes...

—Aman molestarme por el color de cabello. ¡Son unos inmaduros! ¡Cualquiera se tiñe el cabello a rojo o a peores colores!

—Pero tu no te lo teñiste, además nadie te cree que sea natural. Sabes...

—... que me toman por llamativa emo que hace lo que sea por llamar la atención. Pero sea lo que sea, estoy cansada. Además descubrí que Chris se ha estado robando mis fotos.

Abrió los ojos con sorpresa.

—¿Que?

—Tenía mis fotos debajo de su televisor. Max, Chris es un maniático.

—Esto si es grave.

—Lo sé.

—Ya me lo quitaste por completo.

—¡Max! —le grito furiosa por no tomarse las cosas serias en serio—, esto es serio.

—Lo siento, sabes que no puedo dejar de decir estás cosas. ¿Algo más que quieras agregar a tu lista de preocupaciones?

—Quiero encontratar a mi familia.

Su expresión se endurece, frunce el ceño algo irritado.

—Mamá y yo somos tu familia.

—Lo sé Max, pero esto es exasperadamente.¿ Y si es que alguien mato a toda mi familia y por eso no se de ella? ¿Y si el color de mi cabello tiene un secreto muy oscuro y ellos saben, entonces mi padre tratando de evitarlo me alejó de ellos?

—¿Y si tienes mucha imaginación? ¿Y si estas viendo mucha televisión?

—¡Max! Yo de verdad hablo en serio.

—Soy tu mejor amigo, soy tu hermano sexy, soy tu familia... —pensando en que me dirá que deje esto así, siento que me daré la vuelta y lo dejaré solo—, y por eso precisamente voy a ayudarte con esto.

Black AngelsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora