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Analizando fanfic sobre famosos #8

Famoso: Michael Jackson

Nombre del fanfic: Price of fame

Categoría: Malo, pero los he visto peores

Bueno, con Michael Jackson voy a hacer una excepción y pondré dos fanfics malos y uno bueno. El que les expongo a continuación es de mi autoría, y lo criticaré desde mi punto de vista como lectora. Si los autores de los fanfics malos a los que les he dado cuero anteriormente vienen a parar a este libro por alguna casualidad, sepan que no es mi intención ofenderlos ni me creo superior a ustedes. De hecho, tengo mucho que aprender, y de ahí la autocrítica. Pero por favor, piensen un poquito en las cosas que van a publicar antes de hacerlo. Si van a crear algo sin sentido, háganlo para ustedes mismos. Una vez, yo escribí una historia sobre Stars Wars (no en Wattpad, sino en una tablet) en la que Luke Skywalker necesitaba una guardaespaldas porque lo querían matar, y ya me dirás tú para qué querría Luke a alguien que lo cuidara, si según los libros de la Trilogía del Imperio, él era capaz de vencer a un ejército entero sin la Fuerza, usando solo su ingenio. Y tenía más cosas absurdas, como que el fantasma de Anakin no quería que ellos estuvieran juntos, que la protagonista acaba en el planeta del que es oriundo el Maestro Yoda, que al final resulta ser hija del Emperador y se pasa al Lado Oscuro de la Fuerza (pero logra volver a la luz gracias al amor que siente por Luke), y otra sarta de tonterías más de las que, por suerte, ya no me acuerdo. Pero bueno, al menos yo tuve la decencia de no publicar ese sinsentido. Además, cuando tú compartes algo con un grupo determinado de personas, así sea la más simple de las opiniones, siempre te expones a que te critiquen, te juzguen, a alguien no le guste y hasta a que te insulten gratuitamente. A mí también me ha pasado que, en uno de los primeros fanfics que escribí, hubo un comentario que más o menos decía: “La protagonista era interesante, era una chica fuerte, pero la arruinaste porque metiste muchas escenas eróticas”. Puede que sea verdad, no digo que no; pero todos nos equivocamos, y se aprende de los errores más que de los aciertos. Puede que el día de mañana me encuentre un libro semejante a este donde analicen un fanfic mío y digan que es una porquería. Pero bueno, yo no me voy a ofender por eso (principalmente porque no es fácil que yo me dé por ofendida).

A ver, que ya estoy desvariando como siempre.

Después de esta larga y aburrida introducción, les resumiré que mi fanfic trata sobre una periodista muy popular, profesional, centrada en su trabajo y algo chapada a la antigua, que conoce a Michael Jackson porque él admira su trabajo periodístico. Básicamente, porque es una de las pocas periodistas realmente objetivas que él conoce, además de que arriesgó su vida para salvar a unos niños durante un reportaje particularmente peligroso, lo que la convierte en una especie de heroína de la vida real.

Ellos comienzan una relación, tienen ciertos malentendidos que se solucionan rápidamente, y luego ella lo abandona porque no quiere ser parte de la fama que lo rodea, no sin antes haber tenido un hijo con él. Por supuesto, al final escoge su felicidad por encima de sus miedos y se quedan juntos.

Así como lo planteo, suena bastante bonito. Sin embargo, en mi intento de humanizar a la protagonista, darle fobias, defectos físicos (a pesar de que la describo como hermosa, refinada y elegante) y ciertos prejuicios, he agregado muchas escenas que no eran necesarias para el argumento. Además, la protagonista es demasiado perfecta. Es buena con todo el mundo, todos la quieren, siempre toma las mejores decisiones, y el único defecto que se le podría señalar es su egoísmo al decidir que es más importante no figurar como la pareja oficial de Michael Jackson ante los medios, que la felicidad de ambos; pero eso parece más una conveniencia de guion, que un defecto real.

Otra cosa es que la protagonista tiene 24 años y es virgen. Lo siento, sé que es un cliché absurdo, pero no puedo evitar que me guste utilizarlo. Desde mi punto de vista, eso hace que las escenas eróticas sean más interesantes, porque ella (o ambos) descubren por primera vez sensaciones, emociones y gustos que hasta ese momento les eran desconocidos. Para mí, es más romántico y bonito de ese modo. Bueno, aquí al menos trato de justificarlo dándole el contexto de que ella solo estaba enfocada en su carrera como periodista. Encima, vive con una amiga, por lo que todo el mundo cree que es lesbiana. Imagínense, los perjuicios de la época. Y otro punto en común con Michael. No sé exactamente cómo habrán quedado las escenas eróticas (que son algo atrevidas); pero quiero creer que, al menos, no dan asco. Con las escenas eróticas tengo un problema (para escribirlas), y es que nunca sé cómo se las van a tomar los lectores. Por ejemplo, cuando escribí el fanfic de Merlín y los protagonistas tuvieron su noche de bodas, no puse nada explícito, solo insinuaciones; entonces, vienen los lectores a preguntar por qué tiré los detalles a la basura. Lo siento, pero el protagonista de esa serie fue mi crush a los 14 años; yo no puedo sexualizarlo, ni imaginármelo en esa situación.

Pero es que yo nunca estoy satisfecha con lo que escribo. He creado ya 28 fanfics (sin contar los libros de one-shots) y solo me siento orgullosa de uno; del que hice de Rurouni Kenshin centrándome en el personaje de Enishi Yukishiro, que se titula Esperanza escrita con lágrimas de sangre y pasión. Fue el primer fanfic que escribí completo antes de publicarlo, lo dejé quince días en remojo y, cuando lo releí para corregirlo antes de publicarlo, me dije: “Me he superado. Magnífico”. Y, aún así, tal vez de aquí a un año, ya esté diciendo: “¡Buah, menuda basura que escribí en aquel momento!” Por cierto, no he mencionado mi otro fanfic de Michael Jackson (aunque ese también es muy malo) porque ese lo escribí en broma. No era para tomárselo en serio. Utilicé a propósito los clichés más habituales para hacer una especie de sátira.