C a p i t u l o 39.

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Salí corriendo de ese salón, tratando de contener las lágrimas, pero mientras más avanzaba, más ganas de llorar tenía, sentía como si nisiquiera pudiera respirar y mis piernas, apesar de querer correr, se tambaleaban. Para colmo mi siguiente clase era Cuidado de Criaturas Mágicas y quería llegar a tiempo, pero sentía que no llegaría, hasta que pase al lado de una chica, era Luna, quien al verme tan apurada me detuvo hablándome.

—____, ¿esta todo bien?—Dijo Luna con su tranquila voz y mirándome.

No pude formular palabras, solo negué con la cabeza y me lance a sus brazos, comenzando a llorar desconsoladamente, ella me correspondió el abrazo sin estar confundida y acarició mi cabello con suavidad para reconfortarme.

—No entiendo que pasa, pero llorar esta bien, demostrar tus sentimientos esta bien.—Agregó dejando salir de si una pequeña risa de comprensión.

Luego de unos pocos minutos, comencé a calmarme y me separe de Luna, quien con tranquilidad, saco su varita y con un movimiento saco un pañuelo de está, para entregarmelo.

—Discúlpame...—Dije al fin, aun sollozando y secando mis lágrimas.—Necesitaba un abrazo, pero si quieres hablamos después, de seguro tienes clases y yo aquí estorbando...—Agregaba como si quisiera darle explicaciones, pero ella me interrumpió.

—No pasa nada, tengo clase de Cuidado de Criaturas Mágicas y no creo que haya inconveniente con que llegue tarde...

—Yo también tengo esa clase...

—Entonces vamos juntas.—Me miró con su típica sonrisa y coloco su mano en mi espalda para guiarme hacia la clase que teníamos.—¿Y por qué estabas llorando?—Cuestiono como si no fuera algo personal.

—Oh... que directa...

Durante el camino me dispuse a contarle, mientras me miraba con total atención y tranquilidad. Aunque durante ese transcurso le cuestione el porqué ella iba en la misma clase, si era un año menor, a lo cual respondió que debido a que pocos alumnos iban a esa clase, había cupo y ella quiso agregarse, ademas de su fascinación por estas mismas. Pronto llegamos a clase de Hagrid y nos tocó interactuar con unicornios. Durante un breve receso Hagrid se acercó a mí con una expresión de tristeza en su rostro.

—Disculpa que te lo pregunte, pero, ¿Sabes si Harry estará en esta clase?—Cuestiono Hagrid mientras yo apreciaba la anatomía del unicornio.

—Oh disculpe, pero, me parece que no tuvo espacio en su horario para poder asistir.—Respondí, aunque al mirar que su rostro seguía triste, agregue.—Es una lástima, puesto que, es una asignatura impresionante profesor Hagrid.

—¿Enserió eso te parece?—Dijo Hagrid con total emoción en su rostro.—¿Te parece que soy un buen profesor?

—Claro, es estupendo como profesor, estoy segura que ningún profesor ha sido como usted, usted si entiende los sentimientos de las criaturas.

—Es un verdadero halago, muchas gracias ____.—Y se dirigió con otros estudiantes felizmente y recuperando un poco su alegría.

Al finalizar la clase, Hagrid me pidió que hablara con Harry, para ver si podrían al menos visitarlo pronto, a lo cual acepte y eso haría justo en ese momento, ya que, ya había terminado mis clases por ese día y como Luna aún tenía clases, nos separamos y me dispuse a buscar a Harry, aunque sentí que sería difícil, ya que nisiquiera sabía cuáles eran sus clases, pero inicie el recorrido y para mi suerte se encontraba bajando las escaleras para llegar al gran comedor.

—Harry.—Dije acercándome a el con un poco de prisa y el también se acercó a mí.—Perdón si tienes prisa, es que vengo de clase de Criaturas Mágicas y Hagrid, pregunto por ti y por cuando podrían visitarlo. Digo, si deberían, estuvo triste al no verlos a ustedes...

—Muchas gracias, tal vez le envie una lechuza más tarde y es que, no soy de Criaturas mágicas la verdad...

—Bien, entiendo.—Respondí con media sonrisa y me disponía a irme.

—Oye ____, antes de que te vayas.—Dijo dudando un poco antes de preguntarme.—¿Puedes hablar un momento?, tengo tiempo y quería preguntarte algo.

—Claro, igual tengo tiempo, ¿Pasa algo?

—Es sobre Malfoy...—Murmuro y se dispuso a caminar en dirección para salir del castillo.—Mira, es que yo estoy seguro de que si sabes algo puedes decirme, es muy sospechoso que...

—¿Es enserió?—Murmure mientras rodaba los ojos.—Créeme que por hoy he tenido suficiente de él, no más por favor...

—Es que estoy seguro de que el es un mortifago y bueno, tu eres de su casa, tu fuiste su novia, debes de saber algo...

—Harry, enserió, debes de dejar de pensar en eso, es imposible que lo sea y para responder tu pregunta, no, no lo es y no está involucrado en nada de ello. ¿Contento?—Dije tratando de ser breve para no tener que mentirle más.

—Pero su papá es un mortifago, si está involucrado...

—No Harry, eso no dice nada, enserió no te obsesiones con eso.

—Bueno, aunque también había pensado en otra cosa.—Agregó pareciendo ignorar totalmente mi comentario anterior y sacando el mapa del merodeador discretamente, perdiendo su vista en el por algunos momentos.— ¿Y si te acercas a el?, ¿Si intentas regresar con el?, para sacarle información, podría ser de gran ayuda.

—Harry, Harry, no, definitivamente no haré eso, ¿Que te pasa?—Cuestione mirándolo ya irritada.

—Pero es que, solo para salir de la duda...—Murmuro y se apresuró a decir lo siguiente.—¿O estas ocultando algo?

—No, definitivamente no, pero es una persona, ¿Cómo te atreves a hacerle algo así?, yo no estoy dispuesta a tratar de acercarme con esa intención, no cuentes conmigo.—Dije molesta y tratando de dar la vuelta para irme.

—Pero, ¿Por qué?—Cuestiono nuevamente de manera rápida dejando de mirar el mapa por unos segundos y comenzando a parecer ansioso.

—¡No lo hare porque aun lo amo!, ¡Mierda!, no estoy dispuesta a "sacarle información", estoy segura de que él no lo es, te lo puedo confirmar, pero en el imposible caso de que el lo sea, tanto como dices, no voy a perjudicarlo, ni a lastimarlo.—Dije ya bastante exaltada, tratando de mantenerme firme en mentir y después de un respiro y razonando lo que dije agregué.—Y créeme, me gustaría poder cambiar lo que siento, pero soy lo suficientemente estúpida para aun amarlo, pero puedo jurarte que no es un mortifago, ni está aprendiendo nada y aunque yo no sintiera esto, no lo haría, definitivamente.

Luego de eso, Harry parecía no mirarme a mi, parecía mirar detrás de mi con una expresión de susto y al no saber que más hacer solo agregué.

—¿Qué?, simplemente deja de hablar de él, me harias un gran favor. Y lo siento, ya debo irme. —Finalicé, aunque Harry seguía con la misma expresión y quise apresurarme al pensar que tal vez estaba así porque no fui tan convincente al mentirle.

Pero, tan rápido me di la vuelta para marcharme, fue entonces que me di cuenta de que, Draco estaba detrás de mi y había escuchado todo lo que había dicho y era esa la razón por la que Harry parecía asustado.

《¿Cómo llegué aquí? (Draco & __)》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora