《¿Cómo llegué aquí? (Draco & __)》

C a p i t u l o 44.

Tras escuchar los pasos de alguien subiendo las escaleras deje de conjurar el patronus tan rápido como pude. Aunque estaba confundida porque sabía que mi patronus había cambiado, sabía perfectamente la razón, pero no sabía hasta qué punto habían aumentado mis sentimientos por Draco. Tras esos pensamientos caí en cuenta que quien había llegado a la torre de Astronomía, era Draco y me giré para mirarlo al escuchar sus pasos.

—¿Fuiste a la enfermería?—Cuestione aliviada al verlo caminar en mi dirección.

—Si, después de intentar reparar el armario.—Respondio Draco visiblemente mejor y colocándose a mi lado para poder apreciar el paisaje que daba la torre de Astronomía.—La señora Pomfrey me dijo que es por ansiedad y me dio algo para relajarme, un té, me parece, ¿Pero eso de que me sirve?

—Pues... a mi me ayudan cuando paso por crisis, aunque algunas son muy fuertes que tengo que optar por otras cosas, ¿Que tal te sientes ahora?—Me gire de nuevo para de igual modo apreciar la vista y al notar que Draco ponía su mano en el barandal, puse mi mano sobre la suya en modo de reconfortarlo.

—Mejor.—Respondió el de manera breve.

—Me alegra saberlo y... ¿Que tal te fue con el armario?

—No hay un gran avance, ¿Sabes?, he intentado, pero parece que es muy lento.

—Comprendo...—Sin poder decir más, me quedé en un silencio hasta que supe que preguntarle.— Por cierto... El profesor Slughorn hará una fiesta de navidad justo en su despacho, ¿Quieres acompañarme?, digo también podrías intentar echarle un vistazo al armario, hay mucha gente y nadie lo notará.

—Incluso si no fuera a mirar el armario, aceptaría, pero ¿Y si los demás sospechan?—Dijo en un tono preocupado y mirándome.

—No lo creo y a decir verdad, no quiero asistir a esa fiesta si no es contigo.—Respondí con seguridad mientras acomodaba el cabello de Draco y me detenía a observar sus ojos que de la nada parecían más brillantes que antes y con las pupilas visiblemente dilatadas.—Lo siento, si no quieres...

—Si quiero.—Respondio rápidamente.—Pero si quieres, ve tu primero, yo estaré ahí después de revisar el armario.

Asentí y nos quedamos mirando el gran paisaje frío, con la nieve comenzando a verse visible al rededor de todo el castillo.

—Quiero decirte algo ____.—Dijo Draco después de unos minutos de silenció.—Es que desde el día que tu sabes, el día que bailamos... bueno desde ese día no he dejado de plantearme algo. Desde que te conocí, supe que te amaba, en primero nunca había hablado contigo y la mayoría de personas que hablaba conmigo lo hacía por interés. Pero nunca olvidaré a la niña que me saludo en el callejón Diagon con tanta emoción como si me conociera, tan entusiasmada, es algo que nunca olvidaré. Porque algo pasó ese día en mí y no estaba equivocado, cuando te conocí y nos volvimos pareja supe que eres increíble alguien con quien quiero pasar mi eternidad y más, por eso...

En ese momento algo se acercaba a nosotros una mancha, la cual logre visualizar como su búho que pronto se postró en su hombro y desató algo que estaba en su pata, era una caja pequeña color negro. Luego de eso se arrodillo frente a mi y abrió la caja. Era un anillo hermoso, con un diamante enorme en forma de círculo y perlas alrededor de esté.

—Por eso ____, ¿Me darías el honor de quedarme contigo el resto de mis días y si es posible hasta más que eso?

En ese momento no supe que responder, estaba muy eufórica, quería decir que si, pero pasaban muchas cosas en mi cabeza en ese momento, ¿No eramos muy jóvenes para algo así?, ¿Que pasaría con Astoria?, quien de verdad debía ser su esposa, pero... No quise medir lo que podría pasar, a la mierda, lo amo y no hay nada que desee más que poder estar con él.