Stay with me (completa)

⛸Prefacio ⛸

Una niña con el cabello a los hombros juega en el jardín de una gran mansión con su muñeca.

—¡Kenzie! —la llama otro niño de su edad y ella corre hacía el pequeño de ojos claros.

—¿Que pasó? —pregunta la niña.

—Encontré un gatito —los ojitos de ella se iluminan.

—¡Si!

Ambos van al lugar donde el niño vió el animal,  él lo saca de una caja de cartón. El gato maúlla de manera suave. Es blanco, pero está lleno de tierra, y es muy delgado.

La niña del cabello corto lo atrae a sus bracitos pálidos y lo acaricia, soltando su muñeca.

—Hay que darle leche —le indica al niño y este asiente.

Ambos corren hacía adentro y van a la gran cocina. El niño busca en el refrigerador una jarra de leche y sirve un poco en una pequeña tasa.

Le hace una seña a la niña que se acerque, ella asiente.

Pone el gatito en sobre la isla y este toma leche.

—Tiene hambre —murmura el niño.

—Quedemonoslo —le pide la niña.

—A mi mamá no le gustan los gatos —ella hace un puchero.

—Yo me lo quedaré, mamá no se pondrá enojada. Le gustan los animales —él asintió.

—Y yo te ayudaré con el siempre —en eso un chico más mayor que ellos entra a la cocina sin camisa, ignorándolos a ambos.

La niña se sonroja y carga al gatito.

—Aedus —el niño de ojos claros llama a su hermano mayor, este deja de tomar jugo y lo mira aburrido.

—¿Qué? —le espeta.

—¡Conseguimos un gatito! —exclamó la niña feliz, mostrando al animal que maúlla. Él chico de ojos verdes claros se acercó a ella.

—Es muy feo —dice con una mueca, Kenzie lo mira mal.

—¡Feo tú! Es hermoso.

—Es muy pequeño, mocosa. Seguro debe de tener un mes de nacido.

La niña abraza el animal y mira al chico con desconfianza.

—Cole y yo lo cuidaremos, ¿verdad? —el niño de ojos claros asiente. Su hermano mayor rueda los ojos y bufa.

—Que horror cuidar a un animal. Son aburridos —y se va de la cocina tranquilo. La niña suspira.

—Es muy bravucón —se queja y el otro niño ríe.

—Sabes que siempre es así —ella blanquea los ojos.

—Niños —una señora de unos treinta y tantos baja, entra a la cocina.

La niña corre hacia ella con el gatito en sus brazos.

—¡Nana! —la mujer le sonríe —. ¡Cole y yo encontramos un gatito! ¿Me lo puedo quedar?

—Mmm, está bien. Solo tenemos que llevarlo al veterinario, tú madre tendrá que aceptarlo —Kenzie asintió varias veces, emocionada —. Es hora de irnos cariño —la pequeña de ojos azules oscuros suspiró.

—Adiós, Cole —se despide del niño, que le sonrió.

—Adiós, Kenzie.

Toma la mano de la señora y juntas empiezan a caminar hacia la salida, el gatito va en su otro brazo, acurrucado.

—Nana —la señora de ojos negros mira a la pequeña.

—¿Si, Kenzie? —se detuvo ella, Kenzie aprovechó para quitarse su chaleco blanco y enrollar al gatito con el. Miró a su Nana.

—En la escuela una compañera habló sobre..., amor de tú vida. ¿Qué es eso? —la mujer sonríe y se arrodilla en frente de ella.

—Siempre habrán dos amores para uno, tú alma gemela, y el amor de tú vida —la niña frunce el ceño.

—¿Qué es eso? —inquirió, mirándola y luego miró al gato.

La mujer se levantó, sonrió cómplice.

—Un dia lo descubrirás, Kenzie.

La niña confusa, sigue caminando, acariciando el sucio pelaje blanco del gatito.