Los días pasaron demasiado rápido para Yuuri, Viktor le había develado infinidad de detalles sobre su vida lo que terminó por reconfortarlo ya que comprendió que no todo en su existencia pasada fue dolor y angustia, también tuvo momentos felices y amigos los que en su época le alegraron, por lo tanto daba gracias al cielo de que todo hubiese resultado mejor de lo que siempre creyó y que el ángel había vuelto a sonreír con la misma calidez de siempre sin contar que ahora su relación se sentía mas firme que nunca.
En la víspera de la navidad la ciudad de San Petersburgo bullía en actividad, la gente se encontraba en un ir y venir entre las tiendas de regalos y la feria navideña que se ubicaba frente a la plaza del Palacio de invierno donde los turistas y locales se arremolinaban en los puestos de dulces, comida, artesanías y por supuesto de sbiten (una bebida caliente a base de miel y especias opcionalmente mezclado con vino) justamente en uno de esos puestos un japonés se abría paso con un par de vasos de unicel con la aromática bebida. Cerca de ahí un chico de cabellos platinados invisible al resto de la gente observaba embelesado al enorme árbol que se erguía orgulloso en el centro de la plaza repleto de luces centellantes.
--Nunca había visto un árbol navideño asi de grande.-- dijo el ángel.
--Quizás en tu época aún no usaban este tipo de decoración.--
--Es verdad, los ortodoxos no lo hacían.--
--Vayamos al jardín, haya está mas tranquilo.-- propuso el nipón.
Yuuri pensó en ir al jardín de Alexander el cual se ubica junto al palacio de invierno pero de último momento cambió de idea ya que este se encontraba atestado, en su lugar decidió caminar un par de calles hasta el hermoso (y romántico) jardín de verano vecino a dicho palacio. Ahí cerca de una fuente cuya agua estaba congelada encontraron una banca un tanto escondida la que creyó perfecta pues siempre era incómodo llamar la atención si lo veían hablar "solo".
--Aquí no hay casi gente.-- dijo el adolescente.
--Todos se congregan en la plaza del palacio y en el jardín de Alexander. Toma, este es el tuyo.-- Yuuri le pasó uno de los vasos.
--¿Y que diferencia tiene con el tuyo?.--
--Que este tiene vino.--
--¿Vino? cuando yo estaba aquí no lo llevaba.--
--Pues ahora tal parece que es la versión rusa del Glühwein alemán.--
--¿Puedo probarlo?.--
--Claro adelante, pero no sé si te guste.-- Yuuri le pasó su propio vaso.
Viktor lo probó aunque al momento hizo una graciosa mueca.-- Creo que el vino no es lo mio.-- dijo mientras le regresaba el vaso después de sólo darle un sorbo.
--Eso pensé.-- Yuuri comenzó a beber alegremente ya que el frío era muy intenso y se antojaba algo caliente.
--Es tan diferente la navidad ahora, antes se celebraba sólo el siete de enero (en esa fecha la celebran los cristianos ortodoxos) estos días eran comunes y corrientes.--
--Ahora han llegado cristianos de otros grupos, en tanto para algunos es sólo un evento social.-- contestó el pelinegro.
--Tienes razón.-- Viktor dio un sorbo a su bebida bastante pensativo.-- mañana es mi cumpleaños, bueno lo es según la costumbre de algunas personas en la que dejan el 25 de diciembre como día de nacimiento para los huérfanos de los que no se sabe nada de su origen.-- añadió.
--Pero tú si sabes que tu cumpleaños es el 28 de agosto.--
--Si pero...de cualquier manera nunca he tenido una fiesta de cumpleaños.--
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Send me an angel
Fiksi PenggemarEn una noche de invierno un carruaje corre frenético, dentro de el seis huérfanos conducidos por su profesor huyen de la revolución rusa la cual está en su punto álgido, creen que van hacia la salvación pero...la muerte los acecha en una remota mont...