Capitulo 24

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Estoy observando atentamente la reacción de Martín pero me siento confundida al ver que no es lo que esperaba. Me está sonriendo.

-¿De que te ríes?- Le pregunto algo molesta.

-No puedo creer que estés inventando eso solo para ocultar tus celos- Sigue sonriendo.

-¿Crees que te estoy mintiendo?-

-Sí- Su respuesta es tan rapida y segura, el en verdad cree que estoy mintiendo.

-¡No estoy jugado!- Le digo indignada.

-Bien. Entonces dime como es que lo sabes-

-Yo lo escuché. En el baño de mujeres, en la fiesta de Nina- Martín suelta una carcajada.

-¿De que carajo te ríes?-

-De ti. Es tierno que no lo aceptes. Si quieres que me quede contigo hoy, lo haré, no tienes porqué inventar esas cosas- Suelto el aire frustrada.

-Te lo diré por ultima vez Martín. Tu. No. Me. Gustas. ¿Entiendes? Si te estoy diciendo esto es porque intento protegerte, no quiero que esa rubia tonta te vea la cara de nuevo, no es justo, tu eres una gran persona y no se vale. Pero si tu prefieres pensar que es un invento mío por mis supuestos celos inexistentes ¡Pues es tu decisión!- Al final de mi discurso me falta el aire así que hora respiro con dificultad. La expresión de Martín cambia de divertida a seria.

¡Es hora de saberlo!

-¿De quien lo escuchaste?-

-De sus amigas, y también hablaron de Kevin...- Me quedo callada, por un momento metía la pata -No se quien sea, pero lo mencionaron-

-¿Osea que no lo escuchaste de Nina?-

-No- Respondo algo avergonzada. Es cierto que cuando lo dice así pues suena como chisme ¡Pero yo estaba ahí! Se me durmió el trasero de estar en el inodoro  esperando a que terminaran de hablar.

-¿Estas consiente que podría no ser cierto?-

-No te arriesges por favor- Estoy prácticamente suplicando.

-No me dejaré llevar por chismes que provienen del baño  de mujeres-

-¡Pues entonces largate! Luego no digas que no te lo advertí- La rabia me carcome.

-Pues es exactamente lo que voy a hacer. A veces no te comprendo Sofia. Eres una niña berrinchuda y quieres que todo se haga como tu dices, pero dejame decirte que esta es mi decision y si yo me quiero arriesgar ¡Es mi problema! Nina es mi novia y por lo tanto pido respeto. No importa que sea chillona, fresa, insoportable, ella es mi novia ¿Entiendes? Así que no quiero que tu o Fanny hagan comentarios negativos o cualquier broma o me harán enojar aún más ¡Ya madura Sofia!- Tengo la boca abierta por la sorpresa. Martín nunca me había hablado así. O quizás si, pero no recuerdo haberme sentido tan herida.

-Está bien- Susurro evitando con todas mis fuerzas no llorar frente a el.

¡Idiota! ¡Idiota! ¡Idiota!

Salgo a toda prisa de ahí dirigiendome a mi Temporal-Habitación. Cuando paso por la sala escucho vagamente la conversación de Nina y Fanny.

-¡Que linda perrita!-

-¿A que es bonita no? ¿Quieres saber como se llama?-

A pesar de mi enfado, sonrió al escuchar eso. No quiero ni imaginar que va a decir Nina al saber que le pusimos a la perrita su nombre.

-Sofia- Martín me llama pero no me detengo y empiezo a subir la escalera.

-Escuchame, no quería hablarte así, yo...- Me doy la vuelta para contestarle.

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