Wednesday bebió junto a Enid un rato, aunque Enid casi no lo hizo.
A Wednesday no le afectaba tanto, así que solo por eso tomó.
Enid casi obligó a Wednesday a quedarse a charlar más tiempo, hasta que cayó dormida, por un momento.
La pelinegra la vió descansar en la otra esquina del mueble.
Parecía tener frío, o algo así.
Enid se movía como si buscara algo, algo para abrazar, y poder dormir tranquila, cómo si de eso dependiera su vida.
Por un momento Wednesday pensó en tirarle una almohada para que dejara de moverse así, la estaba pateando.
En cambio, buscó algo en la habitación que sirviera como algún oso para dormir de Enid.
Recordó su "charla" con Enid, esta parecía morir de sueño todo el tiempo.
Le habló sobre cosas que ni si quiera quería saber, como que Ajax por fin la invitó a salir.
Y que en realidad eso no la hizo sentir satisfecha. Decía que realmente no le gustaba Ajax, pero nunca hubo alguien, alguien más, así que intentó que le gustara, pues era lo que todos querían.
Pero falló.
También le habló sobre cosas vergonzosas que le habían pasado en la primaria, momentos tristes y así.
A Enid le habían hecho bullying en una de sus escuelas.
Y lo contaba como si no fuera nada, Wednesday juró que si algún día se topaba con quien le había hecho daño lo mataría.
Lo haría sufrir, lo torturaria y lo haría morir muy lentamente.
Aunque fué solo un pensamiento, jamás haría tal cosa solo por una tonta estudiante que decía ser su amiga, ni de chiste.
Qué estúpido.
Se quitó la chaqueta por el calor y la incomodidad, las patadas de Enid lo empeoraban todo.
Pero no quiso molestarla, se veía cansada.
Inconscientemente la miró de pies a cabeza durante algo más de 10 minutos, hasta que se dió cuenta y volteó a ver a la pared.
Sacó su celular de su chaqueta, eran las 9:30 p.m.
Era temprano, muy temprano, demasiado. Bueno, para la pelinegra.
Se supone que los padres de Enid no le permitirían quedarse hasta más de las 10.
Pensó durante unos segundos.
—Enid. — Golpeó ligeramente su hombro.
La rubia hizo una mueca.
—Enid, no puedes quedarte tan tarde. — Reacomodó un mechón de cabello de la rubia.
Lo cuál hizo que la rubia abriera lentamente los ojos.
No se encontraba totalmente consciente.
Y Wednesday lo sabía, así que aprovechó que luego no recordaría nada, no del todo.
La tomó de los hombros y la levantó, sentandola en el mueble, luego pasó la palma de su mano frente a sus ojos esperando algun tipo de reacción, y solo recibió la cabeza de Enid en su hombro.
Inmediatamente la apartó, y la ayudó a levantarse, colocó el brazo de Enid sobre su hombro para que se apoyara.
Mientras que con el otro brazo la sostenía.
No dijo nada, la rubia solo dejaba que le hiciera lo que tuviera que hacerle.
La sacó sigilosamente de la casa de Yoko, y caminó junto a ella por varias calles.
Si Wednesday conociera la casa de Enid, la hubiera llevado ahí y hubiera olvidado todo simplemente.
Pero no fué así, y Enid no quería decirle, solo se quejaba por el dolor en sus pies.
Así que sí, la llevó a su casa.
En cuánto estuvo dentro, cerró la puerta con llave y llevó a Enid al mueble.
—Dile a tus padres que no volverás, a menos que me quieras decir dónde queda tu casa. —
Enid tomó su celular y llamó a sus padres, les iba a decir que se quedaría haciendo una pijamada con sus amigas o algo así.
Mientras mencionara a Divina se lo iban a permitir, sus padres pensaban que ella era la única buena amiga que tenía Enid.
Que alguien les diga..
Tuvo una charla algo rara con sus padres, Wednesday arqueó una ceja ante esto.
La pelinegra le prestó a Enid algo de ropa para que pudiera dormir.
Se metió al baño y luego salió con la ropa de Wednesday, le quedó algo suelto, era porque Wednesday no usaba ropa a su talla, sino más grande.
Enid pensó que era muy cómoda, aunque seguramente era solo por ser de Wednesday.
—Gracias. — dijo Enid.
La pelinegra casi no la logra oír, ya estaba en su cama, tranquila.
Y Enid tomando una chocolatada que Wednesday le dió.
Mientras miraba la tele, sin prestar atención.
Apagó la tele algo incómoda, se sentía rara de no encontrarse en su casa en ese momento.
Dejó la taza de chocolatada en una mesita y se acercó a la habitación de Wednesday.
La puerta estaba abierta, así que se acercó en silencio.
Buscó con la mirada algo de Wednesday.
Miró hacia su cama.
Ahí estaba, la chaqueta de Wednesday.
Se la llevó consigo en un movimiento rápido, y algo brusco, la pelinegra había llegado a sentir la presencia de Enid, pero no dijo nada.
Abrazó aquella chaqueta unos segundos.
Volvió al mueble, y se hechó encima de este.
Junto a la suave almohada blanca que le dió su amiga, y la frazada que también le entregó.
Se acurrucó, mirando a la tv, que ya estaba apagada.
Se tapó, acomodó su cabeza en la almohada y abrazó la chaqueta de Wednesday.
Ni si quiera sabía por qué, la comenzó a oler, y de a poco se quedaba dormida.
Hasta caer rendida, cuestionandose por qué su amiga no la dejó abandonada a su suerte e incluso la trajo a su casa.
Probablemente tomar le había afectado algo también.
...
Estuvo medio corto, una disculpa banda
Tengo sueño
Quiero dormir
Seguro me equivoqué escribiendo más de una palabra, perdón😿
Ni sé qué acabo de hacer, creo q podría ser confuso, lo hice pasar rapidito pa irme a dormir
Pero bno
Buenas noches, se cuidan uwuwuwu
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[ 𝘈𝘨𝘶𝘫𝘦𝘵𝘢𝘴 // Wenclair ]
Random𝔸𝔾𝕌𝕁𝔼𝕋𝔸𝕊 ; 𝙨𝙝𝙤𝙚𝙡𝙖𝙘𝙚𝙨 ೃ࿔₊• 『✙』── ✦ ━━ Dos adolescentes se encuentran en la escuela. Una chica que nunca se ataba las agujetas y una gótica asocial. ━━ Enid Sinclair tenía que ayudar a Wednesday Addams a abrirse como persona si querí...