Fugaku por fin había llegado de su viaje, Mei había ido a recibirlo al aeropuerto y se mostraba con la mejor de sus caras aunque por dentro estaba hecha un manojo de nerviosismo y enojo, ella solo tenía en su pensamiento y ese era volver a tener al azabache menor a sus pies y entre sus piernas.
—Querido, bienvenido. — Sonrió con algo que parecía más una mueca y respondió más a fuerza que de gana ante el efusivo abrazo, Fugaku no era feo, pero no gozaba de la virilidad y juventud de Itachi, por eso, Mei sentía asco.
—Te extrañé mucho, mi amor.— Él fue un pasó más adelante besándola, algo que ella correspondió, pero no de la mejor manera. —¿Sucede algo?
Mei no supo disimular mucho su falta de ánimo, sentía que estaba perdiendo control sobre Itachi y eso la estaba alterando.
—Tuve un pequeño conflicto con Sakura. Durmió ... — Se detuvo.
—Entonces supongo que le dirás a Fugaku que estabas haciendo durmiendo en el cuarto de tu hermano.— intentó intimidarla.
La pelirosa se paró del comedor limpiando su boca con una de las servilletas.
—No te preocupes, Mei. Tal vez estará más intrigado por saber que hacías tú tocando a su puerta a media noche. Por cierto, ¿Por qué te haz marchado en cuanto oíste mi voz
Mei recordó de inmediato que esa niña insolente era capaz de revelar que fue a buscar al hijo mayor de Fugaku, y no tenía una buena excusa para justificar que buscara a Itachi por las noches, entonces habría un escándalo y aún no era tiempo que se supiera la verdad.
—¿Sakura durmió?— Inquirió el azabache
—Sakura durmió tarde... No me gustó que se desvelara, me preocupa que se sienta sola.— Completó con una gesto fingido de preocupación , pero poco le importaba como pasara las noches esa molesta niña.
Fugaku analizó la situación, Tsunade le había aclarado perfectamente que durante 4 años solo estuvo con ella, que era obvio que se pudiera sentir extraña o incómoda cuando volvía después de un tiempo a estar con su otra familia y más con un miembro nuevo en ella, pues la rubia por llamada telefónica le recalcó perfectamente que Sakura no quería irse.
—No te preocupes, veré el modo de solucionarlo. Eres muy buena, Mei. Sin duda podrías ser una segunda madre para mis hijos.— Fugaku creía fielmente que esa mujer era la indicada, alguien fiel y dedicada solamente a él.
Ella sonrió, pero por dentro sentía repulsión ante ese comentario.
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.Itachi llegó temprano a casa.
Su padre le había llamado para avisar que llegarían en un par de horas porque estaba comiendo con su esposa, lo invitó, pero él declinó el ofrecimiento porque no tenía alguna intención de ver a Mei.
Sentía que ahora podía liberarse, pero tenía que hacerlo con cuidado, no quería quedar como un cobarde de nuevo rogándole que no lo dejara, no era la primera vez que el se sentía valiente para dejarla, pero si la primera vez que estaba más seguro de hacerlo.
Subió a su cuarto y al parecer nadie había hecho la limpieza hoy, la cama estaba desatendida y había ropa negra sobre el piso.
Dedujo que la ropa era de su hermana quien probablemente se habia duchado en su cuarto antes de partir al colegio. La recogió para irla a poner en el cesto cuando cayó su ropa interior.
Un lindo conjunto negro.
Él lo tomó y recordó la imagen puesta ante él está mañana.
Los redondos y bien formados glúteos de su hermana.
Aventó la pijama por un lado, pero no la ropa interior. Se acostó en su cama que aún tenía el olor de Sakura, un olor a fresas dulces y tal como lo había dicho ella, a él le gusta el dulce.Un cosquilleo intenso se sintió en su cuerpo y su entrepierna empezó a palpitar.
No pudo ni quiso evitarlo, se llevó las bragas hasta su nariz, inhalando el olor íntimo de su hermana, un olor distinto a otros, un olor único, y eso lo terminó de excitar e incitar a olvidar lo correcto, empezó a acariciar su miembro, un ir y venir con su mano.
Era un maldito enfermo, pero se sentía bien, su virilidad estaba en su punto y él en un ritmo sin frenesí.Imaginando su perfecto culo, el tremendo espectáculo que le brindo al amanecer, y con el sueño de tenerla empotrada en cuatro, la posición favorita de Itachi.
Siguió su ir y venir hasta que su pene explotó, saliendo semen caliente, la sensación fue de un éxtasis total, se había sentido tan bien.Cuando cayó en cuenta lo que había hecho, no hubo más que un ligero remordimiento. Se limpió y guardó las bragas de su hermana en un cajón personal. No tenía intención de devolverlas, se miró en el espejo y soltó su cabello haciéndolo hacia atrás.
—Te acabas de masturbar pensando en tu hermana. — Se dijo así mismo ante su reflejo.
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.Kakashi había preparado una comida rápida y Sakura comió gustosa.
Hace pocas horas habían llegado a la residencia Hatake dónde él le mostró hasta el último rincón de la casa y se vio muy entusiasmado por ella, algo que hizo que Sakura sienta mucha ternura, Kakashi era un hombre magnífico.
—Sakura, yo quiero estar siempre contigo, pero tengo miedo que tu familia te aleje de mi. — Él la miró directo a los ojos, le transmitió su amor y su miedo.
La pelirosa comprendió muy bien ese eso, pero sabía que Tsunade haría lo que fuera por su felicidad y si Kakashi la representaba no se opondría.
El problema real serían Fugaku y Sasuke.
Su padre porque siempre había sido demasiado riguroso, sobreprotector, al igual que Sasuke. De hecho fue una de las razones por la que el matrimonio Uchiha no perduró.
Los celos constantes de Fugaku hacia Tsunade fracturaron la relación.Él tenía miedo que le hicieran lo mismo que Mikoto y aunque nunca fue así, la rubia no podía más con la desconfianza hacia ella. Cada día se había vuelto un infierno.
Es por eso que también Sakura mostraba su repulsión a los celos y a la sobreprotección.
Sasuke la cuidaba demasiado, exageradamente y nunca le gustó que ella mostrará afín a otro chico, Sasuke le había prohibido desde niños que ella tuviera novio, aunque a esa edad, eso no le importaba a ella.
Entonces ahí era donde estaba el verdadero problema, por parte de Itachi. Ella no creía que hubiera mayor complicación, solo la edad.—No te preocupes por eso, mi madre te aceptará. — Lo abrazó con ternura, él puede ser el amor de su vida.
—¿Y tú padre y hermanos?
—No lo sé, pero para ese entonces seré mayor de edad.
—Eso quiere decir que tal vez ellos no me acepten, ¿No? — Una expresión triste por parte de Hatake, entonces a la pelirosa se le ocurrió algo.
—Tal vez si pedimos ayuda anticipada. — Quiso darle una esperanza.
—¿Cómo anticipada y a quién?
—Mira, sé que el conflicto vendría tal vez de mi papá o Sasuke. Pero, se me ocurre que mi hermano mayor puede apoyarnos.
Sakura tenía esa ligera esperanza, pero no siempre estamos preparados para nuestros destinos, sobre todo cuando se salen de la línea en curso donde tendrían que ir.
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PECADO. (🔞)
Fanfiction-No intentes esconderte con esos ojos de ángel. #1 Kakasaku 22-04-2024 🥺✨ #3 Kakasaku 18- 08-2924 📝🖤 #1 Kakasaku 23-08-2024 🌸🥹 #6 Kakasaku 17-09-2024 ⚠️ ATENCIÓN ⚠️ ESTE FANFIC TRATA TEMAS DELICADOS. SI NO LES AGRADAN, SOLO NO LO LEAN. LAS IMA...