My Heart | Eddie Munson | Terminada ✅

Noche De Brujas

Es día de halloween, Eddie y su banda fueron invitados a tocar a la casa de Taylor, una de las chicas más ricas de Hawkins, hará una fiesta y por lo que sé, será grande.

Sí, "Corroded Coffin" sigue existiendo. Aún se reúnen para ensayar y algunas veces hacen tocadas en bares.

Claramente no es tan frecuente como antes, Gareth tendrá un bebé pronto, a Eddie le dicen el "perdedor enamorado" y los otros dos se tienen que acoplar.

Eddie no puede tocar, pero si cantar, así que está muy emocionado por eso. Les pagarán bastante bien así que iremos.

—pero el disfraz es obligatorio —regañé.

—pero esto es muy feo —hizo una cara de asco lanzando el disfraz de "Dipsy" al suelo.

—Eddie, ¿recuerdas cuando dijiste que preferías disfrazarte de teletubbie a ser un sacerdote?

—era una puta broma, Stella —se levantó.

—pues tu broma salió bastante cara, así que ve a cambiarte porque los chicos llegarán pronto por nosotros —me crucé de brazos.

—¡Bien! —rodó los ojos, tomó el disfraz y comenzó a quitar su ropa.

Teletubbies, la mejor opción, cuando fui al trabajo, entre a esa tienda de disfraces, no creí que los encontraría, pero lo hice y los tuve que comprar.

Son 4 cositas tiernas y ellos son 4, no hay disfraz más perfecto, yo iré de "bebé sol", obviamente.

—esto es muy injusto —hizo berrinche mientras se metía en el disfraz—, tu irás solo con esa cosa en la cabeza —me señaló— y yo tengo que ponerme esta cosa enorme.

Yo llevaba un vestido negro, botines con tacón un poco altos del mismo color y un gran adorno en la cabeza.

—ya no hables —reí—, solo ponlo y ya, no serás el único que irá así, tu banda también lo hará

—porque los obligaste —arrugó la nariz.

—a Gareth no, él estuvo de acuerdo desde el inicio.

—Tú y tu amigo —me hizo un gesto de desagrado y se giró para evitar verme.

—Te ves precioso —reí con ternura cuando lo vi.

Eddie frunció el ceño molesto y sacó su lengua.

—eres muy mala, pero te ves hermosa, no puedo —fingió un disparo y se tiró a la cama.

—No puedes resistirte, Munson —me subí encima de él.

—jamás podré contra ti —me besó.

Se sentía raro besarlo con esa cosa puesta, solté una carcajada y me levanté.

—Jódete —habló sin pensar

—¿Qué dijiste? —fruncí el ceño y me giré para verlo.

—nono —negó con la cabeza—, lo siento, cariño

—eres un grosero —dije desanimada—, jamás me habías dicho algo como eso, Eddie

—Lo sé, perdóname, fue un método de defensa

—Jódete también —le di la espalda y me terminé de arreglar.

Él se quedó sentado, estaba esperando a que los chicos llegaran.

—están afuera —rompió el silencio.

—abre —dije terminando de aplicar labial.

Las risas retumbaron la casa, Eddie se burlaba de ellos y ellos de Eddie.