Su Regreso

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Es 17 de Noviembre, día de gracias se acerca y estoy feliz porque la pasaremos todos juntos.

Eddie ya esta decidiendo que cenaremos ese día, a él también le emociona.
Será el primer día de gracias en nuestra casa, todos vendrán, no hay nada mejor.

Eddie está casi recuperado, le falta un poco, pero ese concierto lo motivó bastante y ha hecho todos los ejercicios nuevos.

Wayne me ha hablado en la mañana, dijo que era urgente que fuera a verlo, pero sin Eddie. Me dejó intrigada.

Pero es casi imposible deshacerme de él, aunque si me salgo del trabajo antes, pueda hacerlo. Quizá es una sorpresa para Eddie.

—¿Tienes que ir? —me jaló del brazo para evitar que me pusiera de pie.

—Sí —reí—, además tengo que traer la cena

—te voy a extrañar —hizo puchero.

Todos los días eran igual, no quiero despertarlo, pero siente cuando no estoy a su lado y abre los ojos.

—también te voy a extrañar, pero te veré al rato, quizá veamos películas —dije mientras caminaba al baño.

—es viernes, podemos desvelarnos porque mañana no irás al trabajo —sonrió mostrando los dientes.

Estar con Eddie era una gran aventura, ningún día era igual, bueno, a excepción de las mañanas.

Me di una ducha rápida y cuando salí ya estaba dormido de nuevo, me terminé de arreglar, di un beso en su mejilla y fui al trabajo.

- Mensaje -

Wayne:
¿Ya vienes?, lamento molestarte.

Stella:
Dame 20 minutos y voy

Esto ya estaba preocupándome, Wayne jamás es así de insistente, tengo miedo de que algo malo haya pasado, y lo que me hace sentir peor es que no quiere que Eddie sepa.

Pasando los 20 minutos, salí de la tienda y afortunadamente Steve había traído su auto a su nuevo trabajo en la tienda de películas y pude tomarlo.

—ve con cuidado y por favor dime que pasa —Steve se despidió.

—lo haré, adiós —me despedí y arranqué el auto.

Manejé hasta la caravana de los Munson, Wayne estaba recargado en una pared mientras fumaba y movía su pie impaciente, cuando me vio llegar se incorporó y me dio una sonrisa apretada.

Me bajé rápidamente del auto y me acerqué a él con preocupación.

—¿Qué pasa? —fruncí el ceño.

—¿Eddie está en casa?

—Sí, seguramente sigue dormido

—bien —asintió—, entra, tengo que decirte algo

Los nervios me comían entera, la seriedad de Wayne daba miedo. Me senté en el sofá y el se sentí frente a mí.

—La madre de Eddie volvió —soltó sin más.

—¿Cómo? —pregunté confundida.

—Quiere verlo —sollozó.

—Wayne... —apreté los labios.

My Heart | Eddie Munson | Terminada ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora