DISASTER - YEONBIN.

SESIÓN FOTOGRÁFICA.

Yeon Jun me dejó en mi apartamento no sin antes decirme que pasaría por mí a las dos, así que tenía tiempo para vestirme y descansar un poco, aunque está vez había sido igual que la noche anterior, Yeon Jun no pudo contenerse tanto y sus embestidas fueron más duras contra mi, así que me dolía el trasero.

Había marcado mi cuerpo, pero esta vez en zonas que solo él podía ver, (porque sería un caos para mi sesión), como la parte interna de mis muslos y los costados de mi cintura, al igual que debajo de mi ombligo.

Me puse ropa cómoda como Yeon Jun me había sugerido, pues me estaría cambiando en el set, así que unos pantalones poco ajustados y una playera bastante holgada fue lo que elegí, a las dos en punto, me llegó el mensaje de Yeon Jun, tomé mi celular, mi billetera y salí de mi apartamento, me subí al auto y para mi sorpresa, Yeon Jun me recibió con un beso.

—Eres un cursi.

—No soy cursi Soo Bin, nunca seré cursi.

Su ceño estaba fruncido y sus labios hacían un tierno puchero, lo atraje hacia mí y volví a besarlo, esta vez el beso fue más largo.

No habíamos hablado nada, pero era como un trato silencioso, era como si yo fuera su novio y me trataba como tal, haciéndome sentir bien, pero a la vez, sabía que por dentro, me estaba pudriendo.

Nos detuvimos minutos después en un enorme estudio, bajamos del auto y solo caminamos tomados de la mano hasta donde hubo poca gente, luego, muy a nuestro pesar, tuvimos que soltarnos, entramos al set y me quede con la boca abierta al ver todo el lugar, nunca habría imaginado todo el trabajo que había detrás de unas fotografías, una chica bajita (si más bajita que yo) y bastante tierna, se acerco a Yeon Jun y lo saludo.

—¿Este es el mío?

—Todo tuyo~.

Gire a ver a Yeon Jun con enfado, pero la forma en la que me guiño el ojo me hizo sonreír, él saco su cámara y comenzó a prepararse, mientras a mí, la estilista me llevo a un cuarto, donde me hizo ponerme ropa bastante rara y me maquillo, aunque primero peino mi cabello y, sin mi permiso, lo cortó un poco, cuando terminó y me paró frente al espejo, realmente no podía reconocerme, un chico entro preguntando si ya estábamos listos, pero cuando me vio, pude notar como sus mejillas se sonrojaban, luego miraba a la maquillista y elevaba su dedo pulgar.

—Hiciste un grandioso trabajo, bueno él ya es guapo, solo le hacía falta un poco de ayuda.

—Lo sé, cuando me mostraron sus fotos supe que sería fácil, tiene buena cara y buen cuerpo, además estas lindas mejillas, tienen unos hermosos hoyuelos.

Sentía mi rostro arder, ¿no sabían que hablar de una persona frente a ella era de mala educación?

—Bien, acompáñame por favor, el fotógrafo te está esperando.

La chica me detuvo antes de irme y me puso un delantal, no dije nada, después de todo, me iban a pagar por aquello, seguí al chico y en cuanto entre al set, sentí las miradas de todos sobre mi, sabía que me veía raro, pero no era mi culpa. Fue la mirada Yeon Jun la que me descoloco y me puso completamente nervioso.

Pude ver como trago saliva, y como sus ojos brillaban al verme, se me acercó como si fuera a acomodar algo, pero me susurro al oído.

—Me encargare de que ese delantal te lo quedes y sea lo único que uses la próxima vez que nos veamos.

Solo puede sonreír y golpear con discreción su brazo, luego se alejo de mi y fue a tomar su lugar. Aquello fue más agotador de lo que creí, cambié de vestuario por lo menos cuatro veces más, al igual que el peinado y el maquillaje, pero al final, Yeon Jun estuvo más que feliz con el resultado, de los tres modelos que habíamos ahí, a mi fue a quien me saco mas fotos, incluso en mis descansos mientras comía.