¿Sueño o realidad? ×jdom×

capitulo 28

Narra Daniela.

-¿Qué haces? -le digo sonriendo al ver que me agarra por la cintura mientras me da un ligero beso en el cuello.

-Nada -dice encogiéndose de hombros- aprovechar todo el tiempo junto a ti -sonrió y le acaricio la mejilla suavemente.

-Te adoro -le digo dándome la vuelta para así tenerlo de frente.
Mi frente choca con la suya, sin previo aviso sus labios se juntan con los míos, mi mano se coloca en su nuca para así darle más profundidad. Me besa lentamente mientras en mitad del beso no puedo evitar sonreír aprovecho para así poder coger aire al igual que el y volvemos a juntar nuestros labios.

(...)

Le agarro de la mano y lo llevo a la cama.

-¿Cómo en tu casa no? -suelto una carcajada al ver que ya esta en la cama tumbado, sonríe y da palmaditas a la cama indicando que me tumbe con él.
Veo como bosteza aún poniéndose la mano encima.

-¿Cansado? -asiente y pone su cabeza en mi hombro.

-9 horas sin dormir, define cansancio -le doy un corto beso viendo como sus labios se separan de los mios lentamente.

-¿solo dormiste una hora? -le pregunto acariciando todos sus rasgos de su cara. Asiente y veo como se le cierran los ojos despacio por mis caricias en su piel.

(...)

-Cariño -le digo tapándole la nariz - son las once, ¿bajamos a cenar? -veo como va abriendo los ojos y no puedo evitar sonreír al ver el tesoro que tengo a mi lado y no todas lo pueden tener.

-Me tengo que ir a casa -dice apretándome junto él.

-Solo hay en casa mi hermano, a mi madre está trabajando aún -le digo poniéndome encima de él. Coloco mi cabeza en su pecho.

-Si te pones así es difícil alejarme de ti -me dice sonriéndome coquetamente.

-No te alejes de mi, simple -le digo mirándole ahora fijamente- venga vamos idiota -me levanto rápidamente y le extiendo la mano estirando de él, aunque se me hace difícil.

-Eres demasiado endeble -me dice estirando de mi y volviéndome a tirar con el a la cama- qué cachuchable eres -me dice abrazándome demasiado fuerte.

-Me vas a sacar un hueso idiota -le digo dándole un beso pero se puede ver como nuestros labios tardan en separarse. Me levanto rápidamente y salgo de la habitación- venga perezoso.

Escucho como unos pasos me siguen por las escaleras hasta que llegamos a la cocina para cenar.

-Mamá llega a las doce, haceros de cenar -me dice mi hermano desde el salón.

-¡Vale! -le digo cerrando la puerta.

(...)

Vamos camino el piso de Dani que se alquilaron hace unas semanas ya que pasarán bastante tiempo aqui.

Me dijo mil y una vez que no le acompañará pero a cabezota no me gana nadie.

-El sábado tenemos concierto ¿vendrás? -me dice buscando mi mano para poder entrelazarlas.

-¿cuándo volvemos? Tengo clase el lunes.

-El domingo -me dice ilusionado- qué ganas tengo de ver a mis españolas -me dice sonriente- quiero que veas todas mis princesitas desde ahí arriba.

-Yo quiero que veas como sonríes al pronunciar 'princesitas' -le digo mirando fijamente su sonrisa.

-Y tu eres una de ellas -me responde abrazándome entre sus firmes brazos.

-Me pongo en el concierto hacer coros -río y veo como él también lo hace.

-Tu sabes que yo te quiero mucho -suelta una carcajada- pero me vas a espantar a todas mis niñas -le doy un leve golpe en el hombro mientras rió.

-Idiota -le saco la lengua- de todas formas no tenía planeado hacerlo, sería demasiado buena para vuestra gira -y le sonrió pícaramente.

-Eso último a dolido nena -me dice poniéndose la mano en el pecho- me has roto el corazón.

-La verdad duele cariño -me muerdo el labio inferior.

-¿No me vas a curar entonces? -me dice poniendo pucheros.

-Me lo pensaré...

-¿Mucho? -me dice rodeándome la cintura.

-Si sigues así no lo creo -le digo pasando mis brazos por su cuello.

-No te puedes resistir a mi y lo sabes -dice sonriéndome coquetamente.

-Si puedo, eres tú el que no puede.. -intento terminar pero me calla juntando nuestros labios, mi mano se coloca en su nuca para así darle más profundidad, me muerde el labio inferior sabiendo que me encanta de la forma que lo hace. Nuestras lenguas se buscan deseando encontrarse. Su mano la baja y mi trasero y al notarlo no puedo evitar sonreír algo que también hace él.

-Hasta mañana estúpido -le digo separándome y tras ello dándole otro beso corto.

-Avisame cuando llegues mongola -me dice mientras ve en el portal como me voy a mi casa por las calles de Madrid.