Gran Verde

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Los Orkos durante milenios fueron conocidos por su brutalidad, se les describió como armas de guerra vivientes, existen para la luchar y morir peleando, nadie les puede parar a menos que terminen hasta con el último de ellos, e incluso entonces pueden esperar a reunir más guerreros y comenzar una nueva guerra contra cualquier cosa que se aparezca en su camino.

En la galaxia la gente ve a la interminable marea verde como una plaga que hay que derrotar cuando aparece en tu camino, pero desde que la Guerra de la Bestia casi termina con Terra, las cosas habían tenido un toque más serio, ya que desde ese momento se mostró que los Xenos podían ser una amenaza para toda la galaxia.

Tontos y agresivos, solamente viven para luchar y luchaban para vivir, no necesitan complicar sus vidas con cosas como política o existencialismo, si nacías Orko eras verde y lucharías, porque eso es lo que debías hacer y eso es lo que les hacia los mas exitosos de la galaxia.

Por eso se hacían campañas incansables de exterminio por toda la galaxia, tratando de mantener a la Santa Terra lo más segura posible, asegurándose de que ningún Xeno este cerca de ellos, aunque está campaña era más eficiente y exitosa en el Segmentum Terra, ya que en varias partes del Segmentum Tempestus había varias regiones rebeldes y con rastros de Xenos peligrosos.

Ese sector fue especialmente afectado por más Tormentas Disformes, aislando cientos de planetas y sistemas, ya era una realidad que ese sector tenía problemas para ver la luz del emperador, por lo que las Tormentas solamente eran uno mas de los problemas que enfrentaban los pobladores de esa zona de la galaxia.

Ante muchos conflictos en el Imperio varias razas Xenos habían podido campar por el Imperio con poca oposición, los Eldar seguían conspirando o siguiendo sus agendas con preocupaciones reducidas de que el Imperio los ataque, mientras que las bandas de guerra traidoras y de Orkos estaban avanzando por las estrellas sembrando miseria.

Durante la Era de la Apostasía habían ocurrido muchas cosas tras bastidores, pero entre los problemas estaba algo que inquietaba a la gente, una tormenta inmensa que dejó aislados a varios sistemas y planetas que el imperio había perdido entre revueltas rebeldes y caóticas, por lo que cuando se disipe la tempestad deberían ir a la carga.

Pero en uno de ellos había algo diferente, era un planeta que fue atacado por lo que parecía una eternidad por fuerzas del caos, demonios y traidores atacaron sin descanso para tratar de conquistar ese mundo, pero nadie había superado a sus defensores, campañas enteras repletas de bajas terminaban con los atacantes siendo aniquilados y teniendo que escapar de sus victimas convertidos en perseguidores.

Era un planeta conocido como Zarco, en su momento fue un planeta productor de alimentos, sin guarniciones significativas o producción militar para que sobrevivan al infierno que cada día llegaría a los planetas atrapados en las tormentas disformes, demonios y bandas de marines caóticos, junto a otras atrocidades eran cosas de todos los días que habrían terminado con ellos desde el primer día.

Tras tantos años de ataques uno esperaría que hubieran caído, que fuera poco más que un planeta de bárbaros adoradores del caos, pero en ese planeta había algo diferente, un factor que aun con la locura exterior, ellos seguían existiendo y conservando parte de su humanidad.

Había muchas fábricas, minas extrayendo cada vez más materiales y minerales metalúrgicos, en otras partes del planeta había mucha infraestructura parecida, dejando un planeta repleto de granjeros que producían alimentos para abastecer a todos en el sistema, cosas que no deberían estar allí si era un planeta agrícola.

Lo más desconcertante era que había un inmenso número de Orkos rodeando el planeta, vivían en grandes fortificaciones orbitales construidas en Pecios espaciales, sin contar su flota, luchaban día y noche sin descanso contra cada abominación que la Disformidad lanzaba sobre ellos, los humanos corrían a sus refugios o tomaban posiciones defensivas, mientras los pieles verde luchaban y se divertían como nunca.

Warhammer 40K: Era CarmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora