Un relato de mi heroe el mejor mago y padre.

Parte. 23

Después de una divertida noche de juegos era un nuevo día y todos se fueron a sus hogares, menos Rias por petición de Issei.

Rias: Que pasa.

Issei: Tengo algo de tiempo ahora, así que vayamos a ver a tu primo.

Rias: Gracias por ayudar.

Issei: No te preocupes.
Vamos rápido ahora que Tsumugi esta dormida.

Rias: Esta bien.

Tomando camino al territorio Bael, donde no les tomo mucho tiempo llegar.

Sairaorg: Rias y esta sorpresa.
Y más la de tu amigo.

Issei: Un gusto me llamo Hyoudou Issei yo..

Sairaorg: Ya se y te lo agradezco enserió.

Dándole una pequeña sonrisa para guiarlos a la habitación de su mamá donde al llegar solo formó una sonrisa triste.

Issei: Puedo notar lo mucho que te preocupas por ella.

Sairaorg: Es lo único que tengo y por ella es que me esfuerzo para ser más fuerte.

Issei: Debe de estar orgullosa de ti.

Dándole unas palmadas en la espalda para dar unos pasos y quedar frente a Misla Bael.

Issei puso su mano en la cabeza de la mujer para luego cerrar sus ojos y analizar lo que estaba pasando.

Sairaorg: Sabes como curarla.

Issei: Siendo sincero es algo interesante esta enferma.

Rias: Entonces es imposible.

Issei: Yo no dije eso.
Yo dije es interesante no imposible.

Sairaorg: Como lo harás.

Issei solo le dio un pequeño golpe en la frente de la mujer dejando a los primos sorprendidos por lo que dijo.

Issei: Listo.

Rias-Sairaorg: Eh?

Rias: Asi de fácil.

Issei: Ustedes lo vieron así de fácil.

Sairaorg: Entonces cuando despertara.

Issei levantó su muñeca para ver la hora.

Issei: En 5 segundos.

Ambos solo pudieron parpadear donde al instante la pelicastaña se despertó de golpe.

Issei: Mi error 3 segundos.

Sairaorg: Mamá.

Misla al escuchar esa voz miro hacia la derecha para ver a su hijo soltar una lagrima.

Misla: Hijo has crecido mucho.

Dandole una sonrisa mientras extendía sus brazos, Sairaorg sin dudar fue a abrazarla.

Rias: Issei gracias.

Tomando la mano del pelinegro.

Issei: Ver a una familia feliz es lo que me alegra más que nada.