24

1 0 0
                                    

Izuku se encogió un poco al escucharle. No podía negar que tuviera razón, pero él lo había soltado como si se lo echara en cara, cuando realmente no era su culpa. Acababa de descubrir cómo se activaba el One For All, y claramente no podía controlarlo. En cuanto a su habilidad con la espada, apenas había podido aprender a utilizar un par de movimientos, a esquivar y a bloquear.  Todo lo más básico que se podía aprender con una espada.  Además, ¿Como se suponía que iba a dar la clase? Él estaba todavía con su brazo vendado, dudaba de que pudiera tan siquiera sujetar una espada.

-¡Muy bien, empecemos!- anunció Kan.-primer ejercicio: ¡Veinte sentadillas!

-¿Sentadillas?- repitió Izuku, confuso. Nunca había escuchado de aquel ejercicio, le sonaba a algo como "sentarse". Miró a Denki, y vio que estaba subiendo y bajando, flexionando y estirando las rodillas, como si, en efecto, se estuviera sentando. Trató de imitarle, pero al bajar perdió el equilibrio y cayó de culo al suelo.

-¿¡Qué rayos!?-Denki empezó a reírse descontroládamente.-¿¡Nunca has hecho una sentadilla en tu vida!?

-¡Silencio!-Kan se acercó a él y le dio un golpe en la cabeza.-¡Tú ni siquiera las haces bien!

-Pero yo no tengo tanta flexibilidad como Tamaki...-protestó Denki.

Izuku se giró hacia Tamaki. En efecto, éste era capaz de flexionar las rodillas completamente y volver a levantarse, balanceándose con los brazos como si aquello no supusiera ningún esfuerzo. Al oír que le mencionaban, se agachó de puntillas y tiró de su capucha hacia abajo, ocultando su cara.

-Eso no es ... cierto.-negó éste.-no soy tan flexible...

-No te avergüences por ser el único de los tres que sabe lo que hace.-Le dijo Kan, para luego girarse hacia Denki e Izuku.-¡Y vosotros dos, espabilad y poneros a ello! ¡Vamos!

Izuku asintió, levantándose del suelo. Pero, en lugar de tratar de imitar a Denki, se fijó más en los movimientos de Tamaki. Si balanceaba los brazos, podría utilizar el impulso del movimiento para mantener el equilibrio, asique se decidió a intentarlo.

Para su sorpresa, no se cayó, pero tampoco fue un movimiento tan fluido como el de Tamaki. Aunque tratara de negarlo, estaba claro que no solo tenía una mejor técnica que la de Denki o la de Izuku, sino también más fuerza y práctica.

"Tiene talento, pero es muy asustadizo."

Mirio no mentía. Durante aquella sesión de entrenamiento, solo estuvieron haciendo ejercicios simples y básicos, de los cuales Izuku nunca había practicado, pero que entendió con rapidez. Sin embargo, la forma en la que Tamaki llevaba a cabo esos ejercicios demostraba mucho más de lo que el propio Tamaki quería reconocer. Contrario a lo que se podría pensar por su apariencia enclenque, Tamaki era rápido y ágil, tal vez incluso tanto como Aizawa, pero su propia condición de eterno terror e inseguridad le impedía verlo e ir más allá, limitándose a sí mismo.

En cuanto terminaron, Izuku se dio cuenta de que ya no le dolía el brazo en absoluto, pero aún así no se atrevió a quitarse la venda hasta esa misma tarde, cuando Recovery Girl le confirmó que su brazo se había recuperado por completo y que podía quitarse la venda. En cuanto lo hizo, Izuku descubrió que tenía una cicatriz que le recorría del hombro a la muñeca.

-Mi magia permite curar las heridas del cuerpo, pero no las cicatrices.-le informó esta.-miralo de esta forma: esa cicatriz te servirá para recordarte las consecuencias que tiene ese poder tuyo. Si no aprendes a manejarlo con cuidado, me temo que te esperan otras muchas cicatrices como esa.

Izuku asintió, entendiendo su situación. Aún recordaba con claridad el instante en que su brazo pareció estallar de repente, y el horrible dolor que le siguió. Definitivamente no quería volver a pasar por aquello, asique tenía que apresurarse y aprender a como manejar su magia.

A partir de la hora de la comida no tenía clases, permitiendole moverse libremente por Yuuei. Su primer pensamiento fue ir a buscar a Aizawa, pero la academia era enorme, y no tenía ni idea de dónde podría estar, asique al final decidió ir a la biblioteca. Al llegar, descubrió que la pared había sido completamente reparada, como si no le hubiera pasado nada en absoluto. El interior también parecía completamente intacto. Uno de los clones de Ectoplasm se movía de un lado a otro colocando libros y atendiendo a las preguntas de los pocos alumnos que estaban allí. Izuku se encogió un poco y subió al segundo piso de la biblioteca, recogiendo unos cuantos libros sobre magia arcana de la estantería. El clon de Ectoplasm le advirtió que estaba prohibido sacar los libros de la biblioteca, y en ese momento, todas las mesas estaban ocupadas, asique se sentó al lado de la estantería y dejó los libros que llevaba a su lado, tomando uno y empezando a hojearlo.

Pasó gran parte de la tarde allí, mirando con cuidado cada libro de la estantería. Aunque su objetivo principal era encontrar algo sobre el One For All, casi todo lo que estaba escrito en aquellos libros le llamaban la atención, por lo que inevitablemente terminaba leyéndolos hasta la última palabra. Estaba tan absorto en la lectura que no se dio cuenta de que la biblioteca se había vaciado por completo, hasta que la voz de Mirio se acercó a él.

-¡Oh, estás aquí!- Mirio se agachó de puntillas, levantando una mano para saludarle.-¿Estás mejor del brazo?

-¡Ay!- Izuku instintivamente se echó hacia atrás del susto y se golpeó la cabeza contra la pared.

-¡Ah , perdona!- se disculpó Mirio.- no quería asustarte. ¿Te has hecho daño?

-No, estoy bien.- Izuku sonrió, llevándose una mano a la zona golpeada.

-Ah, menos mal.- Mirio suspiró, aliviado.-Tamaki se habría enfadado mucho conmigo si te hubieras hecho daño por mi culpa. Ha estado muy preocupado desde lo de ayer. Se siente culpable por lo que te pasó, aunque yo le he dicho que no era su culpa. Ahora mismo está abajo, quiere pedirte perdón.

Bnha Fantasy AU Donde viven las historias. Descúbrelo ahora