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El sonido del agua que expulsaba la regadera y ésta terminaba estrellándose contra el suelo, se escuchaba demasiado por el eco del baño. Mientras tanto, un joven de mechón rubio, acomodaba algunas cosas de su recamara, para poder dormir tranquilo cuando su pareja saliera de la ducha.
El teléfono del castaño se hizo escuchar por toda la habitación, Auron dejó su pijama y la de su novio sobre la cama donde dormían, se acercó a la mesita de noche para luego sonreír al ver de quien se trataba la llamada.
-Hola, Lanita -sonrió alegre y tomó asiento sobre su cómoda cama.
-¡Hola, Auron! Qué gusto me da escucharte, tío! -ambos soltaron una pequeña risita- ¿Cómo están mis chicos favoritos? -preguntó con interés.
-Bien, de maravilla -se humedecio los labios y volvió a formar una sonrisa con estos- Acabamos de cenar y ahora mismo, Luzu se encuentra duchandose, no debe de tardar en salir -se levantó de la cama para volver a acercarse a su armario- ¿Tú como estás? -preguntó amable.
-Bien, he tenido mucho trabajo pero estoy bien, gracias por preguntar.
-Me alegra escuchar eso -sacó un par de ropa interior y lo aventó a la cama.
-Por cierto, estoy ansiosa por recibir su invitación de boda -ambos soltaron una risita.
-Ambos creemos que aún es muy pronto para decidir casarnos... Apenas tenemos unos meses que decidimos mudarnos juntos -dijo en un tono tranquilo mientras cerraba las puertas de su armario.
-De verdad quiero que te cases con Luzu, eres el chico perfecto para él, no entiendo porque se lo están tomando tan lento.
» Con él no hubo nada lento... Le propuso matrimonio después de que se mudaron juntos.«
Pensó la mujer de cabello rubio.
-No hay prisa... ¿O si? -preguntó divertido.
-Para nada, sólo digo -soltó una risita.
-Siendo muy honesto contigo -se recargó sobre la puerta de la habitacion- me siento muy afortunado, tanto tú como la familia de Luzu, me aceptan y están conformes con nuestra relación -una boba sonrisa se le dibujó en el rostro- Yo también quisiera casarme algún día con Luzu... Pero no quiero presionarlo, además, siento que estamos muy bien así por ahora -otra pequeña risita se escapó de sus labios.
-Entiendo, yo estoy muy feliz de que hayas aparecido en la vida Luzu, Borja necesitaba alguien en quien confiar, aparte de mí y de su hermano.
Las palabras de aquella chica le habían provocado una extraña sensación al de mechón rubio, hizo un pequeño puchero con sus labios y aunque lo dudó por algunos segundos, decidió quitarse la duda.
