Capítulo 10 | Te odio, Drystan Polkov.

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¿Qué es lo peor que te puede pasar, ser secuestrada por tu prometido falso, o terminar con una venda en la parte trasera de tu cabeza y todo por culpa de él? Y aún así no te deja libre, al contrario, te lleva con él a quien sabe dónde en contra de tu voluntad.

Cómo lo odio.

Resulta que le importó un comino que por culpa de él me haya golpeado el cuerpo y que me haya hecho una pequeña abertura en la parte trasera de la cabeza, porque no desistió y ahora me tiene secuestrada en el jet el muy hijo de puta. Según lo que me informó una azafata —porque no quise hablar con él— después de recuperar la conciencia, un médico me atendió minutos después de que mi vista se sumiera en la oscuridad. Debido al golpe inesperado y de la velocidad, me cosieron 3 puntos, o sea ¡son tres malditos puntos que dejarán cicatriz en la cabeza! Además de eso, el médico dijo que en el resto del cuerpo por suerte no tengo alguna herida de gravedad, solo se me presentaran ciertos moretones y llegaré a sentir dolor en las zonas más afectadas a la caída.

En mi mente solo están los recuerdos hasta cuando escuché la voz de alguien gritar: ¡¿Qué carajos hiciste, idiota?! Desde ahí mi mente se nubla por completo y principalmente es a causa del golpe en la cabeza. Tampoco es que haya algo realmente importante que recordar después de eso, supongo. Lo más probable es que Drystan llamó al médico porque no le conviene para nada llegar con mi cuerpo en manos a dónde mi familia, de ahí no saldría vivo, eso es seguro. De todos modos, alguien no llamaría a un médico para que atienda a una desconocida a menos que tuviera corazón, y Drystan Polkov parece tener todo menos lástima y compasión hacia las personas. Eso quiere decir que si él lo hubiera deseado, me hubiera dejado morir en ese piso sin siquiera inmutarse.

—¿Por qué tan enojada? Ya estamos llegando y, aunque te veas como una gata salvaje, te informó que a dónde estamos por llegar debes sonreír o moderar la expresión de culo apretado que tienes.

Anteriormente mencioné que no lo odiaba, ahora lo quiero ahorcar hasta matarlo dolorosamente.

—Me importa un carajo lo que quieres que haga, no lo haré. Piérdete de mi vista y déjame en paz —sin apartar la mirada de la ventana del jet, me cubrí hasta el cuello con la manta que le pedí a la azafata.

Desde hace dos horas desperté, y no he hecho nada más que beber agua, tomar la pastilla que la azafata me dió para el dolor del cuerpo y observar por la ventanilla del jet en silencio con las piernas encogidas y cubierta con la manta.

Lo he ignorado por completo todo este tiempo, sin siquiera dirigirle una mirada.

—No estoy para soportar berrinches, te pones el cinturón de seguridad que estamos por aterrizar y sales conmigo hasta el auto o le llamó al señor Alastair y le informó que su inmadura y dramática hija no quiere seguir con el plan —escuchar su voz fría y demandante solo me causa enojo. Él se cree que puede simplemente venir y darme órdenes, eso lo odio.

Dice que soy una berrinchuda, inmadura y dramática, ¿es qué él es idiota? ¡Me secuestró! Me trajo contra mí voluntad a un lugar desconocido, ese es suficiente motivo para comportame así. Y me vale lo que diga o piense de mí, yo sí tengo sentimientos y ahora la sangre está que me arde del enojo y la rabia por sus incoherentes palabras.

—¿Secuestrarme no es suficiente motivo para comportame así? Ahora mismo veo que eres un completo imbécil. Si hubiera sabido que todo esto pasaría, habría apretado el gatillo sin dudar la noche de la bodega cuando te conocí —declaré, con la voz impostada, sin un ápice de temblor, observando cómo un pajarito se posaba junto a la ventanilla—. De aquí no me bajaré y es mi última palabra.

No recibí respuesta, solo un tenso silencio. Mucho mejor para mí. Me acurruque más y cerré los ojos. Decirle de esto a mi padre no valdrá la pena, él seguramente ya lo sabía desde el principio y a mis hermanos, solo significarán problemas y no quiero eso. Tengo que seguir con el plan de este compromiso falso.

Entre Líneas © [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora