(Advertencia +18)
Probablemente haya pasado un día completo en este lugar. y aun así, no me he atrevido a comer nada de lo que nos trajeron.
—Deberías comer algo —sugiere Madisson, en voz baja—. No lo has hecho desde que trajeron esa comida, y ya hace casi dos días que pasó eso. Eso no está bien.
Repudiaba todo lo que tuviera que ver con Alex, incluso un simple plato de comida podía ser víctima del desprecio que yo sentía, y aunque por dentro me estuviera muriendo de hambre no podía ceder.
—No tengo hambre —miento.
—Yo que tú aprovecho el momento —Joshua se encuentra recogido de piernas en la otra esquina. Habla tan sereno en medio de esa penumbra que llega a darme un poco de miedo el tener que escucharlo—. Ha pasado un día completo sin que traigan otro plato de comida, dudo que lo hagan seguido, así que deberías aprovechar lo poco que tienes ahora. Eso, a menos que quieras morir de inanición.
—¿Te volviste filósofo? —increpó a la defensiva—. No necesito tu cuidado y mucho menos tus consejos.
—Solo intento que no seas tan tonta —replica en tono cansado—, es decisión tuya si lo tomas o no.
—Pues no necesito tus consejos.
—Karol —me reprende Madi—. Deja de gastar tus energías en pelear. No es lo que necesitamos ahora.
—Necesitamos salir de aquí, lo sé, eso es lo que necesitamos.
—Y no vas a lograr nada si eres una débil —continua Joshua—. No llegarías demasiado lejos ni aunque quisieras. Te atraparían al instante.
Le dedico una mala mirada antes de estirarme a coger el plato y dar un bocado de lo que sea que contiene. De inmediato mi ceño se frunce ante el mínimo contacto de la comida con mi boca. Sabe espantoso, muy espantoso.
—Esto es...
—Cómela —le escucho ordenar, y es difícil contrarrestar dicha orden porque parece tener mucha más autoridad que nosotras dos juntas.
Ahora entendía el como habían llegado a tener tan altos mandos junto a Nathan. Estaban forjados en situaciones difíciles, así que les era mucho más fácil sobrevivir a ellas. Yo en cambio; me destruía ante cualquier evento catastrófico en mi vida, y odiaba eso. No sabía reponerme ante lo difícil y eso era un problema más a mi lista.
Cuando terminé de comer todo lo que había en ese plato simplemente se escuchó el chillar del mismo en cuanto lo alejé de mi. Apenas estaba tolerando lo que había ingerido.
—¿Puedo preguntarte algo? —susurra Madi, mirándolo.
—¿A mi? —pregunta confundido—. ¿Que necesitarías saber?
El como sobrevivir aquí supongo.
—Es solo una pregunta.
—Adelante —murmura incorporándose un poco—, de todos modos no puedo escapar de tus preguntas.
Si eso era un chiste no resultaba gracioso para mí.
—¿Lograste encontrar a tu hermana? Digo..., ¿en serio valió la pena hasta donde has llegado?
Joshua se toma un tiempo antes de responder. A tal punto que llego a creer que no va a responderle.
—Si lo que quieres saber es si me arrepiento de lo todo lo que he hecho hasta ahora, la respuesta es no —afirma—. No estoy aquí por mis malas acciones —aclara neutro—. Estoy aquí porque no me quedé callado en cuanto vi que esto no resultaba favorable para mí, en cuanto noté que no iban cumplir con su palabra. No hay peor cosa que odie un psicópata como ese —y supongo que habla de Alex—. Que lo reten y le hagan sentir que pierde autoridad es algo imperdonable para él. Supongo que llegué tarde a esa clase.
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DIOSA 2 | ¿Puede el hechizo ser eterno?
FanficUna vez te dije que sí por mí fuera, nuestro hechizo sería eterno. Pero, ¿Qué pasaría cuando tú ya no quieras formar parte de él? O quizás... ¿cuándo toda nuestra magia se rompa?