DIOSA 2 | ¿Puede el hechizo ser eterno?

Capítulo 12.

—¿Entonces crees que tu relación está yendo a pique?

—Últimamente ese es mi pensamiento, Valentina.

—Sinceramente no sé que decirte. Se veían demasiado bien como para que ahora estén viviendo todos estos problemas.

Le doy una sonrisa triste.

Si ella no lo creía, imagínense como me sentía yo.

—Siento que una parte de esto es mi culpa —murmuro—. Yo, mis celos e inseguridades. Tal vez si yo... fuera un poco más accesible...

—Karol, no. No puedes decir eso —me riñe—. Que quieras que alguien te de tu lugar no tiene nada de malo. El problema no es que tenga una amiga, el problema es que te ha dejado de lado por esa amiga. Francia puede parecer la mejor amiga de todo el mundo, con su carita dulce y todo, pero si algo me he dado cuenta es que sabe muy bien jugar sus fichas.

—¿A qué te refieres?

—A cómo se comporta. Sabe como actuar y con quien hacerlo. Sabe en que momento pedirle ayuda a Ruggero y provocar una pelea monumental. Me ha tomado tiempo analizarla, pero definitivamente esa chica no es buena.

—Créeme que lo sé. Lo supe desde la primera vez que me senté con ella en una mesa para que Ruggero la presentará como su gran amiga.

Valentina me abraza por los hombros, en busca de recofortarme ante mis problemas.

—Quiero creer que si resisto un poco mas mi relación va a salvarse de todo.

—¿Soportar qué? —increpa—. ¿Qué siempre llegue tarde a donde lo citas? ¿Que se olvide de ellas quizás o que simplemente más cancele por "ayudar a Francia"? A este punto simplemente no entiendo como sigues soportando eso.

—Valentina, ¿por qué crees que las peleas son constantes? Vivo la vida reclamándole todo lo que hace. Yo... quiero que mi relación funcione.

—Para que algo funcione, Karol, tiene que haber un poco de las dos partes. Y eso no existe en tu relación justo ahora. Piénsalo.

Y con eso me dedica una última sonrisa ante de ingresar al salón en el que le toca hoy.

Yo simplemente me quedo de pie en medio del pasillo.

*****

—¿Piensas que la fiesta de cumpleaños es una buena idea?

Noah me mira por encima de su vaso, con el ceño fruncido y con las palabras "no creo que funcione" tatuadas en su cara. Valentina por su parte parece estar igual.

—No me dejen sola en esto —suplico cuando noto su resistencia—. Son mis mejores amigos. Los necesito.

—Karol estás yendo muy lejos —masculla Noah.

—Solo quiero demostrarle a Ruggero que podemos seguir siendo los mismos. Que si volvemos el tiempo atrás y hacemos lo de siempre entonces estaremos bien.

—Yo no creo que esa sea la solución.

—Noah...

—Tu hermana tampoco está muy contenta con esto, y ni que hablar de tu hermano.

—Es cierto —acota Valentina—. Agustín me ha contado que las cosas están muy tensas entre ellos. Tu hermano incluso a llegado ser un poco grosero con la chica. No digo que eso esté bien, pero... igual no viene a mal que alguien la ponga en su sitio.