III.II

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La noche pasó y el día llegó.

Los trillizos Potter habían despertado esa mañana y una vez se vistieron decidieron ir a desayunar al piso de abajo en el caldero chorreante.

Habían compartido habitación los trillizos, durmieron en una cama de matrimonio.

Cualquiera podría pensar que los trillizos estuvieron incomodos durmiendo los tres en una misma cama, pero a decir verdad en sitios más apretujados habían dormido con anterioridad.

Como por ejemplo el armario bajo la escalera.

Halley estaba realmente desanimada, por mucho que quisiera evitarlo, las palabras de Marge seguían rondando por su cabeza, realmente ella se veía así?

Harper se encontraba cepillandose los dientes y Harry miraba por la ventana, casualmente el metro de Londres pasaba por ahí cada pocos minutos.

Él decidió apartarse de la ventana y caminó hasta un sillón que había frente a la cama, dónde estaban todos los libros para el nuevo curso esparcidos.

Fue a por uno en especial, el libro de cuidado de las criaturas mágicas.

Le quitó el cinturón que lo cubría y se quedó observandolo por unos segundos, hasta que lo agarró.

El libro hacía ruidos extraños, pero de pronto este se abrió y empezó a moverse como loco, como si se tratara de una bestia salvaje.

Él intentó mantenerlo en sus manos para poder cerrarlo, pero el libro hacía una fuerza imperiosa por tar de hacerle daño.

-Harry!-le regañó Halley-te dije que no los abrieras!

El libro cayó al suelo y empezó a perseguir a Harry, pero este se subió encima de la cama y el libro quedó a los pies.

Halley se acercó a su hermano para ver al libro a los pies de la cama.

El libro se metió debajo de la cama y ambos hermanos miraron.

-Cuidado con el pelo-habló Harry

-Tranquilo, con el pelo insufriblemente corto a penas llega a tocar mis hombros-suspiró Halley

Cuando los trillizos llegaron de su segundo año en Hogwarts y tía Petunia vio lo mucho que le había crecido el cabello a las gemelas, sin duda no dudó en cortales el cabello ella misma.

Hasta que les quedó por encima de los hombros.

Halley lo detestó al momento, no le gustaba absolutamente nada, pero Harper no se quedaba atrás.

El libro se quedó quieto bajo la cama, por lo que ambos hermanos lo observaban.

-Que sucede?-preguntó Halley entrando a la habitación de nuevo

-Ten cuidado-susurró Halley

Cinco segundos después, el libro avanzó apresuradamente hacia delante, pero Harry y Halley se apartaron rápidamente.

El libro se quedó a los pies de la cama, tratando de buscar a los trillizos y al no verlos se escondió de nuevo bajo la cama.

Harry se tumbó en la cama y empezó a quitarse sus deportivas, le servirían de cebo para atrapar al dichoso libro.

-Que haces?-le susurró Halley-no es momento de ponerse cómodo!

-Por que tiembla el suelo?-preguntó Harper desde el baño subida en la encimera del baño

-Es el metro-respondió Harry para tirar al suelo su zapato

Instantaneamente el libro fue a por el zapato, pero lo que no esperó el libro, fue que Harry saltara sobre el y consiguiera pararlo al momento.

Nagini || Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora