Hugo Hunther.
En cuanto abro mis ojos y recuerdo con exactitud donde me encuentro y con quien, sonrio y me muevo a un lado, donde encuentro la mitad de su cuerpo cubierto por las sabanas y su espalda desnuda queda completamente a mi vista. La luz tenue de la lámpara logra que la palidez de su piel se vea incluso increíble y llevando mis dedos medio e índice a su nuca, aparto un poco su cabello y comienzo a descender por toda la línea de su columna, vuelvo a ascender y lo repito una y otra vez.
–Tu... –digo, cierro mis ojos. –En ocasiones me haces sentir, débil...
– ¿Por qué? –su voz un poco ronca, sonrio. – ¿Por qué te hago sentir débil?
–Porque estoy en tus manos... –Pierina con lentitud mueve su cabeza a un lado, fijando su mirada en mí. –Porque en ocasiones he pensado que el amor te vuelve débil.
–El amor no es debilidad, bebé... –sonrio y asiento.
–Lo sé, pero creo que después de haber estado con tantas mujeres, yo no llegue a pensar que, una mujer como tú, tan escandalosamente hermosa, buena, sensual y provocativa lograra hacer palpitar mi corazón de este modo –tomo su mano y la llevo hasta mi pecho. –Late por ti, Piera, cada día, cada minuto y segundo, mi corazón vive latiendo por ti.
–Hugo...
–Te amo... –noto como se tensa, sonrio un poco, busco acomodarme con la mirada fija al techo. –Jamás llegue a pensar que le diría a una mujer que la amara, pensé que solo sería con mamá, ya veo que no, que tú has logrado que yo esté completa y locamente enamorado de ti.
–Yo...
–No debes decirlo si aún no te sientes preparada –volteo a verla. –Estas enamorada de mí, lo sé, me quieres, lo sé, pero decir te amo no es algo tan fácil.
–Siento que si lo hago, pero me da miedo decirlo –confiesa, se acerca logrando unir la desnudez de sus senos en mi pecho. –Lo siento muy dentro de mí, pero me da tanto miedo expulsarlo de mis labios.
– ¿Crees que no sentía miedo al decírtelo? –me mira fijo. –Sacias mi deseo, logras que mi piel arda de ganas por ti, Pierina Gómez, me tienes en tus manos, completamente –me acerco un poco a ella, rozo mis labios en los suyos. –Dame solo una oportunidad de demostrarte este intenso amor que siento por ti, por favor...
–Hugo... –ella logra acercarse por completo a mi rostro. –Te daré todas las oportunidades que quieras, porque yo también lo hago, pero me da tanto miedo de decírtelo.
–Te amo, y lo digo por los dos, Pierina... –sonríe. –Nos amamos y seré paciente hasta que tú me lo puedas decir.
– ¿Esperaras por mí? ¿Verdad? –sonrio.
–Tú, no te vas a deshacer de mi tan fácilmente, niña... –reímos. –Yo no me imagino la vida sin ti, no...
–Te quiero...
Dice cerca de mis labios y luego nos besamos, con una intensidad que incluso logra que mis huesos ardan de deseo por ella y joder, si, echare de menos tenerla conmigo.
Tres días después...
Pierina Gómez.
Volteo en el instante que tocan a la puerta.
–Llego el taxi... –bajo mi equipaje de la cama, miro fijo a Francia. –Todo estará bien, ¿Si?
–Estoy tan nerviosa incluso de subir a ese avión, hubiera sido más llevadero si Hugo hubiera ido conmigo al aeropuerto, pero no puede.
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Solo Una Oportunidad, Por Favor (Saga Por Favor #2.5) ☆
Lãng mạnCada Hunther tiene un secreto, uno mas intenso que el otro, pero el Hunther donde me empeñe a posar la mirada no es mas que un Hunther que no se deja intimidar de nada, que no le gusta estar en un traje de vestir y le da piquiña las fiestas de etiqu...