Everything Has Changed |Harry Styles| - EDITANDO -

Capitulo 4

Me acurruque en los brazos de Gregg, y en mis brazos estaba Ally. Estábamos viendo una película de Disney, Toy Story 3. A Ally le encantaba tanto ver esas películas, cuando lo sepa Liam la va adorar más de lo que ya lo hace.

Ally sabía que Gregg no era su padre. A Gregg lo conocí cuando Ally tenía 2 años, como veía que me daba piquitos con Gregg, le empezó a decir Papá Gregg. Y para ella es su papá, pero por más que le digo que no, aun así lo acepta. Ellos se llevaban muy bien, Ally se lleva con todos los primitos y sobrinitos de Gregg. En Londres no tenía casi amigos, tenía pocos, unos vecinitos, otros niños de su guardería nada especial.

Como siempre, yo, la que era la más sensible lloraba con una película animada. Ally solamente me abrazaba más y más mientras me susurraba "No llores mami, no llores solo es una película" y yo solo me limitaba a reír con lágrimas en los ojos.

Todos nos fuimos a nuestra habitación. Ally duerme en otra habitación -la de Ivana - mientras que yo y Gregg en otra, en la que era mi habitación. Me quite el sujetador y me quede solo en bragas, me puse una musculosa de Gregg que me quedaba un poco abajo del trasero. Salí del baño después de cepillarme los dientes y ahí se encontraba Gregg, en tan solo jeans negros ajustados, con los que vino. Me acerco a él y lo beso. Esto es muy tonto pero ¡Joder! ¡Gregg me excita demasiado! Es delgado, con algunos lunares en la cara, tenía una espalda ancha y musculosa, al igual que sus piernas y sus brazos.

― Me excitas, como no tienes ideas, Scarlett. ― dijo riendo ―. Usted es muy sexy señorita Hobbes. ― reí, a Gregg lo conocí en una fiesta de la universidad. Cuando nos conocimos no nos tuteamos, y él me decía señorita Hobbes y yo le decía Señor Sulkin. Gregg O'Donnell .

Mete las dos manos entre mis cabellos y me sujeta la cabeza. Su beso es exigente, su lengua y sus labios, persuasivos. Gimo y mi lengua indecisa se encuentra con la suya. Me rodea con sus brazos, me acerca a su cuerpo y me aprieta muy fuerte. Una mano sigue en mi pelo, y la otra me recorre la columna hasta la cintura y sigue avanzando, sigue la curva de mi trasero y me empuja suavemente contra sus caderas. Siento su erección, que empuja lánguidamente contra mi cuerpo.

Vuelvo a gemir sin apartar los labios de su boca. Apenas puedo resistir las desenfrenadas sensaciones que me devastan el cuerpo. Lo deseo con locura. Lo tomo por los brazos y siento sus bíceps. Gregg es sorprendentemente fuerte... musculoso. Con gesto indeciso, subo las manos hasta su cara y su pelo alborotado, que es muy suave. Tiro suavemente de él, y Gregg gime. Me conduce despacio hacia la cama, hasta que la siento detrás de las rodillas. Creo que va a empujarme, pero no lo hace. Me suelta y de pronto se arrodilla. Me sujeta las caderas con las dos manos y me desliza la lengua por mi ombligo, avanza hasta la cadera mordisqueando me y después me recorre el abdomen en dirección a la otra cadera.

― Ah ― gimo.

No esperaba verlo de rodillas frente a mí y sentir su lengua recorriendo mi cuerpo. Es excitante. Apoyó las manos en su pelo y tiro suavemente intentando calmar mi acelerada respiración. Levanta la cara y sus ardientes ojos azules que me miran a través de las pestañas increíblemente largas. Sin apartar sus ojos de los míos, introduce muy despacio las manos en mis braga, las pega a mi cuerpo y las desliza hasta el trasero y avanza hasta los muslos. No puedo dejar de mirarlo. Se detiene y, sin apartar los ojos de mí ni un segundo, se moja los labios. Se inclina hacia delante y pasa la nariz por el vértice en el que se unen mis muslos. Lo siento junto a mi sexo.

― Hueles muy bien ― murmura.

Cierro los ojos, con expresión de puro placer, y siento como una sacudida. Extiende un brazo, tira del edredón, me empuja suavemente y me caigo sobre la cama.