6.Segunda fiesta.

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Aquí estamos en otra de esas fiestas de nuestra gran Dina, he conversado un poco más con ella, y me parece una chica genial, aunque no tanto porque siempre anda detrás de Liam como si fuera lo único que existiese en este mundo y los más ridículo es que Liam le presta  más atención a ella y a mi ni siquiera me mira.

Genial, tengo mi vida amorosa hecha un desastre.

Localizo con la mirada a Jared, y voy hasta él para sentarme a su lado, siempre está en el mismo lugar.

—¿Has conseguido ya a persona que está detrás de la cuenta de chismes?—es lo primero que pregunta para luego pasarme un vaso de plástico.

—Aún no, pero lo descubriré muy pronto—digo y me doy un trago de ron—Lo descubriremos, ambos.

—Genial—escucho que dice por lo bajo.

Liam viene hacia nosotros, y me toma de la mano, no suelto la suya, pero me parece extraño que cogiera mi mano sin decir nada antes.

Comienzan a pasar los minutos, y las horas y creo que he bebido un poco más de lo normal, es mi segunda fiesta y ya estoy así.

Necesito a Toni y Carlos, aquí y urgente.

Jamás pensé que Liam iba a buscarme para beber, junto con todos sus amigos que son millonarios, y tienes muchos músculos.

¿Será que todos los millonarios tienen el gen de belleza?

Por dios.

Ya quisiera haber nacido en una cuna de oro para nacer linda y hermosa.

Subo a las habitaciones de arriba y veo que una de las puertas está abierta, sin más, entro en esa y veo a dos personas besándose encima de la cama, ambos me miran y veo que es Jared y otra chica que desconozco.

—Lo siento, no quería interrumpir—digo, tratando de que mi voz salga firme, pero solo salen balbuceos.

Oh, no.

Creo que viene eso de vomitar ahora mismo.

Estoy lo suficientemente borracha como para hacerlo ahora mismo.

Salgo de la habitación y busco rápidamente el baño.

Cuando lo encuentro me agacho delante del inodoro y hay viene denuevo.

¡Que putada!

Vómito, y siento que eso está muy bien, aunque mi estómago se contraiga para hacerlo.

La puerta del baño se abre y no veo quien es.

Solo sé que me me apartan los cabellos que tengo en la frente y me toman por la misma para que no me caiga.

||

Me despierto y lo primero que hago es ver que estoy en una cama que no es la mía, en una habitación que tampoco es la mía, y me resulta extraño.

¿Cómo?¿En dónde estoy?

El dolor de cabeza es insoportable, veo que alguien sale del baño de esa misma habitación, porque de alguna manera es algo grande.

—Buenos días, Stormi—dice una voz que reconozco.

—Buenos días, Jared—digo—¿Dónde estamos?

—En una de las casas de mis padres, tranquila dormí en otra habitación.

Se voltea para ir a buscar un poco de ropa, porque solo trae una toalla envuelta en su cintura.

Sin vergüenza alguna le miro el trasero.

Menudo culazo tiene.

Me siento en la cama, me miro y veo que solo tengo una camiseta de él y me ánimo a hablar.

—No recuerdo nada,¿podrías decirme que sucedió anoche?

—Luego de que vomitar, seguimos con la fiesta, bueno tú la seguiste con Liam y sus amigos, casi bailas encima de una mesa, yo te bajé de allí y casi te besas con un chico, al que yo creo que detestas—explica mientras se coloca su ropa y yo me tapo los ojos para no ver.

¿Cómo puede ser que yo halla hecho todo eso?

No puede ser.

Joder.

¡Que vergüenza!¡Pero que vergüenza!

—¿Mi ropa?—pregunto y quito mi mano de enfrente de mis ojos.

—La has vomitado—suelta—Creo que deberás ponerte mi ropa, te puedes quedar con esa camiseta y ponte uno de mis shorts o mis pantalones.

—Tus shorts me deben de quedar ridículos, al igual que tus pantalones.

—Eso eso, o irte solo en camiseta y bragas—se encoge de hombros.

Verdad, decidí optar mejor por el short, sí, eso sería mejor.

—Un short por favor—digo y extiendo mi mano.

Él va hasta uno de los gaveteros y me lanza un short de color negro y blanco, el cual me coloco por debajo de las sábanas.

Me levanto y me miro en el espejo de pie que hay en la habitación.

Genial, me queda un poco ancho, pero soy alguien que puede afrontar las críticas.

Mi móvil suena, en una notificación, y si es Escuela_Reina_del_Chisme, juro que me mato.

Miro la pantalla de mi móvil...

Y sí, es esa misma cuenta.

¿Por qué debo de odiar tanto a la persona que está detrás de todo eso?

Quizá porque la directora le va a enviar un correo electrónico a esa escuela de arte a la que querés asistir para que te acepten.

Bien pensado conciencia.

—¿Es la cuenta de chismes?—pregunta Jared sacándome de mis pensamientos.

Asiento.

Desbloqueo mi teléfono y voy directo hacia la publicación.

Mierda, si, ahora es seguro, la persona que está detrás de la cuenta de chismes frecuenta todas las fiestas de la escuela.

Nuestra querida amiga Mencía Walker, casi se besa con un desconocido.

Y una foto mía casi al darle un beso a esa persona, que desconozco porque nunca en mi vida lo he visto.

Nuestro querido Liam Payne ha estado morreandosé con más de una anoche.

Y fotos de Liam y unas cuatro chicas morreandosé con él.

Mierda, que rabia siento en este instante.

¿Por qué no eligió besarse conmigo?

—Debemos irnos—anuncia Jared.

—Si, claro—digo.

||

Jared me trajo hasta mi casa, hoy es sábado y son las 9:00am, por lo tanto decido que debo de entrar por la escalera que está recostada a la pared de mi habitación.

La subo y por suerte la ventana está abierta.

Siento golpes en la puerta de mi habitación y supongo que es mi madre, pero lo confirmo cuando comienza a gritar mi nombre.

—¡Mencía!

Rápido me lanzo a la cama y me tiro una sábana encima como puedo.

Ella entra y yo me hago la dormida.

—Mencía, despierta, a llegado alguien—dice.

—Mamá no estoy para visitas ahora—susurro.

—¿Y esa camiseta?

Esta vez sí abro los ojos.

—Es de Toni la ha dejado anoche aquí—explico.

Ella no insiste más, por lo tanto, me vuelvo a hacer la dormida, algo que es genial, porque ella se lo cree, o eso me hace creer a mi.

Una Química PerfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora