Harry Potter and The Poison Pen [Traducción]

Epilogo

La vida puede ser divertida.

Harry entró al Gran Comedor para la cena. Había pasado una semana desde el ritual Goblin y la eliminación de la marca oscura de Snape. Hoy era la primera vez que se le permitía poner un pie fuera de la enfermería y era su estudiada opinión que Madam Pomphrey debería ser declarada Bruja Oscura por el obvio placer que sentía al 'encerrar' a sus indefensos pacientes.

Se había negado rotundamente a permitir que Harry o el profesor Snape salieran de su enfermería. No importa cuán decididamente ambos se hayan enfurruñado, amenazado o lloriqueado, ella se negó a obedecer. Poppy tenía una veta de pura maldad, Harry estaba seguro de ello.

Las quejas mentales de Harry se detuvieron tan pronto como entró en el Gran Comedor. Allí sus ojos, sin mencionar oídos, se encontraron con la vista más extraña que jamás había visto.

¡Draco Malfoy y Hermione Granger se enfrentaron en el pasillo central, cara a cara en una pelea de gritos y los profesores estaban sentados aparentemente disfrutando del espectáculo! Extraño, ¿no debería alguien poner fin a esto?

"... además, el hecho de que los sangre pura siempre hayan tenido el monopolio de todos los puestos de alto rango y prestigio no significa que...". Gritó Granger, con la cara roja.

"¡Es la tradición, Granger!" Malfoy gruñó, interrumpiendo. "Pero entonces, ¿Qué sabrías TÚ sobre NUESTRAS tradiciones y cultura? ¡Después de todo, eres un extraño, en NUESTRO mundo!"

"¿Tu mundo? ¡Creo que Su Majestad podría no estar de acuerdo! ¡Y en cuanto a la tradición! ¿Hablamos de la tradición?" Hermione arqueó una ceja con aire de suficiencia. "Tú valoras tanto las tradiciones, pero casi todas las familias de sangre pura toman a cualquier squib que les ha nacido y lo expulsan. Niegan a sus propios hijos una familia y un nombre, todo en nombre de la tradición y la pureza de sangre".

"Deja que te concentres en algo tan ridículo. Los niños squib no tienen lugar en nuestro mundo...". Malfoy fue detenido abruptamente cuando Hermione irrumpió una vez más.

"Me dijeron que los sangre pura valoran a la familia por encima de todo, y sin embargo, cuando un recién nacido no demuestra ser mágico, es desechado y olvidado. Una práctica, debo mencionar, que todavía está vigente entre las tribus muggles más primitivas cuando el niño es mujer, o no es perfecto... ¡No es, sin embargo, una costumbre practicada por las sociedades civilizadas!"

Draco Malfoy se encogió de hombros. "Esto es tradición, ha funcionado durante más de mil años. ¿Quién eres tú, un extraño, para cuestionarlo?"

"Soy hija de un squib. Como tal, ¡siento que tengo el derecho de cuestionar!" Ella resopló, luego continuó. "¿Nunca se te ha ocurrido que la sangre que lleva un squib es la misma que la que corre por las venas de sus padres y sus otros hijos mágicos? ¿Por qué culpar a un niño por la falta de magia cuando obviamente fue la sangre imperfecta de los padres la culpable de producir un niño sin magia? no el niño. ¡Quizás sean ellos los que deberían ser condenados y prohibidos de reproducirse de nuevo, para evitar que su línea de sangre obviamente defectuosa se propague!" Las palabras de Hermione cayeron en silencio mientras los estudiantes y profesores se quedaban atónitos ante su lógica.

Malfoy se paró frente a ella, con la boca abierta por la sorpresa.

"¡Me parece que la 'tradición' de la sangre pura de deshacerse de los niños squibs es simplemente una forma de ocultar sus líneas de sangre defectuosas y debilitadas!" Esperó un momento por cualquier refutación, luego continuó. "Y, para que lo sepas, un squib en una familia mágica no es diferente a un niño mágico que aparece en una familia muggle... ¡dos caras de la misma moneda! ¿Y si Oliver Twist tiene razón? Necesitamos infusiones de sangre nueva de hijos de muggles y mestizos para mantener la sangre fuerte y viva".