Parte 29

99 10 0
                                    

Jimin caminó decidido a la Gran Casa. Iba a intentar hablar de nuevo con Hari y si era posible, la sacaría de ese lugar, cueste lo que cueste. No iba a rendirse tan fácil.

Caminó a la entrada dispuesto a pasar, pero dos híbridos lo detuvieron mirándolo con enojo.

—¿A dónde vas?

Park miró a su alrededor y se extrañó al ver la entrada llena de guardias. Eso lo hizo preocupar y mirarlos angustiado. No sabía lo que estaba pasando, pero no se tardó mucho en hacer notar su duda.

—¿Qué sucedió? ¿Por qué están todos los guardias fuera de la casa?

—¿Quién te mandó a buscar? ¿Fue el líder? — Jimin permaneció callado por unos pocos segundos, hasta que asintió con nerviosismo.

—Sí... Fue él. De casualidad... ¿Tienes idea del por qué necesitaría mis servicios?

—La señorita Hari está en su ciclo de celo. — Jimin lo miró fijamente, tratando de calmar la angustia en su interior — Supongo que te ha llamado para revisarla.

—Ah... Entiendo. Entonces... ¿Podrías dejarme pasar? — el híbrido lo miró con seriedad, para después abrirle paso en el lugar.

— Adelante. Será escoltado hasta la habitación de la segunda líder.

Jimin asintió y tragó duro, suplicando que Yoongi no se lo encontrara y lo fusilara por haber mentido. Pero tenía que ver a Hari y ahora más al saber que estaba en celo y que estaba rodeada de híbridos.

La caminata fue un poco larga. Jimin jamás aprenderá a andar por esos corredores. Eran simplemente largos y confusos. No entendía cómo era que la Gran Casa parecía pequeña por fuera, pero una vez dentro, era todo un laberinto.

— Sólo puedo llegar hasta aquí. — Jimin miró al híbrido sin saber la razón por la que el canino había dejado de caminar — Los híbridos no podemos seguir adelante, por órdenes del líder. Tendrás que seguir solo.

—¿Y cómo sabré a dónde ir?

—La habitación de la señorita Hari es la que se encuentra subiendo las escaleras, la tercera puerta a la derecha.

— Bien. — Jimin miró hacia al frente y sintió su corazón golpear con fuerza — Gracias por traerme hasta aquí.

Una vez que el híbrido lo dejó solo, comenzó a caminar hacia adelante, llegando a unas largas escaleras que lo llevaban al segundo piso.

Subió con lentitud suplicando no encontrarse con Yoongi. Hari tendría que irse con él, quiera o no.

—Agh... — Hari sintió el calor ir invadiendo su cuerpo, haciéndola sentir más que excitada. Se giró hasta quedar recostada de lado y cerró los ojos, apretando la almohada a su lado con fuerza. — Mgh... Ah... Necesito... No... — arrugó el entrecejo con angustia — Puedo controlarme... — sollozó con desesperación — Puedo ... No... Ahh. Yoongi... Yoongi, te necesito... — poco a poco fue jalando la almohada hasta colocarla entre sus piernas y con los ojos cerrados comenzó a frotarse en ella, sintiendo una urgencia por ser embestida — Mhh~ ... Mhh... Ah... Ah, ah, ah... No... — lloró una vez más — Ya no quiero...

—¿Hari? — la pelinegra se sentó de golpe sobre la cama y miró sorprendida a Jimin. — Hari...

—¿Qué estás haciendo aquí? — le preguntó con la voz entrecortada — Quiero... Quiero que te vayas...

—No me iré de aquí sin ti. — se le acercó lentamente — Vamos. Aún tenemos tiempo antes de que Min Yoongi regrese.

—¡No! — Hari se alejó mientras seguía llorando — No quiero irme contigo. Quiero que te vayas y me dejes en paz... ¡Agh!

Little Cat 2 (Jimin, Jungkook, Yoongi y tú) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora