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El rubio suspiró con cansancio mientras apretaba la carpeta contra su pecho, afortunadamente la exposición había ido bien, logró hablar de forma elocuente y respondió todas las preguntas hechas por el maestro, se sentía bastante orgulloso de sí mismo.

Caminaba por los pasillos vacíos de la facultad de filosofía, la mayoría de los estudiantes ya se habían retirado, pero él eligió quedarse un rato más en la biblioteca mientras escribía otra de sus cartas para el chico que le gustaba.

Él era Jeon Jungkook, estudiante de psicología, pelinegro, alto, con tatuajes y algunos piercings. Tenía muchos amigos y toda la facultad, por no decir que toda la universidad, lo conocía. Compartían un par de clases, y siempre que se lo cruzaba aprovechaba para observarlo desde lejos.

Fue un punto de partida sin retorno, cuando comenzó a darse cuenta de los pequeños detalles que tenía el pelinegro, la forma en la que ayudaba a los demás, su linda sonrisa de conejo que le daba un toque diferente a su habitual fachada de chico rudo, su forma de ser tan divertida, iluminando todo aquel lugar al que iba tan solo con su mera presencia.

En resumen, el chico era un ser de luz, y por esa razón tenía a más de una persona interesada en él. Jimin siempre veía como se acercaban a proponerle citas, pero el chico nunca las aceptaba, y supo que no debía intentarlo, porque si Jungkook fue capaz de rechazar a los chicos más lindos de la universidad, ¿por qué lo aceptaría a él? Entonces se limitó a ser un expectador más, pero siempre escribiendo cartas que él sabía que nunca serían leídas.

Sonrió con nostalgia mientras jugaba con el sobre de la última carta que escribió y comenzó a tararear una canción. Se detuvo adruptamente cuando escuchó unas voces acercarse desde uno de los pasillos, por lo que por impulso se ocultó dentro de un salón vacío, aunque ni siquiera él sabía porqué lo hizo.

— Te dije que no, Yoongi, no insistas.

— No seas así, ¡estás en la etapa más follable de tu vida! No puedes vivir enfrascado en tus estudios, claro que está bien, pero deberías de salir un poco más, no lo sé, disfrutar de tu juventud mientras puedas.

Las voces se acercaban cada vez más, pudo reconocer que se trataba de Jungkook sin siquiera tener la necesidad de mirar, por lo que se mantuvo oculto detrás de la puerta del salón. Su cuerpo entero se tensó cuando percibió que los pasos ajenos se detuvieron junto en frente de su escondite.

— No quiero follar, ¿está bien? Tampoco me interesa tener pareja, solo quiero tener buenas notas para graduarme con honores, una pareja solo me distraería y me quitaría tiempo valioso, así que no. — espetó. — Y como vuelvas a mencionar el tema, te voy a coser la boca, ¿oíste?

— Bien, bien. — el chico bajo alzó las manos en señal de rendimiento. — Eres un abuelo encerrado en el cuerpo de un joven.

— Sí, como digas.

El pelinegro estuvo a punto de retomar su camino cuando un ligero ruido lo detuvo.

— ¡Achú! — el rubio cerró sus ojos mientras apretaba su pequeña nariz intentando no estornudar de nuevo. — ¡Mierda! — chilló.

Ambos amigos se detuvieron y observaron al rededor con confusión, buscando de donde había provenido ese sonido.

— ¿Tú escuchaste eso? — preguntó Yoongi.

— Sí, creo que fue el estornudo de un gatito. — susurró mientras se acercaba al salón abierto.

— ¿Crees que haya un gatito perdido por aquí? No hay forma, estamos en el tercer piso. — negó el más bajo. — Tal vez hay alguien pasando la noche por aquí, mejor vámonos.

— Sí... vámonos. — concordó el pelinegro mientras daba un último vistazo al salón oscuro.

Por otro lado, el rubio se encontraba con el corazón totalmente acelerado mientras retenía la respiración y mantenía su mano contra su boca. Había estado demasiado cerca de ser descubierto.

Con cuidado salió de su escondite y observó al par amigos alejarse mientras seguían hablando. Negó levemente con la cabeza y tomó la carta que había escrito tan solo minutos antes, recordando las palabras que acababa de escuchar.

"Tampoco me interesa tener pareja, solo quiero tener buenas notas para graduarme con honores, una pareja solo me distraería y me quitaría tiempo valioso."

Tal vez solo debería de dejar de escribir esas inútiles cartas, no tenía oportunidad con el chico, de esa forma solo estaba logrando quedarse estancado en algo que no le beneficiaba en nada.

Tal vez es momento de dejar ir a Jeon Jungkook.

Letters • kookmin auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora