19

1 0 0
                                    


HACE MÁS DE CIEN AÑOS.

Un nervioso Alex caminó en dirección hacia el castillo.

Sus padres le habían dicho que debía ir, a petición de la reina, tras su deseo de ser un caballero.

Pero para aquello, debía cumplir con las reglas que ellos han impuesto y que, al parecer, él es el apto para aquel puesto.

Al entrar por las enormes puertas del casillo pudo ver lo amplio que es éste por dentro.

Las estructuras de hielo son tan increíbles para sus curiosos ojos.

Al seguir caminando más allá pudo encontrarse con dos tronos vacíos que deben permanecer al rey y la reina, junto con otro más chico que no se sabe con claridad a quien permanezca.

Unos pasos comenzaron a escucharse por todo el castillo que, de hecho, pareciera que alguien estuviese corriendo.

Al girarse pudo ver a una chica rubia portando un gran vestido celeste, la cual se detuvo para mirar al chico desconocido para ella con una expresión diferente a la del resto.

Pero con curiosidad.

Mezclada con algún sentimiento nuevo para la princesa.

Para la princesa que por años ha sido ocultada del mundo exterior por sus habilidades desconocidas.

Pero ahora, podía conocer a alguien más con su misma curiosidad.

Alguien que no la verá como un ser abominable por ser diferente a los demás.

Ella se acercó a él y con algo de seriedad, Alex hizo una reverencia hacia ella, a lo que la princesa sonrió e hizo lo mismo, tomando su vestido con delicadeza.

—Deborah Helicsia II. – dijo ella, presentándose hacia él.

ACTUALIDAD

APRIL

Llegué al castillo y el ave fénix continuó rondando cerca, por las afueras de éste inmenso lugar, para poder protegerme de la criatura que debe estar por éstos lugares.

Caminé entre unas cúpulas que parecen tener criaturas durmientes dentro, por lo que decidí alejarme de ellas antes de que despierten y se cree el caos al verme.

Y ahora mismo, no podía arriesgarme con ellas y menos estando sola.

Caminé en un largo y oscuro pasillo mientras que con mis manos lograba hacer una mecha de fuego que puse en mi dedo, ayudándome a alumbrar el lugar.

Sin miedo, me acerqué a una enorme puerta celeste con lo que parecen ser enredaderas plateadas, como el aura de Alex.

Al abrirla pude ver unas cápsulas llenas de agua en las que se encontraban mis amigos dentro, con grandes tubos saliendo de éstas, con lo que parece ser su aura siendo absorbida.

Para poder alimentar a Rosie, de eso estoy segura.

Corrí sin pensar hacia las cápsulas, viendo como Michael se encuentra en una de ellas, dormido, por lo que golpeé el cristal hasta que abrió sus ojos de par en par.

—Michael... – murmuré, mirándolo.

Él comenzó a señalar hacia un punto en concreto con tanta insistencia, por lo que volteé hacia donde me decía, encontrándome con una caja que al parecer contiene unos cables en ella.

Realmente no tenía idea de lo que debía hacer, por lo que lo miré y noté como comenzaba a desmayarse.

Debía actuar rápido.

[COMPLETA] ✓ AURA: LA REINA DE HIELO II [SAGA AURA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora