❀De tal palo...☆

7

Las cámaras de seguridad de un importante banco enfocaban perfectamente a los cajeros abiertos justamente diez minutos de haber sido llenados y el culpable no había sido captado por las cámaras, no había firma ni nada. No dejo rastro...

—¿Papá Kookie?, ¿Seokmin?, ¿qué sucede aquí?

—Ya ves tu hijo.

—Ay dios mío, pasen.

—Tú te quedas aquí. —Lo sentó en uno de los sofás donde podrían verlo todo el tiempo —. ¿Y Sakura?

—Fue a comprar unas cosas para la escuela, no sé de dónde saco el dinero porque yo no se lo di.

—Ya sabes que adora ir ayudar a tu papá en la pastelería y él le da algo.

—Eso es cierto, Seokmin ve a tu habitación.

—Si papá, abuelo con permiso. —Subió las escaleras

—Ya volví papi.

—Hablando de ella.

—Abuelo Kookie —Lo abrazo —, ¿qué te trae por aquí?

—Vine a traer a tu hermano.

—Vaya, quisiera quedarme a platicar, pero la maqueta es para mañana.

—Anda ve, antes de irme me voy a despedir.

—Si abuelo.

—Más tarde te llevo una merienda.

—Gracias papi. —Aprovecho que no la veían y regreso al recibidor por una gran bolsa y subió corriendo.

—Ellos son tan diferente papá, que no sé cómo tratar a cada uno. —Le daba una taza de café.

—Seokmin ya te tomo la medida, ya sabe cómo actuar contigo.

—Temo que esté haciendo algo indebido, algo como lo que tú hacías antes.

—No creo —Mintió —, lo que pasa es que es un adolescente que cree que puede dominar el mundo con solo existir y lo cuida Heeseung a él no lo puede engañar ni a mí tampoco.

—¿Tú crees que alguien pueda engañar un enigma?

—Existió una persona porque la conocí, mi hermana Soyeon ella si podría engañarme, podría engañar a cualquier persona era una maestra en ello, ella solo sonreía y dejaba un caos atrás jamás pudieron vincularla a nada, al contrario de Somi, Somi era como Seokmin.

—¿Tú crees que Sakura?

—No creo ella es buena, ella solo se metería en problemas por su hermano no por ella misma.

—Eso me hace sentirme más tranquilo.

Sakura se había encerrado en su habitación y estaba acostada sobre una gran cantidad de dinero, ella había logrado el robo perfecto sin ayuda de nadie y no dejo su firma para evitar la sospecha de Heeseung sobre de ella.

—Me costó solo unos minutos, no necesito un alfa para consentirme, es cierto yo soy alfa, soy mi propio alfa. —Se reía satisfecha de lo que había logrado.

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—Sakura. —Jungkook tocaba la puerta.

—Adelante. —Había guardado su dinero y hacia su tarea.

—Te está quedando muy bien la maqueta.

—Gracias abuelo, pero sospecho que no solo me vas a decir eso.

—Sé que tienes el arma de mi papá Yoongi, necesito que me la regreses.