Bang Chan pensaba que su vida era buena y que siempre iba a ser así, pero ¿qué pasa cuando aparece aquel chiquillo que lo hace enloquecer?...tal vez ahora su vida es aun mejor.
"Dɪᴏs, ᴘᴇʀᴅᴏɴᴀᴍᴇ ᴘᴏʀ ᴇsᴛᴇ ᴘᴇᴄᴀᴅᴏ ǫᴜᴇ ᴇsᴛᴏʏ ᴀᴘᴜɴᴛᴏ ᴅᴇ ᴄᴏᴍᴇᴛᴇʀ..."
✞ Pare...
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Te damos la más cordial bienvenida a "La iglesia de la Luz, Verdad y Credo". Aquí podrás servir a Dios, podrás seguir por el camino del bien y podrás experimentar cosas que solo el lado del bien te podrá otorgar.
Nuestra iglesia promete que tu estancia en ella. Que sea de lo más grata posible y que te sientas a gusto.
Aquí encontrarás tu verdadero yo, aquí sentirás que estás haciendo lo prohibido, pero es la verdadera cara de todo. Te encontrarás.
No discriminaciones, no violencia. Se respeta géneros y gustos. Dios no juzga a nadie y ¿porqué no nosotros lo haríamos?.
Bienvenido a esta iglesia, que te promete vivir tu experiencia de lo más exquisita.
✞
La cabeza de Chan dolía. Después de enterarse de todo, lo único que quería era fundirse en los brazos de Seungmin y de ahí jamás salir. Seungmin era como su lugar seguro, era como aquella sensación que sin pensarlo mucho, siempre estuvo esperando.
Quería llegar a su lado y decirle "lo hice, ahora seamos felices", pero Chan sabía que aunque quisiera feliz, no lo sería por completo. Aún sentía aquella espinilla que le picaba el corazón. Tenía miedo, de nuevo tuvo miedo.
Camino directo a la iglesia. De todas formas hablaría con Seungmin, antes de que se marchara. Impediría que se marchara, no se iba a marchar.
Una vez que llego a esta, el reloj marco las ocho en punto pm. Su ceño se frunció al ver la puerta principal abierta, a esas horas debería ya estar cerrada. Con cuidado, entro por esta y miro a todos lados.
Oscuridad.
Oscuridad fue lo que percibió y aún así caminó por los pasillos, rodeando la fuente y caminando por aquella vieja iglesia. No sabía que era pero tenía un presentimiento malo.
Y sus esperanzas se fueron en cuanto vio cómo 3 hombres caminaban por varios pasillos con armas largas, como si estuvieran buscando algo.
"Han llegado por Jisung" fue lo primero que pensó y deseo con todas sus fuerzas que fuese una pesadilla, una horrible pesadilla.
Por el rabillo de su ojo miro como Michael estaba igual escondido y trataba con mucha fuerza no soltar un sollozo muy fuerte.
— Mike... — Chan susurro acercándose lentamente y con cuidado. — ¿Que ha pasado?.
Michael lo miro con los ojos llorosos.
— No se, solo escuche como soltaron disparos y de ahí nuestros hermanos se fueron a sus habitaciones corriendo y refugiándose. Yo no pude, un hombre estaba a punto de atraparme.
