𝗨𝗡 𝗡𝗨𝗘𝗩𝗢 𝗔𝗠𝗔𝗡𝗘𝗖𝗘𝗥

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El sol comenzaba a alumbrar haciendo que pequeños rayos de luz pasen atreves de la cortina del cuarto de ao’nung, el cual al sentir aquellos rayos en su rostro se removió un poco sintiendo un ligero peso en su pecho el cual lo hizo abrir sus ojos suavemente viendo a un tranquilo omega dormir en su pecho dejo suaves besos en su rostro logrando que aquel chico se acomode abrazando al chico por su cintura dejando besitos en su cuello soltando un suave buenos días.

— Buenos días teyam — sonrió enredando sus piernas con las de él con una sonrisa.

Pasaron unos minutos acostados juntos, hasta que neteyam vio como ao’nung se levantaba desnudó se sonrojó pero no pudo evitar mirar el cuerpo de ao’nung si que estaba trabajado se sonrojo mas cuando sus miradas se cruzaron.

— Teyam, si quieres jugar solo dilo — sonrió molestando a su pareja esquivando un cojín que le había lanzado.

Neteyam vio como entraba al baño para el darse una ducha, pero antes de eso le propuso que se bañen juntos ao’nung espero a que neteyam se levantara de la cama lo cual no sucedió ya que aquel chico le dolía su espalda baja y sus piernas.

— Nung, no puedo me duele — miro al chico cubriendo su rostro.

— No seas tímido, además tu eras el que gemías pidiendo mas — sonrió giñando su ojo.


Neteyam se sonrojó mas, al sentir los suaves brazos de su pareja alrededor de su cuerpo enredo sus brazos en su cuello afirmándose de el, para su suerte ao’nung había preparado la bañera con agua tibia dejo a neteyam en el agua primero escuchando un quejido de parte de él por el dolor, se metió junto a el acercando su cuerpo suavemente al de el.

— Sabes, despertar asi me gusta mas — dejo un suave beso en su hombro desnudo abrazando su cintura.

— Digo lo mismo lobito — se acomodo entre sus brazos, dejando su cabecita en su pecho.


Ambos quedaron en el agua un buen momento juntos mientas conversaban de cosas que tenían planeadas en un futuro el cual cada uno estaba presente en el otro, ao’nung voltio a neteyam dejándolo encima de el mientras sentía las suaves caricias en su peló, poco a poco el ambiente se fue poniendo un poco caliente ya que ambos aun no saciaban sus ganas por estar cerca del otro, ao’nung levanto un poco el cuerpo de neteyam haciendo que su miembro entre de una forma brusca en el haciendo que neteyam suelte un gemido algo fuerte, ao’nung sonrió dejando su cabeza en el pecho de neteyam dejando suaves besos húmedos, dejando mas marcas aun junto a chupetones en su pecho, mientras que neteyam se movía encima de el aferrándose a sus hombros, mientras que ao’nung se encargaba de dejar marcas en su cuerpo y cuello si era posible en cada parte de su cuerpo sería capas, luego de unos minutos de placer ambos terminaron llegando al clímax juntos por lo que se besaron con todo el amor que sentían mutuamente, ao’nung salió de la bañera colocándose una toalla alrededor de su cuerpo, mientras que tomaba otra para sacar a neteyam de la bañera, este le gustaba ser cargado por su alfa.

— Bueno tu ropa no se donde termino, asi que si gustas usas de la mía. — sonrió dejando a neteyam en su cama.

Mientras que neteyam se secaba su cuerpo con aquella toalla, ao’nung buscaba ropa para aquel chico, al encontrar ropa para el se la entrego en sus manos para luego ir a vestirse el, neteyam coloco los bóxer que le había pasado los cuales tenían diseño lo que le pareció lindo, ya vestido noto que aquella playera le quedaba grande, sus piernas no dolían tanto pero su parte baja si dolía como un infierno.

— Eres un hormonal — soltó neteyam de la nada mirando a su pareja, noto como soltaba una carcajada.

— ¿Yo?, Quien era el que pedía…— no alcanzó a terminar la frase ya que su boca fue tapada por las manos de neteyam.


— Ya..no hables — dijo sonrojado mirando a su pareja.

— Ven lobito vamos a desayunar — tomo en brazos a su chico bajando las escaleras con el.


No iba a mentir desde que neteyam llego a su vida fue un gran cambio la verdad le encantaba pasar tiempo con aquel chico de ojos miel, qué ahora lo había marcado y ningún alfa baboso podría marcarlo o hacerle daño no mientras el estuviera a su lado.

— Umh…nung tus tostadas se queman — apunto con un dedo aquel tostador.

Una risita salió de los labios de neteyam viendo como su chico, apagaba el tostador se paro con cuidado yendo a ayudarlo.

— Ve y pone la mesa yo te ayudo — sonrió preparando el desayuno mientras aquel chico dejaba un beso en su mejilla mientras que el cocinaba.

Luego de unos minutos de que neteyam prepara el desayuno ambos se sentaron a comer juntos.

— Oye pececito, ¿Cómo le diremos a nuestros padres? — comió una tostada mirando a su chico.

— La verdad, ni yo lo sé tarde o temprano se van a enterar — sonrió abrazando a neteyam dulcemente.


Luego de un desayuno lleno de caricias y amor se sentaron en el sofá a ver una película, neteyam quedó acomodado en el pecho de ao’nung mientras miraba la película entretenido su espalda baja había dejado de doler ya que ao’nung le había dado un remedio aun le costaba sentarse, pero ya había pasado un poco el dolor.

Al pasar algunas horas neteyam se despidió de su querido alfa ya que era hora de irse a su hogar ya que su familia volvería pronto, al abrir la puerta se topo con la familia de ao’nung, los saludo nervioso mirando a los padres y hermanos de ao’nung.

— ¿Lobito?.. ¿Qué pas — no logro terminar su frase al ver a su familia les sonrió con la mejor cara que tenía — madre, padre bienvenidos — sonrió ao’nung saludando a su familia emocionado.

— Neteyam querido, nos das unos minutos — le sonrió ronal mientras veía como neteyam salía de la casa.


Al entrar ronal con su padre ao’nung solo rezaba internamente en sus adentro por que su madre no le tire algo que le pueda causar algún dolor, a penas cerro la puerta cojines y ropa volaron en dirección de ao’nung.

— Eres un burro mira como dejaste al pobre chico — su madre le lanzo un cojín.

— Oye ma, tranquila bueno esta mal al principio no podía caminar por que lo hicimos toda la noche pe…— ao’nung se dio cuenta que se le escapó lo que habían hecho al mirar el rostro de su madre este salió de la casa saludando a neteyam con una sonrisa — nos vemos mañana lobito — beso sus labios con dulzura.


Neteyam le iba a avisar de aquella pantufla que venia en dirección hacia el pero choco en la cabeza de rotxo aguantando su risa se despidió de tsireya y rotxo yéndose a su casa con una sonrisa alegre.

Ao’nung sonreía como bobo mirando a su novio irse pero una pantufla lo saco de su sueño, suspiro debía calmar a su madre o tendría a su hermano aquí mismo.

Neteyam al llegar al abrir la puerta de su hogar lo’ak junto a su madre lo olfatearon y sintieron solo aroma de ao’nung en el cuerpo del chico lo cuál su madre se cruzo de brazos alzando su ceja.

— Madre…yo — se sonrojo intentando explicar a su madre.

Con solo ver la marca que había en su cuello sabían ambos lo que había pasado neteyam vio como su madre salía junto a lo’ak detrás de ella fue junto con ella se iban a la casa de ao’nung, jake su padre iba detrás de el para calmar la citación.

Tonowari al abrir la puerta se hizo a un lado temiendo por su vida cuando ve a jake ambos se miran y intentaron calmar a sus esposas pero con solo una mirada se alejaron.

— Mamá, yo le di el permiso a ao’nung para que marque mi cuello y sea mi alfa — ronal junto a Neytiri se calmaron.

— ¿Eso es verdad hijo? — ronal lo miro viendo como su hijo asentía varias veces.


— Perdón hijo es solo que creí que habías corrompido…al pobre chico. — lo miró apenada disculpándose.

— No sabes cuanto corrompí a neteyam — al decir eso se arrepintió  ya que lo salieron persiguiendo.


Neteyam no pudo contener su risa haciendo reír a toda la familia sin duda su novio era un bobo pero aquel bobo lo amaba.

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tu vidɑ despues de lɑ miɑ. (Ao'nung X Neteyam) 🌷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora