Capítulo 14

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Los pensamientos en una persona podían llegar a ser tan poderosos si duraban más de cinco segundos en la mente. Llegando a sucubir el lado racional y dando rienda suelta a las acciones espontáneas o sobrepensamientos que no terminarían.

Jimin, solo podía volver a repetir en su mente la escena de aquel beso en el suelo de su casa; recordaba la suave textura de los labios de Yoongi abriéndose paso en su boca y aquella lengua invitándolo a olvidarse de todo.

Llevaba minutos pensando en ello, tenía miedo de que sus pensamientos le jugarán una mala jugada y terminara volviendo sus brazos. Debía despejar su mente y solo concentrarse en tomar el camino correcto hacia la casa de SeokJin, no debía dudar ni pensar en que su felicidad estaba en Yoongi.

No cuando él lo había traicionado.

Solo había pasado un par de horas con su hermano, comieron juntos y después DaeSun tuvo que ir a trabajar pero le pidió que volviera a visitarlo pronto.

Jimin camino un par de cuadras antes de encontrarse a Jungkook recargado en un árbol, pareciese que lo estuviera esperando.

– Te encontraste con él, ¿Cierto? – el tono que utilizo había sido con cierta molestia y frialdad haciendo a Jimin morder su labio inferior.

– Sí me encontré con Yoongi. Pero mi hermano llegó y él no pudo hacerme nada.– explicó sintiéndose mal por mentirle, pero no podía decirle que se besuqueo con él.

El silencio los invadió a ambos, Jungkook parecía ido en sus pensamientos solo teniendo un rostro indiferente. Tras un suspiro Jungkook habló:

– Namjoon recordó todo. Huí de ellos porqué no pude soportar mirar a mi padre ser tan cariñoso con alguien. No pudo asimilar la idea de que mi segundo padre regreso y se ve demasiado jóven.

Parecía afligido como si lo que sucediera fuese un sueño que no llegaba a comprender. Jimin comenzó a sentirse nervioso porque no sabía que reacción tendría Namjoon cuando lo viera, esperaba que hubiese olvidado todo sobre sus sentimientos.

– Sé que es difícil pero tendrás que acostumbrarte poco a poco. Además, ¿No estás feliz de tener a tú otro padre? Debió ser difícil para Seokjin criarte el solo, que sé debe esperar que tú aceptes a Namjoon. A final de cuentas él no tuvo la culpa de morir.

– No le tengo rencor, pero por más que lo pienso es difícil verlo como un padre.

Jimin solo pudo darle una palmadita en el hombro a Jungkook sin saber muy bien que más decir, pues aunque quisiera ayudarlo a aclarar su mente el se sentía hecho un lío de pensamientos y emociones.

– Anda. Tenemos que regresar antes de que se oculte el sol.

Con un último suspiro, Jimin supo que debía seguir con el plan sin dudar.

Los labios de Yoongi no debían importar.

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La marca del demonio [YOONMIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora