INVICTUS

VI.

Lena POV.

Casi podría estar saltando de felicidad por saber que al fin se cumplió mi castigo en esta asquerosa celda; pero ni siquiera puedo celebrar eso porque todo mi cuerpo está completamente entumecido por la mala postura qué me he obligado a mantener todos estos días aquí. 

Cada segundo qué pasaba en este asqueroso lugar, había sido una larga porción de infierno entre la terrible suciedad junto a la humedad asfixiante del lugar, sin mencionar las malditas visitas de los guardias para golpearme en mí rostro, brazos y en partes no visibles de mi cuerpo cubierto por mi viejo uniforme de prisión. Unas veces era Matthews quién venía a golpearme y en otras ocasiones era Sawyer quién venía a decir un montón de idioteces o aveces fueron ambos los qué venían a golpearme sin dejarme posibilidad de defenderme de alguna forma, y no es qué tuviera muchas energías para hacerlo de todas formas, porque no había podido sanar ninguna herida y con la poca comida y agua qué recibía en éste lugar, era prácticamente un milagro qué no hubiera perdido por completo la conciencia en las rondas de sus desagradables visitas a mí celda de castigo. Pero tengo qué confesar qué sus golpes no me lastimaban tanto cómo sus crueles palabras, y no quiero creerles porque sé que sólo las decían para seguirme fastidiando más y más, pero no puedo negar qué muy en el fondo tengo miedo de qué haya algo de verdad en lo que tantas veces me dijeron. Y todo este tiempo aquí encerrada nada más qué con mis pensamientos cómo compañía y con las palabras llenas de cizaña de esos guardias carcomiendo mi endeble tranquilidad, lo único qué podía desear pedir era qué no fuera cierto qué era Kara la qué los enviaba hasta aquí para golpearme, cómo no podía ir la directora hasta la asquerosa celda de castigo en la qué me encuentro, los mandaba a ellos para cumplir con lo qué Kara no podía. Pero recordaba enseguida qué mi linda rubia nunca me golpeó o me lastimó de alguna forma física en todos estos años desde que afortunadamente la conozco, porque Kara no hizo algo más en mí qué hacerme sentir amor por ella y tenerme por completo a sus pies; y eran esos momentos en los qué estaba segura de qué ella sería incapaz de algo así; y qué sólo eran Matthews y Sawyer molestándome con un rencor hacia mí sin justificación, salvo por supuesto la gran estupidez de ambos. Pero luego mi mente pesimista por momentos, me recordaba qué ella no llegó a esa bendita enfermería esa última vez, dejándome plantada y esperando tan ansiosamente por ella, por tenerla junto a mí y no podía evitar pensar en qué quizás sí existe la posibilidad de qué las cosas hayan cambiado entre ambas para siempre y qué Kara envié a sus guardias para darme el amargo recado. Pero al final del día, terminaba por negarme a seguir pensando así, dejándome influenciar por las cosas qué dicen esos ignorantes guardias, manchando a una persona tan justa cómo lo es mí rubia; porque Kara, puede qué sea muchas cosas, pero de lo qué sí estoy segura es de qué ella no es una abusadora y menos una cobarde, y sí Kara quisiera lastimarme de alguna forma o terminar con lo poco qué tenemos, lo haría ella misma mirándome directamente a los ojos mientras sus labios dejaban salir con palabras claras todas sus intenciones y cuándo llegue ese momento, esas palabras me dolerán más qué cualquier golpe qué haya recibido en toda mi vida.

El ruido fuerte de la reja abriéndose, me saca de mis pensamientos. Parpadeo rápidamente buscando el origen y pronto veo el insufrible rostro de Matthews entrando a mi celda.

- Estás de suerte, Luthor.- dice con sorna desde la entrada, mirándome cómo sí estar aquí conmigo es lo qué menos quisiera hacer y por primera vez en la vida, estamos de acuerdo en algo porque qué fastidio tener a éste intento de hombre cerca. - La directora ordenó tú presencia inmediata en su oficina.- me avisa con desdén y a pesar del enorme desagrado qué me causa éste inútil guardia, mis labios forman una enorme sonrisa por saber qué volveré a ver a Kara. - ¿Por qué sonríes así? Eres una pobre estúpida, Luthor, sí piensas qué con la directora Zor-El te irá mejor de lo qué te fue con Sawyer y conmigo aquí.- me dice con burla. Borro al instante mi sonrisa mientras gruño a él llenándome de rabia por sus palabras. Él no tiene idea de quién es mí hermosa rubia sí piensa algo así de Kara.